Escabulliendose un colaborador de la alcadía en donde labora hoy día Yessenia que esta en uno de los sanitarios del baño orinando. Silencioso y escurridizo como fuera un original ladron experto como profesional, sin que lo sienta ni lo oye, ni tampoco lo note por lo sigiloso que es el colaborador.

Metiendose detras de ella sentada tranquila, calmada y despreocupada de la presencia propiamente del colaborador en el mismo sanitario; cuando se limpia al pararse se voltea para jalar la cadena del sanitario reaccionando ofendida y hablandole muy seria como muy molesta no quiero tener acosos ni altercados con ningún colaborador masculino ya que por eso tuve muchos problemas y situaciones en mi anterior trabajo, por que no se sale del baño de damas y dejemos la fiesta en paz quiere. Mirandolo con unos ojos enajenados como de loco hasta perturbado igualmente de pervertido sexual, sale rapido del sanitario al quedarse contra los labamanos con la falda levantada algo asustada como nerviosa como aterrorizada e inclusive, sin poder defenderse en fin todas las vaínas que se le pega y se le ocurra al colaborador de la alcadía encerrado en el baño con Yessenia.

Este se aprovecha para besarla y acariciarla como manocearla hasta sobarla pero se encontro a un tempano de hielo que tras forcejeos y empujones respectivamente repetidas pero a la larga se deja envolver y dejarlo que se lo haga en su mente se dice todavía soy un encanto y una fascinanción además una excitación y una coqueta empedernida que levanta y coquetea a manos llenas a pedir de boca. Follandola agresiva como aguerridamente con las manos en la masa plenamente por el colaborador de la alcaldía encima de Yessenia. Qué le toca, agarra, aprieta y juguetea con los senos voluminosos y puntiagudos muy parecidos de verdad espectacularmente a unos fructiferos como jugosos melones a pedir de boca; se la coge apoyante y afirmante con sus dos manos sobre uno de los labamanos jadeando y gimiendo con todas sus fuerzas placentera, apasionada y divirtiendose con todo el gozo que le aplica el colaborador de la alcaldía que no lo incinuo sino que lo atrago con su inocencia y sobre todo su hechizo de prostituta que a su lastre ha dejado mucha secuela en los anteriores hombres que han pasado por su vida y por su cama por el estilo que se diga y se afirma hoy día.

Arreglandose y acomodandose el uniforme que es el mismo que utilizaba en la universidad y peinandose un poco Yessenia despidiendose y dejando que se anticipe y se adelante el colaborador que desaparece al instante en un cerrar y abrir de ojos del mismo baño de la alcaldía donde trabaja Yessenia que sale al cabo de unos veinte minutos para irse a su escritorio sin que nadie se enterara lo que paso encerrada en el baño.