Concerte una cita especial para hoy en la tarde en la zona roja de la ciudad con un ejecutivo corporativo. Que me pide que me vista y luzca por supuesto un disfraz de prostituta para su deleíte carnal como depravado, me entienden en todos los sentidos de la misma palabra.

Me preparo con mucho detalle en el vestuario acorde a la petición acogida vía celular por el mismo ejecutivo corporativo. Quién me llamo exclusivamente para concertar una cita sexual conmigo, se trata de botas de tacon alto más arriba de la rodilla con portaligas, trusa, minifalda de licra ajustada al mismo contorno escultorico anatomico, que dios me moldeo al nacer yo que soy la genuina no tengo ninguna copia conocida junto a un escote todo de color rojo vino intenso. Que me cubre solamente mis deliciosos, esbeltos, atrayentes, provocativos, voluminosos, espectaculares especialmente poderosos senos cachones como calientes recién ejercitados de una manera atléctica y reafirmados gimnasticamente. Con el atuendo llevo puesto lentes de contactos color dorados y una peluca rojovino intenso y me maquillo con colores moreno para pasar por inrreconocible, con guantes del mismo color de la ropa de prostituta arriba de los codos mismos.

Espero a los dos minutos de las cinco y treinta cinco minutos de la tarde en la zona roja de la ciudad al ejecutivo corporativo. Se acerca un automovil ultimo modelo conducido por un varonil caballero que me habla te pagare diecinueve mil dolares por tener una cita ocasional contigo le sonrio al mirarlo le pregunto; es usted la cita solicita via celular en la mañana de hoy, me responde por supuesto dama sabrosona como bellísima de cuerpazo y de rostro juvenil.

Abordo y acelera el automovil por la calle de la zona roja. Me habla que me quite ahora mismo la truza por favor, lo obedezco le digo que me haras divino ejecutivo corporativo. Mientras maneja el automovil con su mano izquierda me acaricia y toca indecentemente con todo el gusto mi ingle como mi clitoris, lo que me excita mucho al punto de empezar a sudar caudalosamente por la reacción emitida por su mano izquierda que no se quedaba quieta, al moverla por mi clitoris virgen razurado como una verdadera prostituta de burdel.

Escoge como ambiente un estacionamiento cercano a la mismisima zona roja empieza a cogerme y eyacularse sexualemente conmigo acostados los dos en el asiento trasero de su automovil de ultimo model. Que me dejo perplega igualmente sorprendida por los lujos y el estilo de este ejecutivo corporativo. Me baja el zipper trasero del escote con la minifalda de licra corrida hasta mi ombligo al masturbarse al mismo tiempo me mama ferozmente mis senos; se nota que esta muy lujurioso, apasionado, hambriento especialmente urgente de correrse conmigo hasta la máxima expresión corporal como sexualmente conmigo finalmente satisfacer sus caprichosos deseos de conquistador mujeriego.

Me incorporo doblandome hacia adelante apoyada en la misma palanca de cambios de velocidad de su automovil ultimo model. Que dio comienzo propiamente a nuestra cita ocasional concertada por el mismo ejecutivo corporativo en la mañana de hoy; me penetra como fuera un tablero de tiro al blanco con dardos afilados, pero para este casa es con su portentozo como viril pene muy erecto durisimo como gigantesto asombrada al culearme jocozamente al movernos continuamente de adelante hacia atras. Obteniendo un orgasmos sorprendente, fabuloso, magnifico, extensivo y gratificante en comparación a mis otros encuentros de aventuras sexuales en las ocasiones pasadas.

Regocijante por virtud demostrada por la voluntad cortez y sobre todo golosa del ejecutivo corporativo ante mi presencia juguetona personificada como una grandiosa y grata prostituta. Queda ejerciendo su presencia al masajear al meter y sacar su dedo indice constante de mi vagina haciendo que me exhorte, motiva, fluya mis liquidos vaginales marchante semejante a la aceleración del motor del automovil ultimo modelo del ejecutivo corporativo y victoriosos por todo estos actos; que esta teniendo sexo plenamente a despensa muy sinverguenzamente con mi cuerpazo esbelto de prostituta ocasional.

Ya tuvo su venida y corrida majestuosa conmigo al quedarnos orgullosos por nuestras herramientas organicas que tenemos muy activas sexualmente nos abrazamos por breves instantes sonriendo y sudados por completo. Chorriando afluentemente desde nuestras cabelleras hasta las mismas piernas. Me acomodo y me pongo mi ropa de prostituta al maquillarme como peinandome mi cabello algo alborotado por tanta revolución experimentada, lograda, lubricada como suculenta que he participado como fuera una universitaria alocada y adolescente promiscua; hecha desde que me canse hace más de doce años con mi esposo el viajero de negocio que me tiene abandonada por todo el año entero.

Pone en marcha el automovil. Me entrega en mis porpias manos el cheque pagadero de lo acordado cuando aborde su automovil ultimo model en la zona roja, donde me cite con el ejecutivo corporativo esa tarde muy veraniega y asoliada interminablemente premiada entre ambos.