Entendiendolo perfectamente por la situación que vive y padece hasta conocida por Yessenia en la forma que se lo platica el taxista. Derramando lagrimas a cantaros como destilando con mucha impotencia al no poder defenderse y actuar como el jefe del hogar, secandole con un pañúelo las lagrimas del taxero dulce como amable hasta comprendiendolo finalmente sufriendo parejamente en silencio Yessenia; con la mano en su corazón consolandolo con un abrazo y frotandole el hombre soltando unos llantos incontrolables e inegables la propia Yessenia yo vivo lo mismo que usted, un verdadero calvario e infierno junto a mi esposo. Hablandole que por cualquier bobada, pendejada, estupidez, idiotez, pleito, por tercero, chismes, en fin todas las vaínas que se imagina amargandonos como envenenandonos hasta odiandonos a muerte transcurriendo mucho tiempo al reconciliarnos e inclusive, sentarnos calmadamente a hablarlo como arreglarlo como personas civilizadas que conviven y viven en sagrada comunión matrimonial.
Desahogandose como calmandose los dos, el taxero le pone la mano en su pierna frotandola agradeciendole que sea su oído para sacarse todo esto igualmente mi paño de lagrimas sinceramente y con alguién que tenga la misma situación en que estoy viviendo y pasando en estos momentos tristes de mi vida. Sonriendole y besandole en sus labios Yessenia se vuelven al asiento trasero aprovechando el camuflaje de los arbustos que lo difrazan de la carretera, entregandose mutuamente al ligarse cuerpo a cuerpo también sentimientos a sentimientos además, dolor a dolor hasta sufrimiento a sufrimiento, etcétera. Follandose encima del taxista que la adorna con sus tiernas manos alrededor de su cintura bajando a sus muslos como entrepiernas llevando y vistiendo por parte de Yessenia el uniforme de ejecutiva universitaria con la falda arriba de la cintura puesta; besandole sus pechos con la blusa desabrochada arriba del brasier con todo el saco puesto.
Agarrada y afirmandose en los respaldos de los asientos delanteros la coge dura y apasionada como agresiva e incluso, salvajemente por el taxista notandose que esta carente de atención como de amor, luego de transcurrido unos segundos le habla Yessenia ya te vinistes al contestarle sumamente agradable, franco y relajado el taxista si se siente al lado derecho del taxista al acomodarse el brasier al abrocharse la blusa como subirse el hilo dental con las medias y bajarse y arreglarse el pliege de la falda del uniforme. Peinandose y retocandose el maquillaje al secarse con el mismo pañuelo el barbaro sudor que se cargan ambos por el breve momento que tuvieron y realizaron entre los dos.