Bueno, esta es la continuación de SE BUSCA MODELO ACTRIZ PORNO. Aquí la negra no se pudo aguantar y cuando sintió que le metieron tremenda manguera de bombero empezó a mover la cintura y a tener orgasmos. Lean y gracias.
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La filmación iba muy bien. En muchas de las tomas aparecíamos como una pareja acariciándonos entre si y en otras teníamos que esperar nuestro turno acostados en una plataforma o tarima, muy sucia. En la última toma pusieron a Raquel dándome la espalda, con su culo frente a mi. Debido a su baja estatura, la parte de atrás de su cintura quedó presionada contra mi huevo; yo trataba de concentrarme y pensar en cualquier cosa para que no se me parara el huevo. Luego, una vez que la filmación terminó, Raquel pidió permiso para dirigirse al salón de descanso de las damas. Yo fui hasta donde estaba Ramón y le dije: ¿Cuándo vamos a filmar el sexo duro?
-La semana que viene, ¿Por qué?
-Te doy mi palabra, la próxima semana la tendré lista para ese sexo duro, ok?
Ramón sonrió: -¿Y cómo vas a hacer para convencerla?
-Déjamelo a mi. Nada mas llámame esta noche cuando tengas listas las escenas que vas a filmar para que yo pueda hablar con ella con anticipación y estar preparados.
Llevé a Raquel a un restaurante cercano a cenar e hice todo lo posible para convencerla para que filmara:
–Raquel, en cuanto a nuestra amistad, no te preocupes, siempre seremos amigos, aceptes o no.
-Ya te dije que no, Braulio , coño!! Por eso es que no quería hacerte la paja allá. Me daba temor pensar que lo tomaras como si hubiera algo entre nosotros.
-No, Raquel. No estoy pensando en eso. Es nuestra oportunidad para hacer dinero de verdad. Estoy ganando miles de dólares por cada toma, chama.
-Braulio, ya te lo dije. Mis amigos ya se enteraron de las películas que hemos hecho porque vieron el portafolio de la agencia y lo primero que preguntaron fue ¿Quién coño es ese tipo blanco y flaco? Créeme, no quiero esa clase de melodramas ni nada de eso, ni problemas con ellos, ¿entiendes? Ni que me estén haciendo reclamos.
-Pero no tienen por qué enterarse.
-Braulio, la respuesta es NO. No hablemos mas del caso.
Durante dos días antes de sexo duro, Raquel y yo hicimos algunas tomas de desnudos. Créanme: nos tomó mucho esfuerzo y tiempo para convencerla y las hiciera. Ricardo hasta la amenazó con despedirla inmediatamente si no se dejaba filmar. Yo también tenía un problema: en las tomas en las cuales alguna parte de Raquel tocaba mi huevo, este se me paraba como piedra y no lo podía evitar. Pero, ¿tiene algo de malo? Me pregunto. Es normal en cualquier hombre, ¿no?
En cierta toma, Raquel hacía el papel de esclava que complacía a su amo. Yo había hecho esas poses antes en donde ella agarra mi huevo con la mano y lo toca con la boca y cuando lo tenía bien duro como riel de ferrocarril, ella lo restregaba y le hacía la paja hasta el fin, que era en donde nos ganábamos el dinero con esa toma, la parte fuerte, o sea, cuando la lecha salía disparada y le caía en el culo y en la cara. La verdad es que en algunas de las poses parecía que estábamos teniendo sexo.
El viernes en la noche era el filme de sexo duro pero a Raquel sólo se le había informado que era una toma desnuda. Entonces Ramón y yo tuvimos un plan: Yo no quería engañarla y preferí tratar de convencerla antes de filmar. Pensé que esto no afectaría nuestra amistad así que cuando Ramón nos explicó todo sobre escena que debíamos hacer, ya yo tenía todo listo con muchacha. Yo tenía que hacer el papel de un soldado Neo-Nazi y Raquel era una espía norteamericana que capturé. Ella tenía que callada en el escenario, y abrir bien las piernas colocando los brazos sobre la cabeza. Ya me había dicho que quería esa toma bien rápido porque no le gustaba.
