Esta historia no es una común historia de sexo, es una historia en la que prevalece la espera, la tenacidad y la audacia.
Desde hace años esa mujer me hace sentir diferente, aniñado y rejuvenecido. Tengo ya los 40 al igual que ella vivimos casi al lado nuestros niños estan siempre juntos y las hermanas se llevan realmente bien.
Todo empezó hace muchos años, ella se caso con un muchacho espectacular, famoso, alegre, adinerado, hijo único, etc, lo tenia todo, para mi es como un hermano al igual que yo para el.
Con el tiempo empezó a aburguesarse, del trabajo a casa y viceversa pasando por el bar mas de la cuesta, llegaba a casa con sueño y se dormía en lo mas barrido, cada vez que salíamos ella salia sin marido, contaba conmigo para todo, reformas del hogar, pintura, reparación de desperfectos,
yo cada favor le decía en broma ya me las pagaras.
Efectivamente llego el día de cobro, era una noche de verano de vacaciones en la montaña, tras estar toda la mañana andando por esas montañas la siesta fue eterna, claro solo dormimos nosotros los demás se bañaron, jugaron y bebieron, por lo cual al anochecer calleron que ni muertos.
He aquí cuando empezó mi periplo, sin sueño y con el terreno libre, empezamos a hablar y beber, en una espacie de cena romántica en un mantel retirados de la cabaña, tras cenar y mirando a las estrellas nos dimos cuentas que en la piscina no había nadie e iniciamos el baño, para llegar allí había que dar un rodeo el cual se escuchaba si alguien se acercaba, estando en el agua empecé a quitarle la parte de arriba del biquini ella se molesto, pero no mucho y con la guasa del momento le intente quitar la parte de abajo la cual se resistió, no mucho paro se resistió, cuando estaba totalmente desnuda empecé al juego de las ahogadillas pasandole el miembro por detrás tras varias zambullidas ella me miro muy seria y me dijo eres un fullero, me quede parado sin saber que quería decir y de momento ella me desabrocho el bañador y bum . Salimos fuera del agua empezamos a besarnos como quinceañeros, un muy buen rato luego empecé a acariciarle la espalda con un masaje que empezó por los hombros y termino en mi lengua en sus nalgas ella me dijo que nunca la habían masajeado así pero cuando le di la vuelta le comí los pechos (esos que hacia años que deseaba) y luego desplacé mi lengua por el peludito conejo, solo el primer lengüetazo ella se corrió y no tardo en confesarme que nunca se lo habían echo a lo cual respondí. ¿y tu lo has hecho? no pero. Y empezó a chupar sin haberlo echo nunca empezó por la puntita pero al tiempo que me la comía y yo le acariciaba el clítoris mas se tragaba la polla, hasta el punto que me corrí y ella se lo trago pensando que era saliva (creo yo) inmediatamente después seguimos con los besos y posteriormente seguimos con una penetración en ese conejito que pedía comida como ella me confeso, tras unas buenas embestidas le di la vuelta y empecé a encularla, ella se resistía a lo cual yo le dije, hoy lo pruebas todo y vas a salir hecha una mujer de una vez, entonces me agarro los brazos y empujo hacia atrás hasta que se la clavo ella sola, la hija puta chillo como un animal, y a mi me dolió hasta el punto que se la quería sacar, pero ella no me lo permitía, seguimos y seguimos yo la enculaba y le pajeaba el coño se corrió dos veces mas y yo una segunda vez en todo su culo, no se si me gustaba mas follarla o escucharla gemir.
Descansamos nos miramos nos besamos y nos fuimos a dormir.
A la mañana siguiente como si nada hubiera pasado, yo tenia un dolor de pene de cojones, ella me vio tocármelo y cuando paso a mi lado me dijo tócate, pero que ese es mio.
Esta historia aunque pesada en muy especial porque ahora tras varios años de lo sucedido nadie se ha enterado y solo se ha repetido en dos ocasiones mas pero QUE DOS OCASIONES.
muy bueno...!! esta fue la primera.... y la segunda..?