Siendo interrogada por espías rusos despiadados y desalmados también considerados rudos con las espías mujeres enemigas pero Blanc demuestra un temple y tranquila que nadie la va a doblegar igualmente se deja convencer por todas formas que se doblegue al rendirse y suelte cuál es su misión encubierta y que está buscando en territorio soviético, llevando un vestido de cuero moldeado como modelador que se perfila a su figura anatómica femenina con ligueros y botas negras al abrir las entrepiernas mostrando su excitante y coqueta y enardecida vagina en que los espía rusos se la mirar al tirarse de rodilla a sus pies con la cara metida a perpetuidad al besársela, lamérsela, mamársela, comérsela y hipnotizarse por su arma poderosa que domina como corderitos y mininos a los espías rusos. Al acostarla en la mesa para entrarle a follarla aguerridamente con sus entrepiernas haciéndole candado entrelazándolos fuertemente para que se venga al provocarle por tanta adrenalina un ataque cardiaco; los otros no se dan cuenta al cogerla con tal potencia y fuerza que se vienen al infartarse seguidamente le maman sus senos al no aguantar le dan un derrame cerebral quedando tendidos en la escena del interrogatorio, se viste y se arregla al salir bajo la custodia de otro espía ruso que la lleva a otro lugar para continuar férreamente las investigaciones y el interrogatorio para sacarle la verdad y conocer los movimientos del servicio secreto norteamericano a la fecha, al dispararle en la cabeza después de tener sexo con el último espía ruso siendo una mujer letal y asesina entrenada que goza el sexo con el enemigo.