Toda una glotona reverencialmente Yessenia en que tiene contra la lavadora en la lúgubre casa de su padrastro al follarlo locamente con todas las manos puestas del amante acariciándole como manoseándole hasta agarrándole con todas las fuerzas merecidas todos sus glúteos al estar gimiendo como jadeando exuberantemente de mucha pasión como sexo desbordante que la colma de muchas emociones como deleite hasta deseando en carne propia la verga de este que la pone caliente, sabrosa, arrecha y aventurada; en que le pasa diciéndole no pares coño para nada continua que estoy urgida y eleva me la llama del amor que estoy dándote y aprovecha que tenemos esta casa solitaria sin que nos interrumpan ni siquiera nos molesten ni tampoco nos descubran infraganti haciendo el sexo a traición como a espaldas ciegamente de mi queridísimo esposo que siempre esta esperándome en casa al confiar ciegamente en mi y que no amerita nada que me reproche ni me tire en cara que no lo quiero a la fecha de hoy. Apretándole y besándole con una mano al tener sujetada un seno al exclamar ay. trata me con delicadeza y dulzura quieres; se la coge pegada y doblada sobre el mostrador de la cocina lavandería que aguerrido y fuertemente gritando como fuera un perro al bombearle continuamente su pené erecto como gigantesco hasta duro como riquísimo al tenerla sudorosa como cautivante hasta glamorosamente atraída por el acto de sexo que protagonizan propiamente en el ambiente lúgubre de la casa de su padrastro. Al decirle estoy viniéndome de un momento a otro al decirle Yessenia que esperas mierda mandátelo ahora mismo que estoy buenísima por el polvo que estas inyectándome por los mil coños haz todo lo que quieras conmigo que estoy efervescente por tu cabrona necesidad y urgencia, hurgándola en su vagina desencadenando la reacción inminente como esperadísima por Yessenia de montárselo y cabalgárselo al ensuciarse completamente al revolcarse en el suelo sucio de la lúgubre casa abandonada del mismo padrastro de Yessenia hoy día por falta de liquidez en la deuda hipotecaría sobre esta.

Mamándole sus senos puntiagudos con sus tetas parecidos a unos botones al deleitarse con unas lamidas y mordiéndoselas superficiales con toda felicidad por el amante al tenerla sentada en sus piernas en el mero piso de la cocina lavandería ambos, mirándose y contemplándose como dos almas en quietud y sobrias al vibrar enormemente entregados al amor que se tienen a la fecha de hoy; parándose y caminando hacia el baño con toda la falda en la cintura se agacha para orinar afluentemente Yessenia al darle el papel higiénico el amante para que se limpie al mirarlo y decirle conserva el hilo dental que me sacas tés cuando estábamos entretenidos y concentrados en el sexo para que recuerdes y vivas mis olores de mi ano siempre lanzándole con una mano un beso de su boca que lo atrapa con un puño cerrado el mismo amante en la puerta del baño.