El automovil parqueado en un estacionamiento estando sentados adelante tanto Blanc como su enamorador. Blanc virada de lado derecho con el codo apoyado en el respaldo del asiento mirando candelorosa, deleitada, atendiendolo, escuchandolo y fascinandose por lo que le declara concordato de amore. Con un atuendo de falda con botas que tanto le gusta como le fascina luzca y le recree sus fantasias sexuales a este.
Acariciandole con su mano derecha la rodilla del enamorador toda cautivante, alegre, apasionada, aventurera, emocionadisima finalmente coronandola con sus caros deseos; entonces en el asiento trasero cumpliendolo sus deseos realizan el acto sexual con todas las fabulosas formas que ya son conocidas ampliamente por estos dos tortolos. Transcurriendo por espacio de dos horas treinta minutos quedandose abrazados y hablando Blanc que animal insaciable y hambriento te pones cada vez que lo hacemos parece que un buen día me comeras y deboraras como el lobo feroz del cuento de hada de la caperucita roja. Salen del estacionamiento para llevarla a cenar a petición de Blanc que no tiene muchas ganas de llegar a su casa disfrutante del resto de la tarde de bellas artes considerada por sus pensamientos filosoficos como logicos atesorante al estar bendecida por conocerlo y abrirle su corazón a sabienda que también quiere vivir el resto de su vida junto a el igualmente el le profetiza lo mismo día tras día que lo pasan juntos en cualquier panorama que se le acondicione para expresar igualmente consagrarse en obra y gracia bañado por las manos del mismo Todopoderoso que fue el que los cruzo en sus destinos hoy y por siempre.