Tembloroso Levante sus cabello que cubría la parte de atrás de su cuello y comencé a besarlos y succionarlo acompañado de mi lengua, ella irguió un poco los hombros por el intenso placer que recorrió todo su cuerpo que temblaba en esos momentos. Entretanto con la yema y la palma de mis manos subía hasta la cima de sus pezones y bajaba moldeando toda la curvatura de sus exquisitos y redondos senos. Su pezones comenzaban adquirir cierta rigidez, sus gemidos y respiración aumentaban de intensidad por la excitación que era presa.

Loco de excitación sin nada de pudor guiado por mi instinto animal deslice e introduje mi mano en el interior de su ropa intima. Mi inquisitivo dedo medio entraron en contacto con las delicadas y temblorosas partes de la carne de CIELITO. Su respiración la sentía agitada por el delicado ataque a los encantos de su cuerpo, ella poco a poco dejo el campo libre por las emociones que en ese momento la transportaban a lugares desconocidos del placer.

Baje en forma disimulaba un poco su pantalón hacia la mitad de su cadera ella no opuso resistencia, le pedí que se volteara para tenerla nuevamente frente a mi sólo pensando en introducir mi miembro dentro de su pantalón y moverlo en medio de sus ensortijados bellos.

Sin respuesta alguna se volteo e introduje todo el largo de mi pene dentro su pantaloneta. Excitada por el contacto de ese adorable objeto que invadía sus encantos y secretos juveniles.

Dejándose llevar por el placer y el deseo que envolvía e invadía todo su cuerpo me abrazo por primera vez y me entrego sus cálidos labios carnosos y nos estrechamos en un beso de deseo y de pasión.

Deslice mis manos y baje un poco más sus prenda intima, mi excitado miembro cruzo como un rayo por el medio de sus labios rosados que la excito tremendamente que comenzó a gemir.

―¡Oh MAÑU como quema!―

―¡Como se desliza en mi interior!

―¡Que sensaciones me provocas!

―¡Llegan hasta mis nalgas!

Sabiendo que dentro de ella ese adorable objeto seria capaz de provocar las más excitantes emociones que hasta ese momento la había proveído, por primera vez expreso su deseo y me dijo:

―Espera MAÑU, no se va ha poder.

Me separo y observo con cierto deleite en forma disimulada todo el largo de mi miembro que se enarbolaba en forma brutal totalmente lubricada. Era la primera vez que CIELITO observaba un miembro masculino de una persona mayor en plena manifestación de todo su poderío. Miro al costado donde habían cuatro ladrillos en forma de asiento y me dijo siéntate allí, di unos pasos y me senté. Mientras ella una de sus piernas dejaba al descubierto fuera de su pántaloneta y prenda intima.

Quede atónito ante la contemplación de los encantos que por primera vez tenia a la vista sus contorneados muslos, esa exquisita hendidura rosada que sobresalía en medio de sus pelos ensortijados color castaño que cubría su vulva.

El cuerpo de CIELITO temblaba, sabia que no había mucho que temer y mucho que gozar. Ella estaba ardiendo, el brillo del deseo asomaba a sus ojos.... con una de sus manos cogió la punta de mi caliente miembro y lo puso a la entrada de esa rendija húmeda de sus labios rozados y se fue sentando excitada, devorando poco a poco como una "culebra cascabel" la cabeza y todo el largo de mi excitado y caliente miembro que arrastraba a su paso algunos de sus ensortijados pelos castaños, hacia el interior de ese excitado y rico orificio oscuro.

El cosquilleo y las caricias que la había administrado le provocaron el flujo de humedad que suele suceder a la excitación, CIELITO ofrecía una rendija la más lubricada que podía ofrecer la naturaleza.

Tan pronto como percibió el ardiente contacto de la dura cabeza de mi miembro en su interior todo su cuerpo se estremeció, sus manos los apoyo encima de mis hombros y comenzó a moverse de arriba hacia abajo hasta llegar a la base, abriendo y cerrando la membrana que cubría la "cabeza de hongo" de mi enardecido miembro con sus labios vaginales. En cada ingreso a ese orificio oscuro y apetitoso, el largo de mi arma que frotaba su clítoris era aprisionada por sus calientes músculos vaginales de la encantadora CIELITO, mientras en el fondo lo esperaban a la cabeza pelada de mi glande dos botones porosos que se pegaban como lapas cubriéndolo desde el cuello levantándome inmensas olas de placer y lujuria que se iniciaban en mi pené e invadían y recorrían todo las partes de mi cuerpo hasta llegar al cerebro que estaba a punto de explotar.

