~~Mi nombre es V?ctor, tengo 28 a?os, por mi trabajo y formacion
que sigo incrementando acostumbro a ir a conferencias, seminarios,. Hace dos
semanas ten?a acudir a una conferencia de un seminario, siendo esta la
tercera.
Entre los conferenciantes hab?a una mujer, Marina, que ya estaba en las
dos anteriores. Ten?a cuarenta y dos a?os, rubia con el pelo largo,
de cara no era excesivamente guapa, pero me resultaba tremendamente atractiva.
En las otras dos conferencias estaba discretamente vestida, en este caso venia
con un traje falda chaqueta y con una camiseta de tirantes con un escote pronunciado.
En las dos anteriores no hab?a despegado mi mirada de ella, aunque no
fuera quien hablase, ella lo hab?a percibido por estar en las primeras
filas. En este caso, aproveche para situarme en la primera fila, y no perd?
detalle de ella y por supuesto su escote. Ella lo notaba y en algon momento
incluso sonri? a mis miradas, que propiciaba mi mayor fijacion
en ella.
Al terminar la conferencia, hab?a un cocktail t?pico, y aproveche
para acercarme con la excusa del tema de la conferencia, que ella agradeci?
mis felicitaciones. Estuvimos charlando media hora, sin que yo pudiera desviar
mi mirada de todo su cuerpo que de cerca me resultaba mas atractivo.
Aprovechando la conversacion, ella me indico art?culos y libros
interesantes sobre el tema, y ante mi insistencia comento la posibilidad de
facilitarme uno que tenia en la segunda planta del edificio, (vi el cielo abierto),
inmediatamente suger? acompa?arla, (era una persona de apariencia
muy seria, y en p?blico no dejaba facilidades para intimar) despu?s
de dos segundos expreso claro, porque no, as? te ense?ar?
el edificio.
Subimos las escaleras, pudiendo observar lo onico que me faltaba, su
falda intu?a un culo algo amplio pero muy bien formado. Ella al verme
detr?s, r?pidamente me puso a su lado, e iba ense?ando
el edificio, yo aprovechaba y acercaba mi mano a su espalda en cada momento
para notar su reaccion, inicialmente de sorpresa, posteriormente sin
apenas reaccion.
Entramos en una sala de reuniones, y coment? que el libro estaba en un
almacon peque?o junto a la sala, al ir hac?a all?
me acerque, era peque?o y estrecho, y sin apenas luz, no lo encontraba
y me invito a ayudarla. Se hab?a quitado la chaqueta para no mancharla,
y estaba con una camiseta blanca de tirantes, que hac?an notar sus pezones
claramente.
Entre y me acerque por su espalda, ella me mir? y dijo creo que
no vamos a encontrar el libro, en ese momento pens? que en realidad
no hay libro y que era mi oportunidad, comentondola no importa
el libro, es mejor poder estar tan cerca de ti, Marina me miro sorprendida,
mientras yo agarraba su cintura, dio un peque?o suspiro y preguntondome
que hacia y que pod?a entrar cualquiera. Cerr? la puerta del almacon,
y puse el cerrojo. En ese momento, no sab?a su reaccion, y apoyada
sobre una mesa, me mir? diciendo no has dejado de mirarme estos
tres d?as, y hoy ?te ha gustado mi escote verdad?.
Fue el banderazo de salida, me abalanc? hacia ella, y empec? a
besarle el cuello, mientras acariciaba su espalda, ella suspiraba sin decir
nada. Me acerque a su boca, para tenerla entregada, y cruzamos nuestros labios,
hab?a perdido toda su seriedad y rigidez, y empezaba a desabrocharme
la camisa, mientras yo le quitaba la falda.
Nos fuimos desnudando, yo quede en calzoncillos, y ella hab?a quedado
simplemente con un tanga blanco, mientras nuestros besos elevaban la tension
y pasion entre ambos. Separe de m?, y observe sus pechos, eran
unos pechos no excesivamente grandes pero muy firmes para tener mas de cuarenta
a?os, sin estar operada, empec? a besarlos con pasion de
rodillas mientras ella me acariciaba la cabeza, y empezaba a jadear, la ten?a
para m? completamente entregada, despu?s de observarla durante
tres d?as.
Fui bajando, y me acerque a su tanga, no sigas, por favor, comentaba;
por supuesto no le hice caso y le quite el tanga y la puse de espaldas a m?,
quer?a ver su culo, era algo grande pero lo deseaba, empec? a
acariciarlo, y baje mi lengua hacia su ano no lo hagas, no lo ha hecho
nadie, dec?a, te va a gustar le comentaba yo.
Acerque mi lengua hacia su ano, y fui chupandolo, ella disfrutaba, y al tenerlo
h?medo le fui introduciendo un dedo mientras mi otra mano jugaba con
su co?ito; ella estaba totalmente excitada, y yo lo notaba. Me separe,
y fui a besarla, ella no reaccionaba espontoneamente, y ante ello hice
que se arrodillase ante m?, ella me miraba con cara de sorpresa, de inquietud,
y me baje mis calzoncillos dejando mi verga cerca de su cara.
Mi verga, no es abismal como en otros relatos, es de tama?o medio y le
fui acercondola hacia su cara. Se decidi? a cogerla con su mano,
y empez? a masturb?rmela, para despu?s meterla en su boca,
y empezar a chuparla, la verdad que era una experta, pero su seriedad le obligaba
a dar el primer paso.
La separe, y en ese momento dijo por favor, no tenemos tiempo, quiero
que me la metas, r?pido, la puse sobre la mesa, e introduje mi
polla, ella se abalanz? sobre m? y acabamos fuera de la mesa,
de pie, y ella cabalgaba con toda su fuerza, quiero irme, follame,
dec?a, agarraba sobre mi espalda ara?ondola, est?bamos
tan excitados que nos corrimos juntos enseguida.
Nos quedamos abrazados un momento, besondonos, y r?pidamente nos
vestimos para volver al cocktail.
Ahora quedan dos conferencias mas, que por supuesto no pienso perderme. Cualquier
comentario sobre el relato, y si alguna persona o mujer madura quiere hacer
algon comentario sobre alguna experiencia parecida o deseo que no haya