Mi nombre es Eduardo, moreno claro complexion atlética, tengo 43 años y vivo en Torreón Coahuila. Me encantan las mujeres maduras, simpre subo a los camiones deseoso de poder tocar y acariciar alguna dama complaciente.un dia observe a una dama sentada sola en su lugar y con un semblante un poco desenfadado y con actitud de regresar cansada de sus labores cotidianas. Llevaba puesta una falda floja pero permitia observar de manera sugerente lo delineado de sus curvas. Deseoso de poder tocar un poco de sus piernas le solicité me permitiera sentarme a su lado a lo cual accedió; confieso que el simple contacto con una mujer extraña me pone muy caliente, una vez acomodado en mi lugar inicie mi actividad de placer al buscar el roce de mi pierna con la suya, que por cierto las cuales son algo musculosas por el ejercicio de bicicleta que practico y el voleyball. Ella se mostró serena, pues estaba estaciada observando como movia mi pierna de manera sugerente junto a la suya, en un momento mi mano ya estaba acariciando su muslo a lo que ella no mostraba oposición, ademas de observar que iniciaba a morderse los labios, y agregar ademas que a traves de su blusa se observó lo duro que se ponian sus pesones ante el roce y carias furtivas que le proporcionaba este extraño, en un momento mis manos fueron mas alla; ahora busqué tocar sobre su entrepierna y por encima de su gran falda.para lo cual ella me permitió, para ese momento ya tenia una tremenda erección que estaba a punto de estallar, en un momento me decidí e introduje mi mano por debajo de la falda y toque directamente su calzón que ya estaba muy mojado por lo emocionante del momento; recuerden que todo ello sucedia en el asiento del autobus, uf.que rico, hice a un lado su calzón e introduje dos dedos deliciosamente en su sexo humedo, rico, peludo, ella se inclino para cubrir de cierta manera la cción y merpitirse abrir m,as las piernas para gozar a todo placer. No saben como se mojó toda muy rico y yo pues me eyacule en mi pantalon. Solo me restó limpiar mis dedos en su falda y con un amable con permiso la deje temblorosa y llena de placer.Hasta la proxima.