Todo comenzó como un juego. Había cobrado un dinero y fuimos a cenar a un restaurante caro. Salimos tomados y le quise comprar un vestido atrevido, lo encontramos. Era un vestido de piel muy corto con hombros descubiertos y cierre detrás. Le compré unos zapatos de tacón altísimos de charol rojos. Ella llevaba una chamarra de piel negra así que combinaba todo bien. Lo que más llamaba la atención eran sus piernas torneadas, no eran muy anchas ni muy delgadas. Eran perfectas. Su pelo negro y su piel blanca. La boca roja como sus zapatos. Tengo un fetiche con los tacones de aguja. Fuimos al lobby de un hotel a presumirla. Claro que se le quedaban viendo. La mandé a que comprara algo en la barra para que la observaran sin mi. Ahí es cuando comienzo a temblar, literalmente a temblar. Un hombre muy joven se le quedó viendo pero no se atrevió. Yo soy alcohólico pero quería valor para pedirle lo que deseaba. Me tomé dos y entonces le dije "ve al baño, quítate los calzones y dámelos en la mano. Yo me saldré del bar y te espiaré a lo lejos. Quiero que coquetees con quien tú quieras. Puedes hacerlo. Tienes mi permiso, la única regla es que si te llamo y te digo que te despidas y salgas, lo hagas." Así que obedeció, le vi la cara de lujuria. Carajo, quisiera volver a ese momento una y otra vez. Salí, estacioné el auto cerca y le escribí por mensaje "cómo vas?". Tardó un minuto y contestó "ya tengo compañía, estamos afuera fumando". Cuando dijo eso seguí temblando, sentí miedo, y excitación. Pasé a lo lejos y efectivamente ahí estaba, fumando con un desconocido, yo soy alto pero ese tipo era más alto que yo. Tenía el pelo un poco largo y una chamarra de piel también. Sentí que comparado con él yo no tenía mucho que ofrecerle, salvo dinero. Pasé de largo y no me vio, o disimuló. Le mandé un mensaje de "cómo vas" pero ya no me contestó hasta después de un rato. Su mensaje decía "es el baterista del grupo tal, que ya sabes es mi favorito. Me está pidiendo que subamos a su habitación, él, sus amigos, las otras dos chicas y yo. Puedo?" Me puso una carita con una aureola, como de angelito. Sabía lo que estaba pasando y que sí me negaba por lo menos le daría su número y lo haría después. Le dije que rentaría una habitación, que sí algo salía mal marcara directo a mi número e iría por ella. Aceptó. Me dijo, pero tomate uno de mis calmantes que dejé en el auto y duermete. Cuando regrese al cuarto te cuento. Hice lo que me ordenó, ya no mandaba yo en este juego sino ella. Fui a la recepción y mientras me daban mi habitación los vi subir a todos al elevador, ella lo besaba. Sentí que había cometido el error más grande de mi vida porque era mi novia y nos íbamos a casar, después de esto ya no sería nunca lo mismo. Me fui al cuarto, me masturbé como dos veces y traté de dormir. Ella bajó como a las 6 de la mañana, olía a alcohol y tabaco, me dio un beso en la frente y me pidió dormir. A las 10 am me despertó y estaba recién bañada, me pidió cogerla y lo hice, su cara de lujuria era irreconocible, también tenía algo de enojo o resentimiento. Cuando terminé le pedí que me contara con detalle y lo que me contó fue lo siguiente: "Cómo pudiste ver subimos. Nunca creí que dijeras que sí, creí que era un juego de verme coqueteando pero nada más. Me sentí poco valorada, despreciada, utilizada o prostituida, entonces le dije al baterista que esa noche había cortado con mi novio. Entonces fue cuando subí con ellos. Primero entré con el directo al cuarto y los demás se quedaron en la sala de la suite, le saqué el miembro y me lo metí de inmediato, yo contra la pared. Se vino relativamente rápido, como recordarás no traía yo panties así que fue muy excitante para él descubrirlo, tenía odio contra ti pero preferí dejarme llevar por la excitación. Me mojé como nunca y tuve dos o tres orgamos seguidos. Salimos a seguir bebiendo, les pregunté a las chicas si alguna era lesbiana y una dijo que es bisexual, por lo que le di sexo oral frente a todos y ahí en la mesa de centro, frente a todos, hicieron fila para cogerme los otros dos. No sentí físicamente gran cosa y en cierto momento quise llorar. Gemí llorando y no se dieron cuenta. Seguimos tomando hasta que nos fuimos quedando dormidos. Dormí un par de horas en la sala y entonces bajé. Quiero que sepas que te odio, que nunca habría hecho algo así andando contigo, siempre he sido putona pero de un solo hombre y esta vez me hiciste rebajarme a lo peor. Pero tenía permiso y pretexto y a ti, estúpido, cuidándome si algo salía mal. Entenderás que hoy terminamos." Me dijo que luego hablábamos, tomó sus cosas y respeté que saliera. Terminó conmigo, pero a veces me llama. Me dice que si quiero puede venderme los videos donde tiene relaciones con otros hombres. Doscientos dólares americanos por archivo. No creí que fuera capaz, me dió su número de cuenta. Deposité. Me mandó el archivo. Ahí estaba ella, cogiendo con un hombre de unos 55 años, ella que tiene 23, viendo a la cámara, chupándose el dedo. Me dijo que si quería ver el vídeo con un negro sería el doble de dinero. Ahí estaba ella, cogiendo en su cama blanca y el maldito negro dándole tan duro como yo nunca lo hice. Me retó a darle el doble y el vídeo sería de dos hombres y una amiga con ella. Estoy ahorrando para dárselo. Ahora la veo en sus redes sociales de la mano con el tipo famoso acompañándolo en eventos. Ahora tiene más seguidores, entre ellos algunos músicos, productores, cantantes. Tantas veces yo la cogí cuando era solo para mí y ahora yo se la regalé al mundo. Nunca me sentí tan exitado por ser basura en su vida, tal vez nunca la merecí. Pero me gusta que me mande migajas de su atención. No sé por qué. Todo por un juego.