Ramón estaba haciendo unas tomas muy buenas con ella y yo, simulando que la estaba torturando e intentando hacerla confesar. Casi siempre aparecíamos desnudos. Su ropa estaba colocada cerca de ella lo que hacía parecer que se la habían quitado violentamente, a la fuerza, dejándola desnuda. Luego yo me quitaba la ropa y la amenazaba con montarme arriba de ella. La verdad es que hizo un buen trabajo tratando de soltarse. Yo tenía que agarrarle los senos, apretárselos y morderle un pezón. Pero me quedé sorprendido cuando vi que se le estaban poniendo duros. No pude evitar pensar si esta chica se estaba excitando. Luego me paré entre sus piernas abiertas y coloqué mi semi-parado huevo sobre su cuca, ambos con la cuca y el huevo bien afeitados para este acto.
Comencé a restregarle la cabeza del huevo a lo largo de la raja de aquella cuchara hasta que sentí que se le estaba poniendo húmeda y mojada. Sus caderas reaccionaban muy bien al estímulo pero pensé que ella en realidad solo estaba actuando o posando para la cámara, pero fue así: levantaba las caderas constantemente, como si tratara de escapar. Luego sin ningún aviso, le metí todo el huevo parado dentro de la cuca. Pude ver como se le abrieron los ojos de la sorpresa. Como la estaban filmando no podía gritar ni quejarse. Dios mio, Raquel estaba tirando bien duro. No podía entender por qué se aguantó tanto y tuve que rogarle para que me la cogiera bien, como lo estaba haciendo en este momento. Pero solamente me había dejado meterle las nueve pulgadas de mi blanco huevo, dentro de aquella sexy cuca negra desesperada para que se la cogieran.
Luego me di cuenta que yo ya no era la misma persona, algo se apoderó de mi. La amistad con Raquel ya no era tal: sólo deseo sexual. Me puse mas y mas caliente mientras mas se lo metía y la pistoneaba, bombeándole esa negra cuca deseosa de palo, tan apretada, tierna y rica.
Pasaron como seis minutos cuando su cuerpo ya no opuso mas resistencia. Sus caderas comenzaron a girar en círculos sobre mi huevo y sus gritos comenzaron a transformarse en murmullos, susurros y quejidos. Sus ojos estaban cerrados y de vez en cuando yo veía cuando los abría parcialmente y se le veía solo la parte blanca de estos. Mientras todo esto ocurría, pude oír a Ramón haciendo las tomas de manera seguida y continua, sin parar, un poco alejado con su cámara. Intentó tomar los ojos de ella, los cuales, y sus caderas moviéndose hacia delante y hacia atrás. Cuando hablamos después me dijo que estaba seguro de que la filmó bien cuando estaba teniendo un tremendo orgasmo.
-Hijeputa!! Esta semana nos ha salido algo bueno, -gritó Ramón cada vez que hacía una toma que le gustaba. Esta vez no me preocupaba por ningún dinero, ni lo que iba a ganar, porque estaba concentrado en dispararle mi carga de semen dentro de la cuca caliente de Raquel y darle todos los orgasmos que ella bien merecía. Pero esto no iba a ocurrir ese día porque tenía que darle a Ramón la toma del “billete”, en donde se hacían las mejores tomas.
Cuando Raquel se tranquilizó completamente y dejó de protestar, extendí la mano para quitarle el micrófono o supresor de ruidos:
-¿Qué coño de la madre estás haciendo hipo de puta???!! -me dijo, todavía sorprendida y confundida, mareada por los dos orgasmos que tuvo.
-Discúlpame Raquel. Si me vas a odiar y a retirar la amistad por el resto de tu vida, por lo menos déjame ganarme hoy mi premio!!
-Entonces, ¿Ya vendiste, sacrificaste nuestra amistad, por dinero?
