Entretenidos como gozando igualmente dándose unos entremeses a punta de unas metidas de mano que ha perpetrado como fabulosos en las entrepiernas de su enamorado por la caliente de Brooke; la secunda también su enamorado que le recorre con todo y falda jeans con sus botas italianas de punta negra, en que andan viendo la tele tranquilamente pero para no caer en la mentada monotonía de hacerlo lo mismo. Cocinando unas sabrosas sensaciones y excitaciones que ponen disparada hacia arriba las erecciones exhibidas tanto en los senos como en la mera micha hasta ano de la misma Brooke, encubando un clímax desbordante que la inunda como la inyecta departidamente por el enamorado; efectivamente, también le va aumentando la erección a la pinga que se le para y sobresaliéndole por debajo del mero calzoncillo y del mismo pantalón que se tornan con unos jadeos y gemidos cantados por los dos al mismo tiempo, en que se pasan viendo la tele en la sala juntos incitándole y cada vez más excitándose que al cabo de dos horas están arrecho.

Metiéndose en la recamara desnudandose completamente y expresando los placeres carnales como acostándose al hacer el sexo disparándose todas las energías cómo las ganas al follarse, cogerse, hurgarse, mamarse, chuparse, montarse, cabalgarse, abrazarse, manosearse, apasionarse, coquetearse, conquistarse, deleitarse, desearse, entregarse, venirse, mojarse, etcétera toda la noche; en que estaban hechos unos verdaderos demonios como pecaminosos que no dejaban ningún cabo suelto y todos unos adictos a los juegos sexuales que los mantienen vigorizados como activos y con el fuego de la pasión interminable e inagotable hasta eternamente por el resto de sus días juntos como pareja de unión libre actualmente tanto el enamorado como la mismísima Brooke.

Mientras veían la tele para cambiar un poco la monotonía y en la cama los dos.