Hola, de nuevo estoy aquí con otra historia, esta vez no se trata de sexo con mi prima, pero ahora les voy a platicar una de las veces mas ricas en las que me he masturbado, a mi me fascina coleccionar velas de todo tipo color, formas y aromas así que tengo un gran repertorio en mi recamara.
Un noche en la que extrañaba profundamente a mi actual novio me empecé a excitar al recordar los besos y las caricias que solíamos darnos, a pesar de aun no tener relaciones sexuales, si tenemos muchas caricias muy sensuales, por ejemplo le encanta tocarme los pechos por dentro de la blusa, cosa que a mi me fascina, bueno pues esa noche me sentía media sola y la verdad estaba muy caliente, así que sin pensarlo comencé a tocarme la cocha que ya la tenia muy mojada, metía dos de mis dedos y esto me hacia sentir muy bien, me despojé del baby doll que traía puesto y comencé a acariciarme los pechos imaginando que era mi novio quien lo hacia, me sentía muy caliente y aun que mis dedos me daban un buen placer, necesitaba mas, así que empecé a idear algo para satisfacer mi calentura, prendí la discreta luz de la lámpara de mi buró y empecé a buscar algo que me llenara mas que mis dedos, me sentía muy caliente y deseosa de ser cogida por un hombre, pero como no lo tenia, tenia que ingeniármelas con algo que sustituyera una verga.
Al pasar la mirada por mi recámara, encontré todas las velas que tenia acomodadas en una repisa, y por supuesto que inmediatamente se me ocurrió que me podía follar con una vela, así que busque una de las que son largas (comunes) pero que tiene como espiral alrededor osea no son lisas si no que tienen texturas a lo largo de la vela, la tomé y la limpié bien con una toallita húmeda, me recosté sobre la cama de nuevo apagué la luz y comencé a pasarme la vela por encima de mis labios vaginales, sentía mucho placer me imaginaba que era mi querido novio el que me pasaba su verdad por entre mis labios vaginales, con mis dedos poco a poco fui abriendo mi concha que ya estaba mas mojada que antes, y puse la vela con la parte de abajo en la entrada de mi coñito poco a poco comencé a meterla, pero con cuidado de no romper mi himen, hasta que sentí que topaba con algo, me imaginé que era mi himen así que la saque unos dos centímetros para no lastimarme, con la vela dentro de mi, comencé a mover mis caderas de la forma en que la vela me estimulara mi coñito y el clítoris hay sentía mucho placer con una almohada ahogaba mis gemidos, por miedo a que mi hermana (una santurrona soltera de 29 años y sin novio) que estaba en la otra habitación se diera cuenta de lo que yo hacia, luego con mi manó tome la parte de la vela que quedaba fuera y comencé a meterla y sacarla al cabo de unos minutos haciendo esto, sentí que me venia un orgasmo que hizo retorcerme de placer.
No conforme con esto, acomodé unas almohadas al lado mío y un cobertor grueso que tengo ahí, de la forma que yo me pudiera subir sobre ellos y moverme y sentir que realmente me estaba cogiendo un hombre, cuando los acomodé bien, con la vela dentro, me subí al cobertor que estaba abultado, abrí las piernas y empecé moverme para que con las almohadas y el cobertor, chocara la vela y esta me hiciera sentir que me estaban follando, cosa que logré, así que comencé a moverme mas y mas rápido, yo sentía que las piernas me temblaban de tanto placer que estaba sintiendo, ahí tuve un multiorgasmos que me hizo desfallecer sobre las demás almohadas acomodadas debajo de mi, toqué mi concha y estaba súper mojadísima por el multiorgasmo que acaba de tener, me quedé recostada así un rato con la vela dentro de mi aun.
Cuando logré recuperarme del multiorgasmo obtenido con mi vela color verde, me la saqué del coño y la guarde en un cajón del buró, me limpie la concha con una toalla humeda, me vestí de nuevo con mi baby doll, acomodé mis almohadas y me acosté a dormir muy satisfecha, ahora cada que me siento sola por las noches, mi querida vela me hace feliz.
lo unico que no contastes fue que cuando la tenias adentro prendistes la vela y de la calentura la derretistes