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Este es un pequeño homenaje para la mujer mas bella, linda y hermosa que amo, y tu sabes perfectamente que eres tu mi Gatica Concentida.

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Llego del trabajo y esta absolutamente todo oscuro y sin ruido que altere la paz de nuestro hogar, sé que descansas y eso hace que me mueva suave y silenciosamente para evitar interrumpir tu sagrado descanso, al ingresar a nuestra alcoba descubro que estas semi-descubierta ya que portas un delicado y fino camisón de seda que inútilmente trata de cubrí tus nalgas, las cuales portan unas pantaletas casi casi transparentes.
Todo ello de color blanco y aunamos que la sabana que te debería cubrir esta toda arremolinada a un lado de ti, así puedo contemplarte a mi libre arbitrio y me empiezo a excitar al imaginarme lo feliz y contenta que te vas a poner al despertar de la manera que mi mente erótica y sensual esta maquinando al mil por hora.
Desnudo al fin, me doy un duchazo rápido y me pongo mi (tu) loción preferida la cual tiene la magia de despertar en ti a esa hembra en celo que te conviertes al percibirme cerca de ti, apago las luces y prendo solo una serie de velas que convierten nuestra alcoba en un templo dedicado a la diosa del amor Nefertiti y al dios Eros.
Corro a la cava y tomo una botella de vino tinto y después en la cocina del refrigerador unas cuantas cerezas que dejaste para el postre del día de mañana, con mis tesoros en las manos regreso presuroso a nuestra alcoba y tras depositar mis tesoros en la mesita de noche te contemplo a mis anchas ya que tu con tu inquietante sueño has logrado descubrirte totalmente y lanzado al suelo la sabana que me impedía contemplarte en toda tu exuberante belleza.
Descubro que mi cabellera esta suelta y ligeramente alborotada y te da un toque de sensualidad inusitada, deslizo suavemente mis manos sobre de tus pies y tobillos y los retiras instintivamente y me detengo para no despertarte, lentamente, me apodero de uno de mis pies y esta vez ya conciente que lo manipule, me dejas empezar a darte un rico y delicioso baño gatuno a cada uno de mis deditos hasta que aun dormida sueltas un pequeño gemido de placer, "mmmmmmmmm", para esto tus manos no pueden estar quietas y ya te están dando un delicioso masaje al otro de mis niños y es entonces cuando te colocas totalmente boca abajo y te abandonas a las sensaciones que te proporciono.
Las cuales te hacen seguir soñando y a la vez empezar a excitarte ya que empiezas a emitir ese néctar que los dioses mismos desean ser los causantes de tal efecto en ti, cuando creo que ya están perfectamente bañaditos mis dedos de mi primer niño bien portado lo dejo por la paz y dedico toda mi atención a proporcionarle el mismo tratamiento a su hermanito que ya se empieza a mover inquieto entre mis manos, de mi bebita, sigue brotando paulatinamente mayor cantidad de miel la cual inunda nuestra alcoba con ese perfume que me enerva y excita al ciento.
Mientras tu lengüita trabaja en mis deditos tus manitas no se están quietas y se desplazan lentamente y muy delicadamente a todo lo largo y ancho de mis piernas ¡y tu sin despertar aun!, me pregunto, ¿que estarás soñando al prodigarte mis más tiernas y delicadas caricias?.
Te empiezas a mover y me detengo creyendo que por fin sales de los brazos de Morfeo y caes en los de Eros, ¡pero no!, sigues dormidita, pero muy excitada, la humedad de mi bebita me lo demuestra y en el colmo de la excitación tu misma empiezas a acariciar a mi bebita bien portada que en estos momentos deja de serlo para convertirse en una hoguera de la cual se desprenden llamas de placer que tu tratas de aplacar con mis deditos de una de mis manitas, para facilitarte dicha tarea deslizo lentamente tu pantaleta suavemente y me ayudas inconscientemente a lograr mi objetivo, ¡llevarme dicha prenda a tus narices y embriagarme con ese perfume que me hace perder la razón!, y tu, continuas ahora con mas libertad a masturbarte lentamente y separando hasta donde te es posible mis columnas de amor que son mis piernas.
¡Estoy ardiendo! y mitigo un poco mi sed con sorbo de vino y tomo un poco mas, pero no me lo bebo, solo lo caliento para que no te despierte lo frió del vino ya que pienso depositarlo en esa copa maravillosa que se forma al final de mi espalda y el nacimiento de mis bellísimas nalgas, subo despacito como todo un gatico travieso a la cama y levanto tu camisoncito hasta donde me es posible para no despertarte he interrumpir tu fantástico y exquisito sueño erótico, el cual yo mismo he inducido en ti.
Me embriago con el perfume más delicioso que tus naricitas han podido catar directamente de la fuente de placer, continuo ascendiendo y despacito para no alarmarte y truncar mi placer y tu ya casi inminente orgasmo, deposito en mi copa el vino ahora ya tibio y procedo a bebérmelo como gatico que soy lamiéndolo y al mismo tiempo te doy un masajito lento y delicado a mis nalgas desnudas, a mis piernas esbeltas, mi espaldita que se perla de una delicada película de sudor que yo, goloso, bebo al mismo tiempo que el vino tibio que parece que hierve en mi copa preferida.
Una vez saciada mi sed procedo a acariciarte mis hombros con tus manos y voy eliminando totalmente tu camisón al pasarlo sobre de mi melena rizada y sedosa como la de una diosa, poco a poco te voy dando suaves y delicados besitos a mis hombros, a mi nuca, a mi espalda, uno de tus deditos inquieto al fin como todo yo, te da un masajito a mi Jr. y eso hace que gimas de placer y das muestras de querer despertar.
