"Recordando una mañana con alguien especial con quien al reencontrarnos, dada la Distancia, no ha podido ser."

No sé porque hay días en que las mañanas "me traicionan", abro los ojos y me vienes a la mente como un flash, automáticamente me pregunto si a tí te pasa lo mismo que a mí, si te vengo a la mente de golpe de la nada y si te entran ganas de besarme, de sentir eso que sentimos cuando nos acercamos, esa vibra inexplicable. No solo son ganas de besarte sino también de sentirte calentito, de oler tu piel mientras la recorro acariciándote.

Meto una de mis manos debajo de tu polo, te volteas sin abrir los ojos y te doy un beso en los labios, otro en cada una de las mejillas y en la punta de tu nariz y te sonríes, abres los ojos y te volteas hacia mí para darme los buenos días, te estiras, vas al baño y vuelves a meterte en la cama. Me preguntas que haremos hoy, paso una pierna encima tuyo y algo me dice que la tienes dura asi es que te respondo que lo único que sé por el momento, es como vamos a empezar el día…me meto debajo de las sabanas y veo que mi intuición no me falló, lo primero que veo y que ahora tengo frente a mi es tu pinga, erguida, imponente, poso mis labios en la punta de tu glande, empiezo a darle besos mientras mi lengua la acaricia bañándola toda en mi saliva, continuo esta vez empuñándola y resbalando mi mano de arriba a abajo, suavecito. Empiezo a masturbarte, me excito mas y empiezo a mojarme, siento como mis otros labios empiezan a latir cuando te la toco y aumentan mis ganas de mamártela, de sentir como el calor de mi aliento y el contacto con mi boca hacen que se te ponga más dura, escucho un gemido, empujas a un lado las sábanas, me acaricias la cabeza y juegas con mi pelo mientras mis labios absorben tu verga, las ganas que tienes de que te la coma por completo te llevan a presionar mi cabeza para dirigir el ritmo en que quieres que te la mame, en el que quieres desesperarte por más,  la tienes durísima, te miro a los ojos mientras sigo deslizando mis labios por tu verga deliciosa, jadeas, me encanta verte así, ver tu glande a punto de explotar soltando gotas me excita más, tengo el clitoris duro y esa cosita que te encanta comer  ahora se ve hinchada y de un rosado rojizo como si estuviera en fuego, caen gotitas y me meto los dedos, después te los pongo en tu boca asi mojados para que sientas mi sabor, me encanta verte y tenerte asį.

Me pongo en 4 de espaldas a ti y bajo a lamerte esa parte suavecita que me gusta tocarte cuando estás encima mío, te beso, te lamo, siento como ardes de placer, te agarro las bolas y las empujo adentro mi boca porque te quiero comer todo, completito. Me volteo y empiezo a desesperarme, me abro los botones y acerco mi pecho hacia ti, me encanta que me beses los pezones, sentir tu lengua cuando me los chupas y que me los pellizques despacito. Pones una mano en una de mis tetas mientras me mamas la otra, nos besamos y una de tus manos baja por mi espalda, me pasas tus dedos por cada vértebra, llegas a la ultima y me agarras una nalga apretandola,  después la sueltas y me acaricias pasando tus dedos por donde se esconde el chiquito y me erizo más, quieres meterme los dedos en la concha y sentirme húmeda, pero no te dejo porque quiero que en vez de tus dedos, sea tu pinga la que se encarga de transmitirle a todos tus sentidos lo que sientes al penetrarme, al someterme a ti así de mojada, quiero que sea tu sexo el que registre y transmita al resto de tu cuerpo que este tipo de placer y de deseo, el estar así de arrecho y a la vez el sentir este tipo de armonía con alguien, solo lo sientes conmigo…

Estoy de rodillas encima tuyo frente a ti con una pierna a cada lado, me pides que me acerque más porque quieres comerme, me acerco lo más posible a tu boca, me agarras los muslos como queriendo abrirme más y empiezas a comerme, me transportas a otro planeta con cada lamida, me la chupas delicioso y empiezo a moverme al ritmo de tu lengua, quiero que me la metas pero no quiero separarme de tu boca, el sentir tu lengua entrando y saliendo me produce un placer inexplicable, no paro de gemir y de moverme, me pongo  tensa, me erizo de nuevo, jadeo y siento que formo una piscina de placer y que mis latidos de aceleran hasta que una especie de shock eléctrico se apodera de mí, mi cuerpo se contrae en todas partes y me arranca un grito al estallar en un orgasmo increible, uno que sentí mas intenso que nunca ya que lograste prolongarlo al no querer soltarme,  me agacho a besarte mientras siento que la intensidad va desvaneciendo, te digo que eres delicioso, nos damos un beso rico y moviéndome a tu lado algo me detiene.....tus ojos, te miro y veo en ellos ese instinto casi animal, ese que al olerme hace que quieras metérmela dándome una estocada tras otra, ese, que te hace olvidar por un momento que al tenerme cerca, también sientes ternura y por mucho que quieras contenerte,  también sientes amor.

Me echo a tu lado y entre caricias me empiezas a besar y lamer todo el cuerpo, al voltearte para bajar a mis muslos veo tu verga a punto de explotar y me voy excitando  de nuevo, bajas hasta mis pies y los besas, me derrite tu ternura. Te volteas y te tengo encima mío, nos besamos y te abrazo pasando mi brazo izquierdo sobre tus hombros, mientras q con el otro recorro tu espalda con caricias. Reconozco una cicatriz en tu coxis, justo donde empieza el culo, cuántas veces mis manos estuvieron ahí empujándote hacia mí a punto de venirme…. ¡cuántos recuerdos!

Mi cuerpo empieza a buscarte, pero me dices que “lo deje” que “él solito“ me va a encontrar, el roce de tu piel y tu olor encima mío hacen que no pueda más y te digo que te quiero adentro mío, te ruego que me la metas y te sonríes, me haces “sufrir” un poquito preguntándome si voy a darte otro orgasmo, te digo que síííí y que todos son para ti, por fin llegó el momento que tanto esperé,  de pronto siento como de una estocada me penetras, nuestros cuerpos encajan perfectamente y se empiezan a mover al ritmo de tanto deseo, de tanta pasión y de tanto amor, con solo mirarnos sabemos que este ritmo, ésta magia, solo la sentimos estando así       juntos, solo contigo y solo conmigo. El tenerte adentro mío hace que no pare de gemir, que delicia es tenerte así, si fueras portátil te tendría solo adentro mío.

El deseo solo aumenta y el sentir tu verga al fondo hace que enrede mis piernas en tu espalda y mueva mi pelvis hacia ti queriendo más, como queriendo que entres todo tu adentro mío, siento gotas de sudor bajando por mi cara y en mi pecho entre las tetas, sentir tu verga atravesándome hace que me entregue a ti todita, muero por sentir tu leche calentita adentro mío, de pronto me agarras el culo para acercarme más a ti en cada embestida, abro las piernas todo lo que puedo para sentirte más, hasta que los gemidos se convierten en gritos y mirándonos a los ojos estallamos juntos en un orgasmo tan intenso como los espasmos que contraen en ese instante cada esquina de nuestro cuerpo, y  tan maravilloso como vernos siendo uno delirando de placer, de deseo y de ternura, sometidos para siempre a esta inmensa, maravillosa e infinita pasión.....