Justo en ese momento, la rabia que agarró Raquel hizo que el músculo de la cuchara se le apretara y entonces se me salió. Comencé a meterle ese huevo bien duro y rápido y mas hondo y este desaparecía dentro de su negra y apretada cuchara.
-Si, cógeme, cógeme!! Así, así, aaayyyy, mierda, estoy acabando!!
Sentí cuando mi semen hervía dentro de mis bolas y no pude contenerme mas:
-¡¡¡Aaaaayyyyy, no joda, Raquel!!!
Rápidamente le saqué el huevo justo a tiempo para que dispararle la tremenda carga de leche que le cayó sobre el estómago y parte del semen en el cuello cuando echó la cabeza hacia atrás al tener el último orgasmo.
Cantidades y mas cantidades de semen seguían saliendo disparadas de mi huevo hasta que le comenzó a rodar por una lado a aquella negrita. Yo estaba casi muerto del cansancio después de esa última eyaculación. Pero sabía que Raquel si me iba a mandar a lavarme ese culo, por lo enojada que estaba. De hecho, estaba seguro de que me iba a cachetear después que Ramón y Ricardo salieran de la tarima. Ramón nos felicitó por nuestro trabajo y nos dijo que siempre nos tendría trabajo para escenas con sexo duro, siempre y cuando le permitiéramos hacer tomas como estas que acabábamos de tener.
-Si, está bien, -le dije.
Busqué una toalla en el estudio y comencé a secar y limpiar a Raquel después que la bajé de la tarima. Ella me recibió la toalla con rabia:
-No necesito que me ayudes. Yo misma puedo encontrar una toalla. Ya me hiciste demasiadas cosas, ¿no te parece?
-Te pido disculpas, Raquel.
-Cóño, no joda, Braulio. ¿Te gustó? Te luciste metiéndoselo.
No contesté nada.
-¿No te gusto?
-Si, claro que si.
-Seguro que tu palo gozó mucho. Gozaste una bola y parte de la otra. Todos los días no se encuentra uno con cucas como esa. Creo que mas nunca vas a encontrar una igual. Me parece que querías probar la de una negra, ¿verdad? Ahora vamos a arreglar esta vaina con el dinero extra y sobre tiempo que te pagaremos.
Le expliqué a ella lo que habíamos hablado cuando cenamos una semana antes y se calmó. Ya no estaba molesta.
-¿Así que dices que podemos hacer ese tipo de cosas por dinero en cada toma?
-Si, eso mismo.
-Bueno, creo como ya lo dijiste: sigamos tirando en honor a nuestra amistad; también podríamos tirar para brindar por nuestros otros amigos, y que vean los videos también. Si no quieren verme culeando con u blanco, entonces, que me besen el culo y vayan al carajo!!
Raquel extendió la mano para colocarla alrededor de mi flácido y blando pene: -Uuuummmm, ¿no podrá echar uno o dos polvitos mas?!!
Me quedé sorprendido: -Bueno, creo que en uno o dos minutos mas, -contesté.
-Al carajo con eso! Ya terminó su descanso, -dijo ella.
Luego le dijo a Ramón que le pusiera a la cámara toda la película que tuviera porque íbamos a seguir filmando, hasta las ocho de la noche, por lo menos una hora mas. Luego ella se arrodilló frente a mi y comenzó a lamerme el huevo y las bolas hasta que el huevo comenzó a reaccionar. Me mamó el huevo hasta que se puso mas duro y parado como nunca.
Después Raquel y yo tiramos en todas las posiciones posibles que se nos ocurrió. Cada vez que debíamos hacer una toma de “billete”, de las buenas, ella me lo mamaba y me hacía la paja para que el machete se me volviera a parar. Y fue la mujer que cumplió todo lo que dijo: tiramos y cogimos, culeamos durante una hora y Ramón hizo todas las tomas sin perderse nada. Pero en el momento cuando iba a filmar mi último disparo de semen, Raquel parece que estaba pensando en otra cosa, otros planes: Se montó sobre mi y cuando le dije que estaba a punto de acabar, mi miró con deseo y lujuria en sus ojos y dijo:
-No te preocupes, acaba si quieres. Esta toma que nos da billete es para mi. Ese dinero es mío. Tal vez podemos hacer un bebé en esta toma, se llamará Braulio junior.
