Desde que se despiertan hasta que se duermen estan juntos en la misma cama y aparentando que son un matrimonio modelo como feliz ante los ojos de los familiares igual que todos sus conocidos, pero la realidad es otra cada uno tiene sus relaciones por fuera de su sacro hogar sin importarles un mínimo el daño que se estan haciendo con su formas de reacionar y comportarse.
Acostandose con compañeros de trabajo que saben como regocijarlos, excitarlos, tratarlos, complacerlos, coquetearles, enamorarlos, aprovecharlos finalmente gozarlos todo el tiempo como las reiteradas oportunidades que se le presentan justo a tiempo cada vez que se proponen tener una aventura romantica en los sitios frecuentados al no verse involucrados en escandalos ni siquiera que los reconozcan haciendo el papel de adulteros mutuamente en público.
Efectivamente dejandose tocarse, acariciarse, peñiscarse, rozarse, agarrarse, acostarse, besarse, revolcarse, masturbarse, mamarse tanto los senos como los penés, acostarse y sobre todo revorcarse como unos autenticos depravados infieles, cochinos y por supuesto indecentes que no pueden disfrutar ni soportarse juntos en la intimidad de su cama sino que les place compartirlo y tenerlo con otras personas que son compañeros y amigos conocidos que les gusta la verga cabrona de la pareja que no repara en nada que le estan faltando al juramento que hicieron frente al sacerdote el día en que los casaron en la iglesia.
Situación de la mujer que viste la mayoria de las ocasiones con faldas entalladas ajustadas o vestidos mostrando en esencia la ricura contorneada de su anatomia femenina al incinuarse con las poces de sus gluteos muy parados y firmes por efecto de sus pantimedias permitiendo libertinamente los actos de que la utilicen y se sobrepasen como fuera un objeto sexual exhibiendose públicamente al no tener decencia para nada.
Mientras que el hombre le encanta que las mujeres le ruegen y le digan cosas provocativas cercano al oído al calentarlo dandoles a entender que se derriten igual mueren por que las lleven a la cama para cogerselas en todas las posiciones conocidas en el arte de la sexualidad sin adquirir compromiso alguno entre ambos.