La proxima vez que volví donde Gustavo sus otros hermanos, eran tres, me recibieron con afecto especial, jugue con él un rato, aparentemente no sabía nada de lo pasado,luego salió con su hermana y me quedé con los otros. Me llamaron para el cuarto y noté que los tres ya tenían la pinga parada, el que mhabía desvirgado me llamó, me abrazó y me dijo que me desvistiera , que no me iban a hacer daño,m imagino que tiraron una moneda y le tocó al mas joven de los tres, tal vez tenía 18, se sento en una silla y me haló hacia el, su hierro no era muy grande, pero si estaba durísimo y caliente, me lo metió suavecito, sin dolor y empezó a sacarlo y meterlo, no aguantó mucho , creo que estaba cachondo porque inmediatamente me llenó el culo de leche. A continuación vino el mayor, tal vez de 23, me acostó boca abajo , mepuso dos almuadas debajo de mi cadera y mi culo quedó expuesto como una flor, se arrodillo detrás y me lo empujó todito, creo que era el más pequeño de los tres, sentí sus bolas inmensas entre mis nalgas, pegando de las mías, este si me dió duro, lo sentía bien adentro pero sin mucho dolor, hasta que acabó llenándome de su leche y extremeciéndose de pies a cabeza, me lo sacó y sentí como se vaciaba mi ojete. Beto que así le decían al que me había seducido, me limpió con un paño húmedo, me puso una crema fresquísima en el ano , se embadurnó la pinga y poniéndome como una perrita me lo embutió todo, creo que era la más grande y gruesa de las tres, pero igual que la primera vez, me lo sacó y metió montones de veces hasta que se desmayó dentro de mí echándome borbotones de leche. Después de este día cada vez que iba , por lo menos uno me lo metía...
Un día apareció El Viejo, un tipo altísimo y fortísimo que aparentemente se cogía a una vecina solterona. Se hizo muy popular, aparentemente por que había sido jugador de baloncesto. Todos los muchachos de mi edad lo querían y a el le gustaba sentarse los más pequeños en las piernas.Yo no sé si alguien le dijo algo o se me notaba en la cara que me habían cogido ya,lo cierto es que una vez me invitó a dar una vuelta en su carro que era inmenso, creo que Lincoln o Cadillac. Se detuvo en una plaza solitaria se sacó la pija y me pregunto si había probado alguna, le dije que me la habían metido por el ano, me pidió que se la tocara, estaba semi dura, no estaba tan grande pero se notaba que era gruesísima,tibia, suave y rosadita, se le marcaban una venas increibles que lo recorrían de arriba a abajo, comencé a masturbarlo y esa vaina se puso como una barra de hierro, creció un poco más pero lo que impresionaba era el diámetro, me pidió que lo besara, nunca yo lo había hecho, los otros muchachos siempre lo tenían parado y simplemente me lo metían , ninguno se le ocurrió nunca ponerme a mamárselo. Comencé a besar esa cabezota como un hongo, , me la fui tragando poco a poco, casi no me cabía en la boca, sentí que ese hierro latía, que las venas iban a explotar y de repente me apartó y soltó una fuente de leche que nos bañó la cara y sus pantalones. Me dijo que nunca me tragara esa leche, que siempre después de hacerlo me lavara bien la boca con enjuague bucal.
Seguimos rodando por la ciudad y mientras el conducía, yo acostado en ese asiento delantero tan grande se lo iba mamando, se detuvo de nuevo y volvió a acabar. Así lo hacíamos siempre a veces tenía hasta tres orgasmos ,todos ful de semen; pero nunca pidió penetrarme.
Un día se apareció con un amiguito de 18 años y nos fuimos los tres a pasear, yo comencé a mamárselo como acostumbraba mientras el muchacho empezó a masturbarse en el asiento trasero. Cuando acabó, me fui para atrás y el amiguito trato de penetrarme, yo me dejaba y hasta traté de ayudarlo, pero no se le ponía duro les juro que yo no entendía como los vecinos con solo imaginarme y verme el culito ya lo tenían parado, este en cambio me lo ponía en el ojete todo lleno de baba y saliva y no entraba, lo intentó un buen rato , recuerdo que el viejo le preguntaba si me lo había metido todo, si había acabado, a lo que el respondía que síi ,pero yo sabía que era mentira, yo no sentía ese hierro dentro del culo. El Viejo lo pasó a él hacia el asiento delantero y el chico se lo empezó a mamar.Cuando El Viejo acabó, el chico volvió hacia mí, tenía una erección inmensa , trató de cogerme pero no pudo, se le ablandaba y no entraba en mi culito...me quedé con las ganas.
Al poco tiempo apareció Arturo, era grande, fuerte y semigordito, nos hicimos amigos jugando ajedrez, jugábamos varias partidas por día en su casa, en mi casa en el club social hasta que una vez fuimos al baño juntos a orinar y le vi la pija, coño eso era descomunal, frio medía como 20cm.,pero tenía la cabeza como trompa de elefante o como el pipe de un burro. El inmediatamente notó mi curiosidad y la próxima vez que fuí a su cuarto me la mostró. Era grande de verdad, se la toqué y empezo a reaccionar, se acostó boca arriba y yo comencé a engullir aquel salchichón, les juro que apenas me entraba un cuarto en las boca, era suavecito y botaba fluido en cantidad, cuando lo ví en todo su esplendor, me quité toda la ropa y me le sente de espaldas a su cara para que me empalara, me pasó aquel cabezón varias veces por mi culito, me metió uno y dos dedos empapados en baba y saliva pero esa cabeza no entraba, me puso boca abajo y trató de hacerlo y de repente eyaculó bañandome todo con su leche, inmediatamente la erección se le cayóo y lo dejamos así para una próxima oportunidad que nunca llegó, tal vez fue mi angel protector que no permitió que esa mandarria me destrozara el culo....
Continuará
Cuantos has probado,que edad tienes????,osea mi santo protector no me ha dejado probar ninguno???