Fumandose un cigarrillo Yessenia la aborda un joven que le pide su cigarrillo para encenderlo se lo da, fumando ambos de frente se ponen a conversar de cosas tribiales que se les viene de repente, regia con el atuendo de faldas ajustadas azul oscura con medias y luciendo con mucha relevancia el sueter rojo tomate que le combina mucho con los zapatos que lleva puesto Yessenia. El joven le invita a un restaurante a seguir la conversación, acepta con todas de la ley hasta encantadisima por que se topo con una persona que es aficionada al cigarrillo y que no le perturba en absoluto el humo que expede con toda la alevosiva, dulzura, juguetona, aventurera, sinverguenza, picara, interesada, lujuriosa, degenerada por consiguiente, talentosa para entablar conversación con cualquier persona por parte de Yessenia.

Sentandose afuera del restaurante piden unos cafe negros bien cargados siguen platicando Yessenia y el mismo joven, después de pasar exactamente dos horas y media le pregunta tiene otro compromiso Yessenia le sonrie al quedarse viendolo directamente a los encantadores ojos del joven un momento queda en silencio al contestarle para nada no tengo ningún plan estoy completamente libre para lo que quiera proponerme, que le parece la idea de que lleguemos a un lugar para que estemos más a solas igualmente comodos para que continuemos conversando hasta nos fumemos otro cigarrillo. Tomando hay mismo un taxi con rumbo al lugar que le indica el joven al taxista, paga el taxi el joven agarrados de las manos viendose como unos tortolitos piden una habitación, abrazada con todas las manos monumentalmente puestas y acariciandola todo los glúteos de Yessenia.

Entran a la habitación al desnudarse se percata de inmediato con todo la alevocia premeditada como planeada sin que se enterar Yessenia que el joven carga puesto un condon, le habla condenado sabías que me tentarias y caería redonda en tus redes al moverme el piso con el pretexto de que fumemos otro cigarrillo, me gusta ese abordamiento que tuvistes conmigo lo considero muy apasionado hasta apropiado para una mujer de mi categoria.

Acostandose comienza el verdadero espectaculo que la convierte en una prostituta que se liga con su cliente, acariciandola y manoceandola sin parar todos los rincones de sus contornos anátomicos también de hacerle el sexo en todas las posiciones sabidas y conocidas, al darle unas oportunas mamadas tanto de sus prominentes, voluptuosos, poderosos, colopsales y ardientes senos puntiagudos muy parecidos a unos fructiferos como jugosos melones.

Intercambiando al mamarle el gigantesco pené duro, caliente, sabroso, eyaculante y armado con todo el armamento belico que existe por parte de Yessenia que se lo agarra con la mano derecha mientras el joven le acaricia y le mantiene en lo profundo de sus entrepiernas la cabeza de Yessenia sin darle descanso en absoluto.

Se lo cabalga diestramente al apretarse sus senos al preguntarle como me he comportado y además le gusto así, le responde el joven que le gusta así, teniendola experimentado unas revolucionarias como aprovechadas venidas a cargo de Yessenia que esta indomita igual enloquecida por tantas cosas que le hace vivir el joven quién originariamente le dio su cigarrillo para hacerle el favor de convidarle y encenderle el cigarrillo a este apuesto, varonil y atletico joven que la invito al maravilloso y renaciente sexo que tanto busca y que no a contemplado con sus otros amantes ni tampoco con el cabron de su esposo en vida.

Acostados todos sudados se fuman otro cigarrillo al tirar humadera hacia el cielo raso del cuarto viendo películas pornográficas en la misma habitación del residencial donde se metieron para hacerle el vigorisamente sexo un sábado por la tarde; le da su numero de celular para que concerte otro encuentro de la misma forma para la siguiente velada sexual que la ha dejado muy impresionada adicionalmente que esta muy enamorada por este joven.