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Categoría: Infidelidad

Con la esposa de mi amigo -2

En el primer relato les conté como después de un día en la playa Ale y yo terminamos teniendo sexo muy rico sin planearlo y de manera sorpresiva si no has leído la primera parte te invito a revisarla en mi perfil.



Pasaron dos semanas y casi sin moverle mucho pudimos hacer arreglos para por fin estar a solas de nuevo, el esposo de Ale tuvo que viajar a otra ciudad a dos horas de la nuestra para una capacitación, mi novia se encontraba en su nuevo trabajo, yo me reporte enfermo en el mío y Ale como trabaja en turnos nocturnos en el hospital se encontraba en su casa sola ya que sus hijos por ser vacaciones estaban con sus abuelos fuera de la ciudad.



Salí de mi casa a las 7 de la mañana junto con mi novia cuando me asegure de que ella ya había tomado rumbo para su trabajo le envié un mensaje a Ale y me dispuse a ir a su casa.



Cabe mencionar que estas dos semanas han sido de locura hemos salido los cuatro como es habitual a cenar o a ver alguna película al cine y yo siento que la tensión entre nosotros ha sido mucha, nos dirigimos miradas cómplices, nos reímos de todo lo que dice el otro, yo siento que es muy evidente pero afortunadamente siento que nadie sospecha nada.



Al llegar a casa de Ale yo me encontraba muy nervioso, no he dejado de pensar en nuestro primer encuentro, y el día de ayer al llegar a su casa tenía el corazón latiendo al cien y también me encontraba muy excitado, antes habíamos hablado por mensajes y nos dijimos que lo que paso fue muy placentero para ambos y al no ser planeado le dio una dosis extra de placer.



Al abrirme la puerta Ale aún se encontraba en pijama, que consistía en una blusa de tirantes, no tenía puesto brasier y unos pantalones largos de algodón, su esposo acababa de irse y por supuesto no sospecho nada, al entrar no nos dijimos mucho era evidente que los dos estábamos nerviosos, yo no pude decir mucho ni ella tampoco, de hecho no nos dijimos prácticamente nada, los dos en la sala de su casa en silencio entre risas nerviosas nos abrazamos, apenas mis manos tuvieron contacto con ella la jale hacia a mí y nos besamos de manera apasionada, yo pasaba mis manos sobre su ropa de tela delgada y podía sentir perfectamente su cuerpo, la empecé a besar en el cuello, mi pene ya estaba completamente erecto, con mi mano baje uno de los tirantes de su blusa y le bese sus senos que me encantan y me vuelven loco, nos seguimos besando un rato hasta que ella se separó de mi me vio a los ojos y me dijo con una respiración muy profunda



-Esto está mal, está muy mal, pero también lo quiero, quiero comerte y que me comas toda, quiero que me folles como el otro día, no he dejado de pensar en eso, y me siento culpable pero no me importa es lo que quiero ahora y es un deseo que no puedo reprimir



Me siguió besando y me empujo para que yo quede sentado en el sofá de la sala, lo único con lo que me quede con ganas de nuestro primer encuentro es que ella le diera una mamada a mi pene, apenas me senté ella se arrodillo frente a mí, y paso sus manos sobre mi erección, después me desabrocho el pantalón y saco mi pene con sus dos manos, no aparto sus ojos de mi miembro mientras me empezó a masturbar, ella seguía diciendo



-Esto es lo que quiero, esto es lo que quiero!



Cerrando los ojos empezó a pasar su lengua muy despacio sobre mi glande, haciendo círculos con su lengua y después pasando sus labios, yo prácticamente no podía respirar en ese momento, no daba crédito a lo que estaba pasando de nuevo, introdujo mi pene en su boca y me empezó a dar una mamada deliciosa, la sensación de su lengua, sus labios y sus movimientos de arriba a abajo eran espectaculares, también jugueteaba parte de mi tronco con su mano, yo le pedía que siguiera mientras ponía mis manos sobre su cabello, después de unos minutos me pidió que yo también la comiera y le diera otra mamada así que me levante me termine de quitar la ropa y la senté a ella en el sofá donde le reitre sus pantalones, no traía nada abajo y ya se encontraba muy mojada, la jale hacia mí de tal forma que quedo apoyada sobre su espalda y sus piernas apoyadas en mis hombros, no me demore ni un segundo cuando empecé a comerme su exquisita vagina, chupe absolutamente todo lo que chorreaba de ella, metía mi lengua lo más profundo que podía y me ayudaba de mis dedos para darle más placer, ella había comenzado a gemir cada vez más fuerte, aunque para ese momento por la intensidad y la excitación mi boca ya estaba cansada ella me pidió que no pare mientras gritaba y ahí tuvo un orgasmo, me apretó la cara con sus piernas mientras emitía unos gemidos que como se han dado cuenta me ponen al cien y me excitan demasiado.



Apenas me libre de sus piernas, y ella en la misma posición sobre su espalda en el sofá, me puse sobre ella y la empecé a penetrar, aun con la blusa puesta solo podía fijarme en sus senos que rebotaban debajo de su blusa de tirantes que también dejaban ver marcados sus pezones duros, la agarre de la cintura y continua follándola muy rico.



Después de eso nos levantamos camino a su cuarto, ella caminando en el pasillo se retiró su blusa y me la tiro, cuando llegamos al cuarto para continuar el encuentro más cómodos, ella entro primero y se puso en 4 en la cama, donde se lo seguí haciendo de perrito, ella solo gritaba y gritaba yo la tenía agarrada de las caderas y observaba como sus nalgas rebotaban contra mi cuerpo, yo no aguanté mas y me vine dentro de ella.



Caímos los dos exhaustos sobre la cama, aun con mi pene dentro de ella le seguí besando la espalda, nos pusimos uno junto al otro y nos continuamos besando hasta quedarnos dormidos, como les dije el tiempo no era un problema ya que nuestras respectivas parejas se encontraban trabajando y faltaban muchas horas.



Cuando despertamos tomamos un desayuno y nos metimos a bañar, queríamos aprovechar toda la mañana y nuevamente donde todo empezó no nos inhibimos absolutamente nada, en el baño ella me realizo otra mamada deliciosa al salir del baño aun mojados y con muchas ansias de follar nuevamente fuimos a la cocina donde la apoye en la barra y yo de pie la cargaba mientras la penetraba, ella tenía su brazo rodeando mi cuello por detrás, mis embates eran violentos y termine relativamente rápido, a ella pareció no importarle pero me pidió hacerle terminar con mi mano, así que la puse de espaldas mientras empezaba con mi mano a acariciar su vagina, introducía mis dedos y jugaba con su clítoris, ella estaba empapada, con mi otra mano apretaba sus senos y con mi boca le bese el cuello, pasaron unos minutos así hasta que ella termino con otro orgasmo.



Hicimos tiempo y yo me fui para mi casa como si nada hubiera pasado.



Espero estén disfrutando mis relatos, realmente no sé cómo va a terminar esta situación, pero sin duda no deseo que termine pronto, por favor les pido que comenten y me dejen su opinión de esta situación que estoy viviendo! Saludos!


Datos del Relato
  • Categoría: Infidelidad
  • Media: 9
  • Votos: 1
  • Envios: 0
  • Lecturas: 1201
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