Mientras ella enloquecida por el goce de placer y lujuria que era presa, comenzó a besarme desesperadamente el cuello y los labios ayudados por una de sus manos, mientras las mías cogían sus deliciosa nalgas aprisionándolas hacia mi sexo.

―¡Oh cuan estrechas eres!―

―¡Parece como si me lo tuvieras mamando!―

―¡Qué obsceno! –

―¿Como puede hablar así?― me respondió―

CIELITO sintió por primera vez en su vida, ese contacto mágico del órgano masculino de una persona ya mayor en el interior de los labios de su rosado orificio.

Ella era muy joven y sus partes, aun estaban llenas de perfecciones y de frescura, estaba poco preparada por la admisión de miembros masculinos, aun de la intrusa cabeza que salía y se escondía dentro de sus entrañas.

Todo el cuerpo de CIELTIO, se estremecía delirante y de sus labios rojos se escapaban cortas exclamaciones delatadoras del supremo deleite, que estaba entregada en cuerpo y alma a las delicias del sexo y al placer que mi rígido y caliente miembro le proporcionaba. Estaba ocupada para interesarse o preocuparse de lo que podría ocurrir después.

―¡Oh MAÑU, cuanto te deseo ¡

―¿Cómo crece y quema tu cosa?―

―¡Todo lo que me he perdido hasta ahora!

―¡Por favor que no se te venga!

―¡Sigue, sigue, sigue así, así, así!

―¡Siento mi cuerpo, como si lo estuvieras partiendo en dos!

―¡Oh CIELITO, que dichoso me haces!

―¡Qué hermoso cuerpo tienes!

―¡Que rica y extraordinaria forma de hacer el amor!

Embriagado de placer levante su polo y sus sostenes hacia arriba. Sus senos que en ese momento se bambolean de arriba hacia abajo comencé a besarlos, lamerlos y chuparlos con mis labios y mi lengua como un pequeño animal hambriento, a pesar de el inmenso placer que me causaba trate de pensar en otras cosas para durar más. Mientras ella con su inexperiencia estaba entregada al deleite que esa nueva sensación que mis labios la provocaba.

―¡Oh MAÑU tus labios calientes como devoran mis senos!

―¡Muérdeme la punta de mis pezones, así me duela!

―¡Que exquisitas y deliciosas sensaciones me provocas!

―¡ Oh mi cuerpo esta a punto de explotar!

―¡Oh madre mía que me pasa!

Poseída por locos espasmos de lujuria, se entregaba contra el objeto de su placer, hundiendo sus uñas en mis hombros.

En medio de sus apagados quejidos y lamentos algo sofocados que provenían de lo mas profundo de su ser y que expresaban el profundo deleite que era presa en ese momento. Y yo sintiendo el incesante cosquilleo enloquecedor que invadía y recorría los nervios de mi miembro que alcanzaba su máxima expresión dentro de esa rendija rosada de la encantadora CIELITO; ella dejo escapar una copiosa emisión que en busca de salida inundo todos los pelos rizados y mis testículos. En ese mismo instante mi enardecido miembro chisgueteo toda su leche espesa en el interior de su caliente vulva, confundiéndose nuestros líquidos.

El movimiento desenfrenado de nuestros órganos, actuando como una mezcladora generaron combustión con ambos líquidos un fuerte hedor a "llanta quemada" invadió la zona.

CIELITO siguió moviéndose en forma circular desenfrenadamente tratando de extraer la ultima gota de semen, hasta que su cuerpo cayo desfallecida sentada atravesada por todo el largo de miembro que palpitaba dentro de ella

Camino a la casa no salíamos de nuestro asombro de lo que había pasado, pero la confianza que tenias nos hizo expresar nuestros pensamientos y deseos

―¡Ah, que delicioso fue! Estoy casi agotada

―Si lindura. Gracias por complacerme

―Espero que ahora que has tenido todo lo que deseabas me ayudes mas que antes

―Si mi amor, claro que si; lo tendrás todo

Fue de esta manera como comenzamos nuestras salidas de amor y sexo ha escondidas.

En estos momentos en que termino el presente relato, ella ya se ha casado y vive en el norte del país en la ciudad de Trujillo, tiene un niño de 5 años, CIELITO, siempre que viene a Lima, me busca para ayudarla como antes y revivir nuestro calientes encuentros sexuales.