Estoy saliendo de la tanda de las 3 de la tarde. La película qué ví me dejo susurandome él bichito de lo erótico y mucho más; camino volando a la máxima altura hacia una tienda conocida por mí para comprarle unas botas para mí chica colombiana Casandra.

Busco la talla de pie de Casandra qué és 8. Decido comprarla, salgo también volando a la máxima prontitud hacia él prostibulo, qué frecuento hoy por hoy en vivo y a todo color.

Voy derechito hacia él encargado de la noche. Pregunto: Por mí adorable, de ahí bonita hasta divina por supuesto querida Casandra; bueno él encargado me informa salió por un momento, entoncés me topo con otra chica colombiana muy amiga conocida qué me informa fue al súpermercado la llamare qué está por acá su marido. Agradecido por él favorcito la espero afuera en la entrada, él primer taxi qué sé estaciona viendola corro abrirle la puerta del taxi nos saludamos y me sonrié Casandra, pagando por una hora nos vamos con todo los paquetes derechito a su habitación; ya ahí cómo siempre suelo hacer de ahí actuar la desnudo de arriba hacia abajo a mí chica colombiana Casandra.

Gustándole él regalito que le hice yo. Me apresuro al ponersela toda desnuda solamente con las nuevas botas; qué le digo: Quiero qué las uses y te las pongas, cuándo estoy contigo para nuestras habituales fantasías de mí ejecutiva universitaria.

Mé paso zurrándola continúa e intensamente todo él cuerpo mediano de Casandra, entre tanto me mamá mí pinga al preparármelo efectivamente me pone cañón, duro, enorme, firme, grueso, hinchado, inflando y sobre todo parado; ahí me la acuesto para follarla empujando e impulsando, la viro la cogo propulsandome tremendamente sin cesar estando muy deseado también muy deleitado además tan emocionado pero excitado por hacer ilusión triunfadora él susurro de las botas a través de quedar picadito por la película que ví en la tanda de las 3 de la tarde hoy en el mismo cine y mucho más.

Me vengo grandiosamente a gorgotones en hartas pajas calientes abrazado y pegado a Casandra, me visto queda virada a lo ancho de su cama me sonrié me las pondré siempre que llegues a visitarme sobre todo para nuestras reiteradas fantasías eróticas de tú ejecutiva universitaria sé queda desnuda solamente con las botas puestas me despide por detrás de la puerta abierta de su habitación solo con su cara a la vista me despidó de mí chica colombiana Casandra al marcharme y salirme del prostibulo hacia mi casa en la noche de hoy sábado.