Hola soy Ale, de nuevo.
Quiero contarles lo que pasó el sábado 6 de nov.
Adolfo no se había aparecido pero corrían tantos rumores sobre lo que había pasado en el patio de mi casa en la madrugada del 3, que ya hasta me daba pena salir a la calle.
El sábado recibí una llamada de Adolfo a las 11 de la mañana, en la que dijo:
-Hola calientita!! Cómo te amaneció el culito??
-Bien gracias y a ti??
-A mi nunca me han metido objetos... (hubo un poco de silencio)
-Oye Ale, quiero invitarte a salir, puedes?
-Cuándo y a qué hora? (La verdad es que me gusta mucho y no iba a perder la oportunidad de coger de nuevo con esa verguita)
-En diez minutos paso por ti.
-Pero debo bañarme!!!!
-No te preocupes, ni es un lugar público, ni necesitas ir bañada.
Nos despedimos y puntual llegó por mi.
Me pusé una falda, con unas botas a media pantorrilla, una playera de tirantes sin sostén y una chamarrita.
Cuando subí a su carro en vez de saludarme, metió su mano en mi entrepierna y al darse cuenta que traía una tanga, se molesto y me exigió que bajara del auto, que con calzones no podía ir con él. Y le dije que me esperara un momento en lo que entraba a mi casa y me los quitaba, y no me dejó. Sólo dijo:
-Quitatelos alli donde estas parada.
Me quedé helada, pues en la calle había varios de mis vecinos, pero no me quedaba de otra.
Metí mis manos y me empecé a bajar la tanga, hasta que termino en mis manos. Aunque creo que no fuí muy discreta pues alduno de mis vecinos me vio el culo.
-Ahora ya puedes subir. (que increible, pero con eso yo ya estaba escurriendo).
Emprendimos el viaje,hacía el ajusco... Ibamos platicando de lo que había pasado en la fiesta. Así que las cosas empezaron a subir de tono y empezaron las ordenes que yo con gusto obedecería.
La primera fue que le mamara la verga mientras conducia, a lo que felizmente complací.
Pero la segunta me pusó, excitadisima. Ordenó que bajara todo el vidrio de mi puerta, que subiera una pierna y la otra en el tablero de su auto,un cougar deportivo negro, y que me masturbara para que toda la gente me viera la rajita rasurada.
Me costó un poco de trabajo pues me da pena, pero conforme nos acercabamos al lugar, la gente se hacia escasa. Él de repente me tocaba o metia un dedo y después lo llevaba a su boca para chuparlo.
Despues de unos minutos llegamos a un lugar muy despejado, donde por cierto creo que nadie se acecaría, a pesar de había unas cuantas casas abandonadas.
Bajamos y empezó a besarme y a manosearme, yo estaba excitadisima, ya quería que me lo metiera, pero el sabe como hacerte desear las cosas, poco a poco me despojo de toda mi ropa,y aunque sentía q estabamos solos, no dejaba de preocuparme que alguien nos mirara.
Hasta que empezó a acomodarme para meterme su verga, me dijo que me agachara tratado de tocar las puntas de mis pies doblandome lo mas que pudiera, y que si me soltaba.. me hiría mal.
Debido a la flexión mis hollos estaban muy bien apretados, así que cuando le metió, yo sentía gran placer y él tambien.
Así pasamos un buen rato, hasta que se escucharon ruidos, pero él no les dio importancia y por supuesto no me dejo de coger. Y entró un policia a la casucha donde estabamos, la verdad a Adolfo le importó muy poco, pues el poli, nos dijo que estaba prohibido acercarse a esa zona, y que además estabamos violando la ley, por mantener actos inmorales.
Adolfo sólo respondió así:
-Oiga poli, no le dan ganas de violar la ley, y cogerse a este culito.
-Joven, que pasó, estoy laborando, no puedo faltar a mis principíos.
-Mire poli, yo le ofrezco un buen rebolcon con esta puta, y usted se olvida que nos vió aquí cogiendo. Qué le parece]?
-Es que fijese que no vengo sólo, viene mi pareja, y pues no creo que se valla a poder..
-Ahhh él tambien puede participar, además esta vieja es bien golosa.

El policia sin contestar salió, y en seguida volvió con su amigo, y empezaron a tocarme, la verdad los señores no estaban de muy buen ver, y me sentía muy extraña. Pero a pesar de todo, me la estaba pasando de pelos.
Hicimos un trio fenomenal, Adolfo en mi vagina y los polis, uno en mi culo y otro en mi boca.
Pero, no olvidaran que Adolfo es perverso, y la cosa no podía acabar allí.
Les dijo a los polis que una de mis fantasías sexuales más latentes era que me metieran una macana en el ano, que siempre me había gustado meterme cosas. Y a ellos se les hizo interesante ver como realizaba mi fantasía.
Así que acercaron la macana y en cuatro patas me la empezaron a ensartar, les confesaré que si me volví una adicta a los objetos.
Y aunque no es muy gruesa, me proporcionaba placer, esta vez Adolfo simulo los movimientos de penetracion.
Pero no fue suficiente. Para Adolfo es muy importante verme tal dilatada, que algo tenía que ocurrirsele para que se me abriera más el hollo.
Y así fue. Les pidió a los policias que me metieran la verga los dos, simultaneamente, mientras él me cogía la vágina.
Los polis, pusieron la cabeza de sus vergas sobre la entrada de mi culo,y entonces Adolfo abría mis nalgas, mientras ellos me jalaban por la cintura hacía su regazo.
La verdad no tardaron mucho en entrar, pero lo que no sé es como lo lograron, esta vez ya no me dolió tanto pero no deje de sentir que quería más.
Una vez penetrada, adolfo me enderezó,y sentí cono me entraba cada vez más un pedazo de carne en el ano. Así se incó y me mamó la rajita.
hasta que me vine en su boca, ylos polis me llenaron el hollo de semen.
Ese día me vestí y al subir al carro para llevarme a mi casa, me dí cuenta de que no me podía sentar muy bien porque me dolía.
A lo que adolfo respondió, sobandomelo, pero en realidad lo unico que lograba era que yo me excitara más al grande de pedirle que me volviera a coger antes de llegar a mi casa.

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