Teresa y yo nos habíamos conocido en el colegio, ella tenía 14 y yo 16; primero estuvimos de enamorados,y al año casi, nos acostamos, recuerdo que fué un día domingo en casa de unos tios,ellos se habían ido de viaje,y me dejaron las llaves para darle de comer al perro; fuimos Teresa y yo a la casa, era grande y lujosa, le comence a enseñar la casa, y al llegar al dormitorio principal, una cama gigante de matrimonio,una alfombra roja en todo el suelo,ventanales a dos lados con vistas panorámicas,no pudimos resistir tanta tentación, ella se sentó en la cama, yo a su lado, nos empezamos a besar,luego siguieron las caricias, los tocamientos, estábamos nerviosos éra la primera vez de los dos, luego la desvestí poco a poco y ella a mi; desnudos nos entregamos nos desfloramos, sentimos dolor, calor ,pasión, y mucho amor, nuestros cuerpos se entrelazaron y mi pene profundizó por vez primera una vagina que también era virgen; el orgásmo llegó fabulosamente, derramando mi semen dentro de ella.

Nuestra relación siguió lo que restaba del colegio, y luego la universidad; yo hice Medicina,y ella enfremería, terminamos casi juntos las carreras, habíamos hecho el amor miles de veces, en su casa, en la mía, en el coche de mi padre, en el de su padre, en la playa, en el campo,etc.

Ambos entramos a trabajar, en el sistema rural de salud, que es obligatorio para luego acceder a hospitales del estado; y empezamos también con los planes de boda, éramos muy felices, llevábamos casi diez años de relación,y nuestras familias estaban muy contentas con nuestro compromiso.

De pronto llega de Europa, una tía de Teresa, que también era enfermera, le llena la cabeza de ideas, y la convence para llevársela a trabajar, que cobraría veinte veces más, que tendría más oportunidades de todo, etc,ect. Teresa accedió, su familia también, me convencieron de que luego iría yo también, mi familia estuvo de acuerdo, al final ,yo también. Al año de estar Teresa en Europa, pude recién viajar yo.

Al llegar, la encontré muy cambiada, el viejo continente, la había transformado; de ser un chica desinteresada,espiritual, cariñosa y pasional; se había convertido,en materialista, fria, seca, nada que ver con la que yo había conocido y amado; desde el primer momento, llegaron los problemas, el piso de su tía tenía tres habitaciones, en una estaba su tía, en la pequeña otra enfermera mayor,y en la más grande Teresa y luego yo más,ésta tenía cama de matrinomio´: me instalé con ella,como si estuviésemos casados, algo nuevo para mí, que nunca había salido de mi casa y que pensaba hacerlo al casarme con Teresa, como todo varió, acepté de buen grado la nueva situación.

El encuentro fué menos grato a lo esperado, no obstante hicimos el amor casi todos los dias al principio como los recién casados, luego fueron a menos; ella solo pensaba en trabajar y traer a toda su familia; yo empecé de médico en una clínica privada; Teresa trabajaba de enfermera en tres clínicas públicas y privadas, cobraba el triple que yo, y empezó un poco a menospreciarme,la relación se fue deteriorando cada vez más

Un día se mudó de la casa la enfermera mayor,en su reemplazo llegó una chica del norte, era médico recién licenciada, había aprobado la oposición para la residencia en pediatria y la habían destinado a un hospital, al conocerla, creo que se produjo un flechazo por parte de los dos, yo hacía poco que habia obtenido la homologación del título de medicina, y había cambiado de trabajo a uno mejor; por ello al tener la misma carrera inmediatamente congeniamos; además teníamos el mismo horario de mañanas hasta las tres y dos tardes,más una guardia nocturna a la semana; Teresa trabajaba mañana,tarde y noche, no se sabía a qué hora dormía,comía o descansaba, siempre estaba liada y fuera de casa o durmiendo en ella

