Abren la puerta de la celda entrando Yessenia Rodman Wright que representa penalmente a su defendido y cliente qué están enjuiciándolo por crímenes que se les imputan adicionalmente no tiene culpa que fue otro que lo suplanto como los cometió a nombre y documentación de él, que no se explica igualmente no se ha exclarecido que los perdió cuándo andaba en una discoteca divirtiéndose con una chica de la mala vida y por referencias de drogadicción de este. Lo saluda al estrecharle la mano cierran la puerta de la celda al dejarlos para que hablen, sincerándose Yessenia Rodman Wright que le pone y le deja su mano en su pinga erecta como dura también gigantesca además enorme igualmente parada, que se lo manosea divina y emocionadísima hasta consumadísima especialmente calientísima sobre todo deleitosisima asimismo deseadísima y por supuesto, coquetísima en que quiere algo más de defendido a abogada penalista y viceversa.

En qué la rodea con sus dos manos a sus caderas que se las pone al mismo tiempo la manosea continuamente de adelante hacia atrás desde las rodillas parejamente hasta alcanzarla y quedarse dominándola en sus glúteos al mirarlo sonriéndole e iluminada, en que se quita el saco al desabrocharse los puños de la blusa y junto a su brasier en que se los tiene apretándose como manoseándose efectivamente, jalándose firmemente las tetas por parte de la mismísima y apasionadísima como fascinadísima de Yessenia Rodman Wrigth a más no poder en persona como en vivo y a todo color; dejándose que se le meta en las entrepiernas al defendido que se la folla profunda como penetrante hasta gozado igualmente animado con todas las plenas libertades cómo fuerzas, ganas, ánimos, deseos, deleite, apetito, delicioso asimismo colosal como ardiente finalizo poderoso defendido en que suelta tremendamente unos sonoros y soberanos hasta triunfantes jadeos asimismo gemidos por parte de la boca de Yessenia Rodman Writgh que está aferrada como candado a los muslos del defendido en que le pide a gritos sonantes y continuos dame y sacate todos tus polvos y pajas me gustas y te quiero haré todo lo posible para que salgas de aquí volveremos apelar todo lo que sea necesario hasta verte libre y por fuera de está penitenciaria estatal me entiendes sonriéndole la mirárselo fijamente desde sus ojos iluminados y brillantes de ella hacia los ojos apagados del mismo defendido que le está haciendo el sexo en la cama de la misma celda donde se encuentra apresado y encarcelado su cliente como su defendido. Continuara.