Agraciada por sus virtuosos, contoneos como poces de levantona la secretaría de la facultad de derecho y ciencias políticas; viendose muy aventurada al vestir sus uniformes de trabajo diario ajustada con sus medias café brazil al reafirmar mucho más sus bellísimos glúteos femeninos. Atrae a su compañero de la oficina de registro, que no puede resistirse a sus tremendas insinuaciones coquetas y enamoradoras.
Realsando toda sus virtudes de mujerzuela ocasional que se vende y complace igualmente al mejor postor sexual. Entonces al llegar a diario para entrar a su oficina le suena el telefono contesta efectivamente es el compañero de registro que quiere conversar algo con ella, le pide entrar por la puerta de atras de la oficina de la decana. Le abre lo saluda el, le peñisca su glúteo y cierra ambas puertas sentado se acerca al desabrocharse su blusa se quita el sostén hablando aprovecha antes de las nueve de la mañana, le sujeta el seno izquierdo puntiagudo y voluminoso mientras le mama el derecho le acaricia con su mano derecha su cabello de ahí, le pide que quiere besarle el vientre y masturbarla urgentemente. Accediendo a su petición se levanta su falda entallada se despoja de sus pantimedias junto a su panti muy sexy a su vista, le abre las piernas para besarla de arriba hacia abajo recorriendo con sus labios toda el área de su vientre muy ricachon, divino como voluminoso como toda sus otras partes anatomicas de ahí, se sienta en el regazo a la altura de su pene varonil calenton; le manocea sus genitales masculinos y se lo mete empezando a masturbarse con sus manos agarradas a sus muslos, le dice excitame mi corazón que este es suficiente desayuno para mi persona que me entregas y me sirves todas las mañanas al llegar a mi oficina.
Exactamente a cinco minutos antes de las nueve de la mañana terminan limpiandose todas sus segregaciones vaginales producidos entre ambos se acomodan toda su ropa interior, y aprovechan para acomodarse su vestuario de trabajo diario y se peinan el cabello alboratodo por tanta emociones, probadas, degustadas y placenteros desayunos amorosas que se dan mutuamente; se despide saliendo por la misma puerta por donde ingreso el mismisimo compañero de la oficina de registro, para estar a sola con la famosisíma secretaría de la facultad de derecho y ciencias políticas.