Todos los ratos libres empecé a pasarlos con Ana, compartíamos charlas de medicina, luego nos enseñamos juegos de mesa, salimos al cine, luego a bailar, éramos muy amigos, y aunque ella sabía que yo vivía con Teresa, también veía que ya casi no compartíamos nada, ni siquiera ya sexo. fué una noche que volvimos tarde de una discoteca, habíamos bebido, estábamos alegres, no había nadie en casa, Teresa en su trabajo de noche, y la otras de viaje, la empecé a besar, ella al principio quiso rechazarme, insistí una y otra vez, hasta que al final nos besamos, nos apasionamos, nos desvestimos, y nos metimos a su cuarto, desnudos enla cama, luego de las caricias, los besos por todo el cuerpo, y una excitacíon que hace tiempo no tenía ya, follamos, una y otra vez, hasta quedar extenuados y dormidos; tsnto roce se había convertido en amor y pasión por parte de los dos.

Al día siguiente, nos despertó Teresa, estaba hecha una furia, nos gritó, nos insultó, y nos dió una hora para abandonar la casa, se encerró con seguro en el cuarto de su tía, mientras arreglábamos nuestras cosas para marcharnos; Ana se puso a llorar, quiso pedirle perdón, pero no la dió opción; listas las maletas salimos hacia un hotel, desde donde buscaríamos otro piso.

A los tres dias nos fuimos del hotel a un piso que alqulamos, era un apartamento de una habitación, muy bonito y moderno, tenía piscina y garage; compramos un coche, unos muebles, electrodomésticos, etc.; allí empecé una nueva vida con Ana, ella tenía aun remordimientos, pero luego se le pasó, olvidamos a terese, y empezamos a follar todos los dias, en todos nuestros ratos libres, probamos todas las posturas, todos los juegos eróticos, la gustaba mucho el sexo, disfrutábamos con ello, hasta que un dia decidimos casarnos.

El matrimonio, a mí me sentó de maravilla, hasta aumenté varios kilos, sin embargo a Ana, la trastornó, hicimos planes de tener un niño, el niño no vino, empezó a dudar de su fertilidad y de la mía, desechó la opción de la inseminación asistida, no quiso ni hacerse las pruebas, empezó a perder el gusto al sexo, empezamos a discutir todos los dias, yo ya no quería ir a casa,llegaba tarde apropósito, hasta que un día en un centro comercial, encuentro a Teresa, creí que no me hablaría, al contrario, se acercò ella misma y me saludo muy efusivamente como si nada hubiera pasado; hacía más de cinco años que había salido de su vida, ella estaba guapa, delgada y elegante, conversamos largo rato, contándonos cosas, ella estaba sola, se había comprado un piso lujoso y un coche caro, había traido a su familia, pero no vivía con ella, yo le conté también mi vida con pelos y señales, esperando que me diga, te lo mereces, sin embargo su reación fué sorprendente, me dió consejos para superar la situación, para mejorarla o para arreglarla, yo no sabía que decir, ese día estaba enfadado con mi mujer, no quería ir a casa; Teresa me invitó a la suya, diciendo, comemos algo, tomamos algo, y se te pasará, luego vuelves a tu casa más sereno.

La comida, siguió a la bebida, luego nos besamos, nos apasionamos, recordamos nuestra vida en nuestro pais, nos desnudamis, y follamos, había recuperado su gusto por el sexo, su gusto por los juegos eróticos, lo hicimos tres veces esa noche, me chupó la polla como nunca, se la metí hasta por el culo, disfutamos del sexo como en los buenos tiempos.

Al dia siguiente, me levanté ella se había ido a trabajar antes, había una nota, me decía, ven cuando me necesites, nunca te ha dejado de amar, y sé que tú tampoco, un beso,tuya para siempre.

Ahora la relación con mi mujer va un poco mejor, pero sigue mal; con teresa me veo casi cada semana, y seguimos follando como cuando éramos niños; el tiempo se ocupará de poner las cosas en su sitio,si antes no las ponemos nosotros.