Quitas mi manita de mi bebita y aprietas y masajeas a una de mis niñas y le das un pequeño apretoncito y lo increíble he inimaginable, ¡tu misma te extraes unas cuantas gotitas de ese alimento sagrado de nuestros hijos! y eso me pone extremadamente excitado, que ya no puedo mas postergar la toma de la fuente del placer y tu bebe bien portado lo exige cuanto antes, así que procedo a llevar a tu bebe a reunirse con mi bebita y ella lo recibe con una serie de contracciones que evidencian tu grado de excitación y es en ese momnetico cuando al fin oigo tu sensual voz pidiéndome "ya, ya, haaaaaa tómame, despacito mi gatico, haaaaaa despacito, así, si, abrázame fuerte y tómame mi gatico", no supe en que momento habías despertado y al enterarme que ya estabas en este mundo, introduzco a tu bebe en mi bebita y tu sueltas un gemido que hace que tu bebe bien portado crezca aun mas, pero ahora en tu interior ardiente y húmedo, con lo cual me dejas totalmente ardiendo y súper motivado para darle a mi bebita si cena rica y calientita cuanto antes.
Me detengo bruscamente, ya que estas a punto de matarme de amor y eso no seria justo ni para ti ni para mí, y tu me cuestionas el porque y yo sin contestar me deslizo a lo largo de mi espalda y de mis nalgas dándote un delicioso baño gatuno integral, al llegar a mi Jr. le doy el beso más rico de chupete y rosquete que jamás nadie en el mundo a podido igualar, tu gimes y pides, exiges mas,"¡Ohhhhhhhhh!, ¡Gatico lindo! , ¿Que me haces?, ¡Haaaaaa!, ¡Sigue no pares, sigue, comete a Jr, haaaaaa!", tus deditos inquietos no dejan de acariciar y proporcionarle a mi bebita un masajito sin igual que te hacen alcanzar el primero de tus orgasmos y al hacerlo de ella brota como fuente una cascada de miel que presuroso y hambriento bebo hasta saciar mi sed y mi hambre.
Al mismo tiempo mis manitas masajean y separan lo mas posible mis nalgas para que mi labor no se vea interrumpida y así poder arrancarte un orgasmo mas, el segundo y este mas intenso y prolongado y al hacerlo, gritas "¡Siiiiiiiiiiiii!, ¡Mi gatico, me vengooooooooooooooooooo!, ¡bebe!, ¡bebe!, ¡acábate tu miel! y no desperdicies nada!, ¡es tuyaaaaaaaa!, ¡haaaaaaaaa!, ¡hoooo!, ¡que rico!, ¡bebe mi gatico, que es tuya, tu miel, tu lechita, anda no dejes nada!".
Acabas y te abandonas y sueltas todo mi lindo y hermoso cuerpo sin dejar de disfrutar la sensación de placer y gusto que te he provocado, volteas la cabeza y me miras sobre mi hombro sonríes y me dices "¡eres un gatico travieso y mereces un castigo por estar de maldoso!.
¡Mira como esta mi bebito bien portado!, eres un inconsciente y debes de tratarlo con mucho mas cariño que como lo estas haciendo!", y en ese momento volteas, te incorporas y así arrodillada me impulsas hacia atrás provocando que caiga boca arriba e inmediatamente te apoderas de tu bebito y lo besas y lo mimas con mi lengüita traviesa.
Yo creo que va a estallar en cualquier momento tu bebito querido y amado, ya que mis manitas no están quietecitas, si no que, están al mismo tiempo proporcionándome un masaje suave, tierno y a la vez tan sensual que me hacen ver estrellitas y duendes, con la sensación que en mi provocas, descubres la botella de vino y las cerezas y me reclamas.
"¿Así que andas de latoso en la cava y en le refrigerador, heeeeeeeeee?, ¡pues ahora veras!" y diciendo y haciendo, bebes un poco de vino y otro poco le dejas en mi boquita tan sensual que se me antoja besártela y mordértela de lo rica que se ve, pero no me dejas y colocando la botella en la mesita, tomas unas cerezas en mis manitas y regresas a mi.
Y ¡sorpresa! haces exactamente lo mismo que yo hice pero sobre de tu bebe bien portado, y destrozas las cerezas sobre de tus tetillas y las remueles y remueles sobre de todo tu pecho sin dejar de bañar y acariciar a tu bebe bien portado con esa mezcla tan rica de saliva-vino que me transporta a la cima del placer y me arrancas sin misericordia una descarga de tu lechita que tanto te agrada y lo saboreas, al mismo tiempo que el vino es mezclado con lechita caliente en mi boquita tan sensual.
Cuando termino, sin dejar de masajear tus tetillas que están erectas por el grado de excitación obtenido con tu masaje basado en las cerezas, empiezas a ascender y degustar las mismas pero como toda una gatica mimada y consentida, a todo lo largo y ancho de tu dorso, hasta alcanzar con esa lengüita traviesa tu boca y me das a probar el beso de chupete y rosquete mas impresionante que en mi vida me han dado.
Para esto tu bebe y mi bebita reaccionan al unísono y ya están enfrascados en una lucha a muerte, en la cual no habrá ni vencedor ni vencido, si no solo dos ganadores de un orgasmo fulminante que hace que los cuatro, mi bebita, tu bebe, tu y yo acabemos desfallecientes unas arriba de otros totalmente exhaustos y agotados.
Ellos, amándose como buenos hermanitos que son, y tu y yo, dichosos y orgullosos de su magnifica actuación y además plenos y concientes de , ¡¡¡de que la noche es joven y el vino viejo y que aun quedan muchas cerezas en el platón!!!.