Muchas luces de sirenas encendidas que eran montones entorno a la acera de la casa de Yessenia; tras un hecho lamentable que la sucumbió como la perturbo también la dejo desolada sufriendo por la impresión causada de hallar el cuerpo de su esposo colgando en que las autoridades policiacas como forense determinaron que fue suicidio evidenciado por una carta escrita de su puño y letra, que identifico específica y directamente la llorosa como la embargada Yessenia que rompe en llanto y pega un grito fuerte de sufrimiento al ser consolada con el hombro y el abrazo de un policía en que le dice lo sentimos por el sufrimiento y las preguntas de rutina que hacemos siempre al ocurrir los mismos decesos de los familiares y cercanos a la misma victima. Llevándoselo dentro de una bolsa del forense rompiendo inmediata e instantánea como verdaderamente el llanto al arrodillarse en la alfombra con el rostro totalmente colorado con realistas lagrimas de sus ojos y las mismas chorreando por los cachetes bajando por el mentón y goteando al mojar un poco su falda azul oscura parte del atuendo de ejecutiva universitaria que viste, usa, modela y luce siendo asistente administrativa de la facultad de derecho y ciencias políticas; quedándose sola todavía desconsolada y con ciertas palpitaciones de asustada como nerviosa como manos temblorosas marca al numero del amante respondiendo la llamada con voz decaída y baja le pide ven a mi casa te necesito llega rápido como sea te estaré esperando.
Recibiéndolo desalineada como desarreglada al extenderle y abrirle sus brazos el amante al pegarse de inmediato Yessenia con la cara puesta en su hombro derecho que con la izquierda acaricia como frota hasta toca toda la espalda de este, al llevarla y sentándose en el sillón secándole con las yemas de sus dedos las lagrimas exhibidas en su rostro averiguando acertadamente por la platica que le hace Yessenia que es viuda porqué lo dices de esta forma donde esta mi amigo, yace en una bolsa de la morgue se suicido el muy pendejo también imbécil como idiota además impotente sabes que por una carta me entere que estaba desahuciado con poco tiempo de vida enfermedad terminal que lo estaba carcomiendo internamente y por eso toma la decisión de colgarse en nuestra recamara el muy cabrón mierdero un vil cobarde poco hombre y sin pantalones para enfrentar sus dificultades como situaciones y problemas. Escuchando todo de viva voz de Yessenia la abraza muy fuerte al besarla en la boca despertando los instintos y los sentimientos igualmente las necesidades de ser confortada, mimada, consentida, aliviada del peso que albergaba su corazón doliente hasta herido pero aflorando la pasión que no se hizo esperar para nada al quitarle el saco como desabrochándole la blusa y arrancándole completamente el brasier al mamarle eufóricamente las tetas de los senos puntiagudos y voluminosos muy parecidos sabrosamente a unos apetecibles y jugosos como fructíferos melones quién la adornan a mucha honra con todo el placer enardecido del amante que la tiene muy sujeta de las entrepiernas acariciándoselas adentrándose a lo largo de esta al tocarle las ingles como el hilo dental que le quita sin más dilación las pantimedias café Brasil al correrle la falda a la cintura acostándola en el mismo sillón para adentrarse con su pené gigantesco, duro, caliente, deleitoso, deseado, suculento, formidable, aventurado, exquisito y excitante para follarla a tal punto que la exprime al sacarle rítmicamente unos fuertes y apropiados gemidos y jadeos que se dejan escuchar a gritos sonoros por toda la casa. Aferrándose con toda la fuerza corporal como aguerridamente del bazo del sillón al llenarse de puros besos en toda la zona de los glúteos al lamerla y rozarle la punta de la lengua en todo el rabo de alegría a la vez, entrándole súbitamente a una cogida con las dos manos puestas propiamente en las zonas de los glúteos y muslos pasando automáticamente a hurgarle la vagina, dándole y aplicándole igualmente propinándole merecida y victoriosamente una invasión y dominación estratégica notoria al ponerse y comportarse desquiciada mente como un perro sediento de lujuria especial hambriento por la presa fresca en carne propia de la misma Yessenia.
Entonces, masturba con tal habilidad, agilidad, diestra, experta y prácticamente con su mano el largo del pené de su amante que dispara colosal y poderosamente varios tiros blancos y espesos en grandes cantidades industrializadas concentradas de mucha leche por todos lados de la sala, que se coloca con toda la boca abierta de par en par al lamerle la punta enorme e inflada de este saboreándolo muy apeteciblemente con la mano en su pecho y la otra agarrándole firmemente el miembro viril quedándose acostados juntos en aquél sillón mirando hacia el cielorraso alegres al olvidarse y dejar en el pasado la tragedia que ocurrió en la casa esa noche en que intervino la policía, la morgue y los mismos forense en una escena de suicidio en la persona del queridísimo esposo de Yessenia.