Tomando la iniciativa ahora con el amigo de registro, que como todas tardes almuerza sus treinta minutos con la guapa asistente administrativa quién labora hoy día para la sala de profesores. Dando latigazos con el mero cinturón del amigo, con unos ojos encendidos y una cara de que quiere pasarla muy rico hasta tener el mando y capitanear el momento. Acostando en el pleno suelo frío al amigo en que se agacha con toda la falda del uniforme a la cintura con botas negras de punta, follandola deleitosa pero excitadísima por los mil coños en que está jadeando de muchos placeres al sobarle varias veces las palmas de ambas manos, desde los hombros pasando por los pechos, llegando al estomago y viceversa. Repitiéndolo desde el mismo estómago hasta los hombros parejamente; apoyándose con las dos manos atrás en el pleno suelo frío con mucho frenesí la misma asistente administrativa. Mirándolo con una sonrisa picara y de levantárselo, igualmente ligárselo aguerrida como enajenada, también muy enardecida además con un clímax desbordantes de muchas pasiones como amores que la inundan en su interior. Agachada de espalda, al cogerse con las dos manos apoyándola y sujetándola como manejándola, hasta sacándole como metiéndole toda la verga en el rabo, doblada de la cintura hacia la cabeza hacia delante con las dos manos de la guapa asistente administrativa. Apoyadas con las dos palmas de las manos sobre el suelo frío de la sala de profesores, impulsándose dándole profunda como dura y agresivamente continuamente al jadear con todas las fuerzas y ganas nacientes emergentes de todo su ser; sentada ahora por el ano inyectada por la maravillosa hurgada perpetuada plenamente por el dedo índice travieso y deseado del mismo amigo de registro, cabalgándole como montándoselo estelarmente con todo el orgullo y la rectitud como la honra, sobre todo lo que represente propiamente para el amigo de registro actualmente a manos llenas a pedir de boca, en vivo, a todo color la misma asistente administrativa que se comporta a solas con él como fuera una ramera y prostituta legendaria, en que comparten más que el polvo mucho sexo. Le lame con tal gusto y exquisitez el mismo amigo las tetas adornadas por un rojo vino en que la pone a gemir sin parar, rematándole la distracción como la diversión cónsona que les atrae igualmente los pone a mil revoluciones que digo, los pone árdidos pero arrechos queriéndose como amándose como nunca se los imaginaban ni pensaban ni siquiera se les paso tener una relación más allá de lo académico, profesional, amistosa y personal al ingeniarse ambos en la jornada laboral que hasta el son del día de hoy no han levantado ninguna sospecha alguna, ni tampoco hay chismes ni rumores relacionados a la cercanía que han protagonizado ambos al ser los mejores colaboradores administrativos, igualmente los mejores amigos de este mundo. Finalmente queda chupándole al recogerle la masturbación que ha tenido por la venida y la erección mayúscula producto de tener sexo con la guapa asistente administrativa de la sala de profesores. Metida en el medio de las entrepiernas al tenerlo muy sentado y satisfecho en el mero sillón, inundándose al tope la boca tragándose toda la leche por su garganta sin titubear ni oponerse ni resistirse en absoluto con las dos manos apoyadas en las rodillas y dejándose recorrer, al sobarse por las dos manos desde los hombros siguiendo por los brazos hasta llegar al culo de la asistente, que luce, carga, viste el uniforme de ejecutiva universitaria con falda ajustada, ceñida y entallada azul oscura con sus botas negras de punta. Con una mano acariciándose como jugando hasta frotándose con los cuatro dedos sin parar y deleitosa la misma asistente administrativa la vagina y el ano, con tal delicia que lo mira con unos ojos dilatados y agitados hasta pacíficos finalmente con evidencias y huellas en sus labios del polvo limpiado por su boca en el palote de la pinga de este al recogérselo con la mera punta de la lengua atrevida y lujuriosa hasta morbosa de la misma asistente, parándose arreglándose y acomodándose un poco el uniforme al secarse el sudor que transpiraron ambos saliendo ambos con rumbo al baño de estudiantes universitarias para que orine y se asee la misma asistente entre tanto bajando el amigo de registro marcando la entrada, entrando al baño de administrativo a orinar y asearse después de un titánico polvo con la asistente administrativa de la sala de profesores en media hora de almuerzo…