Me he presentado en otros relatos, pero para quien no los haya leido, dire que tengo 24 años, moreno, ojos castaños, estatura media. Esta, como las otras historias que he publicado en esta web ocurre en Barcelona, concretamente en mi casa. Vivo en un loft en la zona antigua de la ciudad, es un almacen muy espacioso con dos plantas y un pequeño sotano. En la planta de abajo he abierto un pequeño pub que solo funciona los fines de semana y la planta de arriba la utilizo como vivienda. De lunes a viernes trabajo en una empresa de decoración de interiores. Tener dos trabajos es la unica manera de ir pagando la hipoteca de los cojones. Como os podeis imaginar estoy lo bastante hecho polvo como para no tener ganas de hacer las tareas de casa, de modo que contraté a la misma asistenta que limpiaba cuando estaba en casa de mis padres, ya que tenia dias libres y es de confianza. Se llama Carmen tiene 44 años o 45, no estoy seguro, pelo moreno cortado a media melena, ojos marrones claros, no es demasiado alta, metro sesenta y poco, grandes pechos ( demasiado firmes para su edad ), y un buen culo. Al principio no la miraba con deseo, aunque si me habia dado cuenta que se conservava muy bien para su edad. Empeze a mirarla con deseo poco despues de romper con mi novia Andrea con la que llevaba saliendo 3 años. Rompimos por culpa de la monotonia y de mi ritmo de vida frenetico y llevaba ya 4 meses de abstinencia que hacian mella en mi libido.

Era uno de los dias que a Carmen le tocaba venir a casa, la saludé como siempre y estubimos hablando un rato.

-Hola Sergi ¿que tal? ¿como ha ido? - Saludó dicharachera

-Hola Carmen, pues como siempre, no he parado en todo el dia. - Respondí cansado

-¿Que estais haciendo ahora? - Preguntó interesada

En ese momento no se porqué me fijé en sus pechos, enormes, firmes, como siempre. Se ocultaban detras de una camiseta morada bastante ceñida y me dio la impresión de que no llevaba sujetador. Y la excitación empezó a crecer en mi.

-Eeh, pues estamos decorando unas oficinas en Balmes - respondí distraido

-Tanto trabajo no es bueno, deberias cerrar el pub. - dijo preocupada

-Ya pero tengo que pagar la hipoteca y es lo que hay. ¿Y que tal Isabel y Andres? - Cambié de tema intentando apartar mi mirada de esas dos enormes tetas que me llamaban a gritos.

-Buah, mi hija sigue igual de cabra loca. Y mi marido vuelve a estar de viaje con la empresa hace dos meses que no le veo. - Dijo apenada

Ella me iba hablando, pero yo solo podia concentrarme en sus enormes pechos y se me hacia la boca agua solo de imaginarlos. Asi que decidí irme de alli antes de que se diera cuenta

-Bueno Carmen, no te entretengo mas, me voy a mi habitacion a leer un rato. -Dije hechandole un ultimo vistazo de despedida a esas tetas que tanto deseaba.

-Hasta ahora.

Me fui hacia mi habitacion que estaba al final del todo, e intenté leer un rato pero no pude concentrarme en el libro. Estaba cachondo y solo habia una manera de remediarlo. Me puse uno de los videos que habiamos grabado Andrea y yo ( ya os he hablado de Andrea pero no os he dicho lo morbosa que era. Grabarnos mientras nos lo montabamos es solo una pequeña muestra de lo que llegué a hacer con ella ) y empeze a cascarmela sin poder quitarme de la cabeza a Carmen. No tarde en correrme, cuando oí unos pasos, rapidamente limpié las pruebas del delito y apagué la tele, justo cuando Carmen picó a la puerta.

-¿Sergi?

-¿Si?

-Aun no he limpiado tu habitación ¿Puedo hacerlo ahora? -Dijo abriendo la puerta

-Si claro. Estaré en el despacho, avisame cuando acabes.-Dije mientras salia por la puerta al tiempo que ella entraba rozandose por un momento mi pecho en sus pechos (Diooos mio)

-Perdon - Dijimos los dos al mismo tiempo y nos reimos de forma estupida.

Me dirigí hacia el despacho que era la habitación de al lado y me puse a navegar un ratillo por internet. Derrepente me parecio oir algo en la habitación de al lado, al principio pensé que Carmen estaba canturreando, pero al momento deseché esa idea. Pegue la oreja a la pared pero apenas podia oir nada. Sigilosamente me dirigi hacia mi dormitorio, la puerta estaba cerrada y pegue mi oreja en ella a ver si podia oir algo. Me parecieron oir unos gemidos, pero tampoco podia asegurarlo porque eran un ruido muy debil. Asi que decidi entrar en mi habitación haciendo ver que iba a buscar un libro. No os dire que no estaba preparado para lo que me encontré porque en realidad si lo estaba, es mas, lo deseaba: Encima de mi cama, viendo el video de Andrea y mio, estaba Carmen, con los pantalones medio bajados, haciendose un dedo. En esos momentos uno no puede dudar:

-Creo que puedo ayudarte con eso Carmen - le dije con una sonrisa mientras ella me miraba avergonzada e intentaba inutilmente taparse su peludo coño.

-Lo siento Sergi... yo... me parecio que antes me mirabas con deseo y hace tanto que nadie me mira asi... luego al entrar en la habitación noté el olor... vi el video encendido, y senti curiosidad... y dios, nunca me han follado así... yo, no pude evitarlo - las palabras le salian atropelladamente, pero a mi no me interesaban sus disculpas

-No necesitas disculparte, realmente te deseo. Yo podria follarte como merece ese cuerpazo tuyo -Le dije mientras me acercaba lentamente.