Después extendió la mano por detrás de ella y me restregó las bolas como si fuera una lámpara de Aladino. El disparo de semen que lanzó mi huevo parecía como de un galón de leche que le cayó dentro de la apretada cuca y ella se chupó hasta la última gota otra vez. Cuando terminamos, ambos estábamos tan cansados que casi no podíamos movernos. Ramón simplemente nos dijo que cerramos la puerta con llave cuando termináramos desvestirnos porque sabía que ya no nos quedaban fuerzas, sólo nos acostaríamos y…a dormir.
Yo no podía creer lo que la caliente Raquel había hecho ese día. Sentí como si yo la había hecho transformarse en un monstruo tirando, un máquina que tiraba como loca, caliente, cachonda. Lo digo porque cuando se despertó después de dormir dos horas, quería seguir tirando una vez mas antes de irse.
-Oye, Ramón ya se fue. ¿Y quién nos va a tomar las fotos?, -le pregunté.
-¿Quién dijo que era necesario filmar esto, papi? ¿Siempre tienes que tomarte fotos cuando haces el amor?, -me preguntó haciendo que el huevo recobrara vida entre sus blandas manos.
-¿Estás hablando en serio? ¿Es que quieres tener un bebé, un Braulio hijo?, le pregunté.
-Coño, claro que no, sólo quiero sentir tu huevo acabando dentro de mi. Todavía no quiero tener hijos, quiero disfrutar de la vida primero. Además , estoy filmando películas, -dijo la hembrota.
Esta vez quería que me la cogiera estilo perrito y en diez minutos, ya le estaba disparando otra carga de esperma dentro de la apretada cuca de Raquel, caliente cuchara insaciable.
Para sorpresa mia, nos transformamos sin querer en un producto comercial: los films de sexo duro se estaban vendiendo como pan caliente, y aparecimos en un show de entrevistas, y hasta se hablaba sobre el calendario que teníamos y los días que íbamos a filmar.
En cuanto al dinero, Raquel ganó lo suficiente para pagarse los semestres de la universidad, comprar su propio carro y hasta un apartamento. Pero lo mas importante, siempre me llama para que valla a su apartamento y hagamos algunas tomas por nuestra cuenta, y trabajamos también en forma independiente. Creo que podría decir con orgullo que esto nos llevó a ser mejores amigos y mejores compañeros de trabajo.
¡COÑO, ME GUSTA MI TRABAJO!! SE COGE MUCHO.
FIN
Traducido por Marcos Urbina
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CUENTO ORIGINAL EN INGLÉS:
The shoot went well. Many of the shots pertrayed us as a loving couple caressing each other and others had us lying apart on a make shift sandy platform. Our final shot had Rochell with her back against me. Because of her short height, the back of her waist was pressed against my cock and I tried hard to concentrate on anything that I can to avoid getting another hard on. Then once the shoot was over, Rochell excused herself to the Ladies Room. I walked over to Rick and said, "When's that hardcord shoot supposed to be?"
"Next week, why?"
"Mark my word, next week she'll be ready for that Hardcore Shoot. Okay?"
Rick smiled, "How are you going to convince her?"
"Let me handle that. Just call me tonight with the scenery plans so I'll know how to handle it."
I took Rochell to a nearby restaurant for dinner and tried my best to convince her of the shoot. "As far as our friendship is concerned, Rochell, we'll always be friends."
"Fuck no, Brad. That's why I sort of didn't want to jerk you off back there. I was afraid that you would think that it's something between us now."
"No, Ro. That's not what I'm talking about. It's our chance to make some serious money. I'm talking thousands per shoot, Girl."
