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De regreso a la finca de Omar

Había pasado un mes desde que regresé de viaje de la finca de Omar, fué una semana de sexo tanto con Atala como con sus hijas Victoria e Irene. Esa tarde , me llama Omar para saludarme y contarme que ese mismo día había regresado de su viaje, y supe que le había acompañado la ex-esposa de su socio. Me comentó maravillas de ese mes en compañía de tan hermoaa pareja, y luego me preguntó como me había ido y sentido en su finca la semana que estuve por allá. Le comenté de los días de tormentas, y cuando me preguntó si me había cogido a alguien del lugar, sólo le comenté de Atala. No podía decirle nada de Victoria, uno porque era casada y segundo que al decirle algo él iba a descubrir que yo sabía que el la había desvirgado y por eso eran los pronlemas conyugales de ella. Tampoco podía decirle nada de Irene, porque sabía de la relación que sostenían y era crearle problemas a la chica. Decidimos irnos a pasar juntos unos días a la finca, y yo pensé llegar un día antes que él llegara porque quería estar con Irene. Pasé a la escuela por ella y nos fuimos a un río, y allí hicimos el amor de forma estupenda, pero cuando estábamos echando el segundo palo, sentí más humedad en su concha y un olor raro, cogiendo le había venido su regla.

Esperaba a Omar hasta el día siguiente pero se apareció esa misma tarde, me dijo que iríamos a una reunión al poblado cercano, ya que había una habitación para una fiesta de 15 años y que él llevaría como pareja a Irene, y que en el poblado me presentaría a alguien para que me hiciera compañía. Ya en el poblado él estaba un poco molesto, y me dijo que esa noche quería pasarla cogiendo, y en forma de confesión me dijo lo ue yo ya sabía: Hoy me llevó la chingada la chica está en su período.

Irene en un momento dado llegó acompañada de una mujer como de 24 años, mediana estatura delgada, de cuerpo sensual, vestido escotado que dejaba ver casi la mitad de un par de presiosos senos medianos, cintura fina y culito parado, era China de raza, pero era un rostro soñado, su cabellera negra recogica como en forma de nudo atrás de su cabeza, mostrando un cuello fino y hermoso. Me dijo le presento a la profesora de la escuela, de quién ya le había hablado, y ella, estaba también deseosa de conocerlo. (recordé cuando Irene me contó que se había vuelto muy curiosa y preguntona, cuando Atala le dijo que ne había visto durmiendo sin ropa y que tenía el pene grande y grueso). Empezamos a bailar y a charlas durante la velada, la fuí a dejar a la casita donde vivía, y al día siguiente y los tres más que estuvimos en la finca, la iba a recoger a la escuela y la llevaba al poblado. En ese tiempo sólo el último día al despedirnos nos dimos un beso.

Omar le rentó una casa a Irene en el poblado y practicamente la aisló de la familia, la convirtió en su amante declarada, por lo que yo respeté esa relación y no hubo nada más, aunque ella me lo pedía, se acabó. Cada fin de semana íbamos con Omar a la finca, él con Irene y yo cortejando a la chinita, se me había metido en la cabeza que la iba a coger. Así pasaron cuatro meses, y no me soltaba el culo. Vino la época de semana santa, y los padres de ella tenían un restaurante de comida china en la cabecera departamental se Suchitepequez, un restaurante de excelente prestigio y de mejor calidad en su comida. Esa semana Santa cambió todo, la logré conquistar de una vez por todas y nos fuimos los cuatro a la playa, esa noche oíamos los pujidos y gemidos de Omar e Irene, algo que nos empezó a excitar, y las caricias fueron subiendo de tono, quité su traje de baño y nos metimos a la ducha, ella no quitaba su vista de mi verga que estaba durísima y enorme, y no era pàra menos tener frente a mi ese cuerpo finito y delicioso, nos enjabonamos y froté sus deliciosas nalgas duritas y paraditas, redondas eran realmente exquisitas, y su coñito pequeño cubierto de suaves vellos. Ya en la cama empezé a besar su cuerpo suave y terso de pies a cabeza,sus pezones deliciosos se pusieron erectos en mis labios, su clítoris vibraba en cada lamida vigorosa, su raja estaba empapada de jugos ligosos y agridulces, mamó mi verga con delicadeza y auquie era su primera mamada sentía deliciosa su boca pequeñita chupando mi glande, me hizo terminar y yo a ella, pero la pija no se aguadaba era un mastil de carne hinchada, coloque la verga en su entrada, mientras la besaba con pasión, deslizó la cabeza, la saque y la volvía a meter, ahora un poco más, hasta sentir que topó, ella gimió y me dijo por favor despacito soy virgen, estaba tensa y temblaba, la empezé a besar de nuevo, pero con mi miembro ya haciendo presión sobre su himen, cuando estaba ya relajada me dí un envión su himen se destrozó y la pija se fué abriendo camino en su vagina, suuspiró profundo. jalando aire, abrió totalmente sus piernas y de otro envión la metí toda, ahogó su grito en mi cuello, la besé con ternura, pero ya sentí el sabor salado de sus lagrimas que había corrido a la comisura de sus labios. Sus piernas empezaron a temblar de nuevo, sentí las perlas de sudor en su frente, le pregunté si quería parar ahí, me dijo que no, que se iba a aguantar, que si durante mucho tiempo deseó ser penetrada por una verga inmensa, y más siendo la mía. Lentamente empezé a meter y sacar, me dijo que ya no sentía tanto el dolor pero si el ardor, pero con la frición del tronco en su vagina esta fué acostumbrandose, y poco después ya seguía mi ritmo, quería más rápido y le dí rápido, luego empezó a gemir, y a moverse en círculos, se respiración fué más agitada, subió sus piernas a mi cintura se pegó más a mi y sus brazos apretaron mi espalda, se arqueó y ah, que rico papi, oh, así así asií, aflojó el cuerpo y se quedo inmovil, se había venido, aceleré mi ritmo y luego las explosiones de semen en su interior, eran casi las tres de la mañana, nos quedamos profundmente dormidos. Al despertar las sábanas como testigos de lo ocurrido, jugos, semen y sangre, ella seguía durmiendo, yo me duché y me acosté a su lado, su culito estaba hacia mi lado, redondito precioso, su cintura fina y sus hermosas curvitas al terminar su espalda, coloqué la pija en la entrada de su coño, empujé se fué la mitad, y ella rápido se quitó y me dijo que no, que le ardía demasiado, que disculpara ella lo deseaba pero no aguantaba el frote, y me dijo que tratara de meterlo por el ano, ni lerdo ni perezoso, tomé un pomo de su crema y embarré mi pija, y con un dedo primero, luego dos y tres, adentro de su culito,preparé el terreno, del primer intento la cabeza y dos pulgadas más, al cabo de un rato la tenía al tope, y era tanta la calentura que no tardé mucho en correrme. Cuando fuimos a desayunar disimuladamente Omar E Irene sonreían al verla caminar, y más aún después de salir de la piscina, y meterse a la ducha, de la orila de la pileta, y le resbaló jabón por su panochita y culito, y aún mas indiscreta Irene, cuando le dijo, profesora verdad que la primera vez duele y arde?. Fueron felices y deliciosos los fines de semana que junto a Omar ibamos a ver a nuestras mujeres, Omar embarazó a Irene, y hasta la fecha viven juntos, con Zao, que así es el nombre de la chinita, tuvimos una relación por más de tres años, ella dejó la escuela, heredó el restaurante de sus padres, y ahora vive casada con otro Chino.
Datos del Relato
  • Categoría: Primera Vez
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