-Sergi, no debemos. Soy una mujer casada, 20 años mayor que tu. - Replicó mientras seguia tapandose su desnudez.

-Eres una mujer preciosa, que hace mucho que no hecha un polvo y yo estoy igual eso es lo unico que importa - Le susurré al oido

-Sergi, no. -Dijo con muy poca convicción

-¿De verdad quieres que pare? ¿No quieres que te folle igual que follaba a Andrea en el video? - Tras decir esto empezé a besarla en el cuello.

-Sergiii

Ya era mia, le separé sus brazos que aun tapaban su velludo pubis y la tumbé en la cama. La bese en el cuello, en la boca, lentamente. Le magree las tetas por encima de la camiseta y pude comprobar que mis sospechas eran ciertas, no llevaba sujetador. Pude adivinar sus enormes pezones erectos, que pellizqué sin compasion.

-Aaah, siii - susurró

-Lo vas a pasar muy bien, y yo tambien - dije mientras iba bajando mis manos.

Me econtré con sus muslos, que acaricié mientras bajaba hacia sus piernas, que llevaban unos dias sin depilar, lo cual me hizo gracia y me exicitó al mismo tiempo. Algo extraño. Ella se dio cuenta de esta reacción:

-Ahh, que verguenza, yo... no pensaba que... - Se sonrojó

-No importa, me gusta - Sonreí mientras iba bajando mi cabeza besando su abdomen por encima de la camiseta.

Finalmente llegué a su peludo coño, estaba chorreando. Y mientras me acercaba a saborearlo pense en el tiempo que hacia que no veia un coño asi de descuidado, creo que desde que tenia 15 años. Hundi mi cabeza en el delicioso manjar que me esperaba y empezé a lamerlo con suavidad.

-Mmmmm - Susurró

Segui aumententando el ritmo de mis lametones. Acto seguido mi mano izquierda se coló por debajo de su camiseta y empezo a subir hasta que se encontró con esa enorme mama cuyo pezón pellizqué al mismo tiempo que con el pulgar de mi diestra estimulaba su clitoris

-Aaah siiiiiiiii - Gimió

-¿Te gusta? ¿Te hace esto tu marido? - Me burlé mientras le introducia dos dedos y la masturbaba violentamente.

-Diooooooosss

Estaba apunto de correse y queria que lo hiciese en mi boca, asi que arrimé mi cabeza a su precioso coño y justo en ese momento me inundo la cara de fluidos al tiempo que arqueaba su espalda.

-DIOOOOOOOOOOOOSSS - Su grito resono en todo el almacén. Afortunadamente no tengo vecinos

-Me encantan las mujeres que gritan -Le susurre mientras introducia mis dedos llenos de sus fluidos en su boca.

La besé lentamente sin prisas, y empeze a subirle su camiseta y curiosamente lo primero en lo que me fije no fueron sus tetas si no sus axilas tambien sin depilar.Me invadio un olor a sudor y eso volvio a aumentar mi excitacion, al tiempo que pensaba en lo diferentes que eran una mujer joven obsesionada con el aspecto fisico y una mujer madura insatisfecha y quemada, y despues me fije en sus enormes tetas de enormes y oscuros pezones y me olvide de mis reflexiones filosoficas y me abalancé sobre esos pechos que pedian e iban a ser deborados.

-Tienes unos pechos preciosos - dije mientras le devoraba con avidez sus enormes tetas

-Pues a mi marido parece habersele olvidadooooooh

-Pobre idiota, ya es hora de darle caña a ese cuerpo -

La empujé con fuerza hacia la cama y le introduje mi polla sin mas miramientos salvajemente. Ella me agarro del cuello y me estrujo con fuerza contra su cuerpo apretando contra mi sus enormes tetas al tiempo que yo aumentaba cada vez mas mis ya freneticas embestidas. Me beso con desesperación mientras cruzaba sus piernas en mi espalda. Sus gemidos resonaban por todo el almacen. Me separe de su cuerpo. Cambiamos de postura poniendose ella a cuatro patas. Le introduje un dedo en el culo

-NO, AHI, NO - Gritó alarmada

-Creia que querias que te follara como en el video.

-Nunca me han follado por detrás

-Puede ser muy placentero -Le susurré mientras le introducia dos dedos esta vez.

-Me prometes que pararas si me duele -Dijo algo asustada

-Te lo prometo - Dije escupiendo en mi polla para lubricarla

Puse la punta de mi prepucio en su orificio anal y empuje poco a poco, viendo que parecia que entraba se la ensarte de golpe ella dio un grito de dolor. Seguí embistiendola lentamente.

-Para, me duele - Sollozó.

-Lo siento - Me disculpé al tiempo que la besaba dulcemente.

Aprovechando la posicion en que estaba volvi a metersela en el coño, suavente esta vez hasta que parecio que ella se tranquilizaba y volvia a gozar, entonces volvi a aumentar el ritmo de mis embestidas hasta que mis cojones le golpearon salvajemente en el coño, instantes despues volvio a correrse arqueando su espalda de nuevo momento que aproveche para cogerla del pelo y besarla para acto seguido volver a tumbarla con brusquedad en la cama y apoderarme de sus enormes pechos e introducir entre medias mi polla para hacerme una soberana cubana que culmino con un enorme chorro de esperma en la cara de mi asistenta.

-Ha sido maravilloso -Dijo mientras recogia con una mano el esperma que tenia en su cara y se lo llevaba a la boca

-Tu marido es un imbecil

-Es cierto, por suerte ahora te tengo a ti...

Podeis escribirme. Me encantará leer vuestras criticas y comentarios.