"Brad, I told you. My friends have seen the pictures that I've done. They saw the agency portfolio and the first thing my friends asked me was, who the hell is that skinny white boy? Trust me, I don't need that drama from them."
"So they don't have to know.
"Brad, the answer's NO. So let's drop it."
For a couple of days before that hardcore shot, Rochell and I had done some softcore shots. And believe me, that took a hell of a lot of talking just to convince her to do that. Richard even treatened to fire her on the spot had she not done them. My problem was the same though. On the shots where any part of Rochell's body touched my cock, it would get hard as a Rock. But what the hell, that's natural with any man, right? In one shot, Rochell played a slave girl who serviced her master. I've done poses where my cock was in her hand or touching her mouth. But by the time it was rock hard, Rochell would began stroking it for the final "money shot", that is when the cum would shoot out on her back or her face. Some of the poses actually looked like we had had real sex, in fact.
Friday evening was to be the Hardcore Shoot but Rochell only knew it to be another Softcore shoot. So Rick and I had everything planned. Part of me hated to trick Rochell but I had a feeling that I could convince her eventually. I was hoping that it wouldn't affect our friendship. So Rick explained the scene to us both but I already knew what to do. I played a Neo-Nazi Soldier and Rochell was my captured U.S. Spy. She was bound and gagged on this platform that held her legs apart and her arms out over her head. She had told me earlier that she wanted to get that shoot over with fast because she don't like to be gagged. Rick was taking some great shots of us as it appeared as if I was torturing her and trying to make her talk. Basically, we were both naked. Her clothes were hanging up near by so that it appeared that she was brutally stripped of her clothes. Then I stripped off my clothes and threatened to force myself upon her. She did a great job of trying to break free. I would squeeze her breasts and bite her nipple. And to my surprise, her nipples were getting hard. I couldn't help but wonder if that was getting her excited. Then I stood between her opened legs and sat my semi-erected cock on her pussy, which Rochell had neatly trimmed for this assignment. I begin rubbing my cockhead along Rochell's slit and I could feel her getting wet. Her hips reacted to it well but I think she was still acting for the camera. She was constantly lifting her hips, as if to be trying to escape. Then without any warning, I slid my fully erect cock into her pussy. I could see her eyes open wide with shock. The gag prevented her from screaming or protesting. My God, Rochell was so fucking tight. I couldn't understand why she would want to hold out for so long before allowing me to fuck the life out of her as I was doing just now. With every push, I could feel another inch of my cock sliding into her tight pussy. And within minutes, I could feel her pussy getting wetter, which allowed me better access of fitting more of my cock into her. Rochell was screaming through her gag for about 5 minutes and she was throwing her hips up trying to push me out of her. But it only allowed me to ram all 9 inches of white cock in that sexy black pussy that was in dire need of some fucking. Then I realized that I was a different person. My friendship for Rochell turned more into lust. I got hotter and hotter the more I pistoned my cock in and out of that tight, young pussy of hers.
After about 6 minutes of her bodily protest, she stopped. Her hips began Gyrating on my cock and her screams began turning into hums and moans behind that gag. Her eyes had closed and occassionally, I would see them open partially with only the whites showing. While all of this was happening, I could hear Rick constantly shooting away with his camera. He managed to catch her eyes fluttering, her hips rocking back and forth, and later he told me that he was sure that he snapped her as she was having a massive orgasm during the shoot.
"Mother fuck, we're all going to have a great check this week.", Rick shouted in between a snapshot.
I wasn't worrying about money at this time, All I worried about was shooting my load in Rochell's hot pussy and giving her all of the orgasms that she deserves. But that wasn't going to happen that day because I had to give Rick his "money shot". When Rochell had calmed down completely from protesting, I reached over and removed her gag.
"What the fuck do you think you're doing, Mother Fucker?", she asked me, still dazed from already having 2 orgasms.
"Sorry Rochell, if you hate me for the rest of our lives at least today we'll get a big bonus."
"So you sold our fucking friendship for money?"
Just then, Rochell's anger caused her groin muscle to tighten up and I lost it then. I began ramming my cock in faster and deeper until it disappeared in her tight, black pussy. and Rochell lost it too.
"Yeah, Fuck me. Fuck me. Oh Shit, Oh Shit. I'm cumming."
I could feel my cum boiling up in my balls and I could hold it no more.
"OOOHHH Fuck Rochell."
I quickly pulled my cock out just in time to shoot a large load of cum all on Rochell's belly and some even hit her neck as she threw her head back for her final orgasm. Loads and loads of cum kept shooting out of my cock until it began rolling onto her side. I was near exhausted after that one shoot. But I knew that I was about to get a serious ass chewing from Rochell. In fact, I was sure she was going to slap me once Rick and I took her off of the platform. Rick complimented our work and told us that we will always have a job with Hardcore Modeling as long as we can give him shots like that.
"Yeah, right", I told him.
I found a towel on the set and began wiping Rochell off after I unhooked her from the platform. She grabbed the towel from me with anger, "I don't need you to do that. I can get it myself. You did enough, don't you think?"
"I'm sorry Rochell."
"Fuck you, Brad. Was it good for you?"
I didn't say anything.
"Well, was it?"
"Yeah, it was."
"You bet your ass it was. You may never get any kind of pussy like that again in your life. I guess you just wanted to experiment with some black pussy, huh? Now what's this shit about extra money?"
I explained to her what I had told her during dinner the previous week and she was not too upset anymore.
"So you're saying that we can make that kind of money for every shoot?"
"Yeah, just about."
"Well, I guess since you can say fuck it to our friendship just now, I might as well say fuck it to my other friends. If they don't like me fucking a white boy, they can kiss my ass." Rochell reached down and placed her hand around my limped dick, "Umm, do you think he can go another round or two?"
I was shocked. "In another minute or two, I guess.", I replied.
"Fuck that. His break is over.", she said. Then she told Rick to get all of the film that he can spare because we were doing more shoots that evening for at least another hour. Then she knelt in front of me and started licking my cock and balls until they responded again. She sucked me until I was harder than I've ever been.
Then Rochell and I fucked in every position that we can think of. Everytime we would complete the money shot, she would suck or stroke my cock to bring it back to life. And she was a woman of her words, we fucked for an entire hour and Rick shot all of it. But just as I was about to shoot my last load, she had other plans. She was on top and when I told her that I was about to cum. She looked at me with lust in her eyes and said, " So, I don't care. This money shot is mine now. Let's see if we can make a Brad, Jr. on this shoot." Then she reached behind her and rubbed my balls like it was an aladdin lamp. I shot what felt like a gallon of cum into her tight pussy and her pussy sucked every drop out of me again. By the time we were done, we were both too exhausted to move. Rick simply told us to lock up when we were done because the only energy we had left was enough to roll over and fall asleep.
I couldn't believe how horny Rochell was that day. I felt as if I had created a monster. A horny little fuck monster, in fact. Because when we woke up after a 2 hour sleep, she wanted us to fuck one more time before leaving.
"But Rick is gone now. Who's going to take the pictures?", I asked her.
"Who said that it has to be shot, Baby? Do you always photograph yourself having sex?", She asked me as she brought my cock back to life in her soft hands.
"Are you serious about wanting a Brad, Jr.?", I asked.
"Hell no, I just wanted to feel you cumming in me. I got too much to do with my life before having any kids. Besides, I'm on the shot.", she explained.
This time she wanted it Doggy Style and in 10 minutes, I was shooting another load of sperm lava into Rochell's tight, horny pussy.
Surprisingly, Rochell and I became a hot commodity in the business. The hardcore pictorials were selling like hot cakes, we appeared on a popular radio talk show, and there were even talks about us doing a calendar shoot. As for the money, Rochell made enough money to pay for college and get her own apartment and car. But more importantly, Rochell often calls me to come over to her apartment for some private shoots of our own. I guess you can say that we're still good friends and even better coworkers.
DAMN I LOVE MY JOB!!!