Disfrutando del inmenso como incandescente igualmente caluroso domingo en una playa yo y mi queridísima asistente administrativa de la sala de profesores que está sexy como radiante hasta deliciosa con un mini bikini rojo pasión y amor, que es entero que solamente tiene poquito material para cubrir unido el mismo sostén de la mitad de sus senos agarrado que da la vuelta por la nuca en tiras hacia un panti que solo tapa la vagina al dejar descubierto la ingle y taparrabo solamente la rajita y ano al mostrar en pleno espectáculo panorámico los hermosísimos como deliciosos también exquisitos como sabrosos especialmente deseados igualmente sexy como zaceados finalmente riquísimas nalguitas blancas de mi queridísima asistente administrativa de la sala de profesores en vivo y a todo color ante mis ojazos de admirador personal que se arrodilla al andar babeando por ella al son del día de hoy solitos sin que nadie interrumpa, ni molesten a nuestro alrededor, ni este vigilando continuamente como es la mera costumbre en la misma universidad donde nos conocimos y laboramos hoy día.
Corriendo como unos quinceañeros y porque no colegiales yo detrás de ella sonriendo como loquita hasta muy emocionada por el día que estamos viviendo en la playa al mojarnos nuestros pies con el agua salada de la misma playa a lo largo y ancho de la arena morena pegándonos el viento contra nosotros abiertamente, la alcanzo al levantarla dando vueltas sin parar como fuéramos yo un carrusel con caballitos y ella montado en uno de ellos gritando de la suma alegría y divirtiéndose a manos llenas en vivo y a todo color conmigo, de ahí, nos metemos y zabuimos en la fría como rica agua salada de la playa encontrándonos con varias olas que sabemos vitorear como librarlas que pegan contra nosotros como pareciéramos unos rompeolas sólidos como firmes y macizos en su trayectoria que pega durísimo contra lo que sea.
Como nos besamos hasta nos apresamos pegados a nuestros cuerpos en que me la follo ampliamente con todo y trajes de baño jadeando como gimiendo con suma libertad con un frenesí de la madre nos volvemos al agua para nadar como relajarnos, salimos de la playa al retornar a la cabaña hay nos duchamos y quitamos toda la arena que llevamos encima luego de pasar toda la mañana entera en la playa secándonos yo debajo del abanico acostado espero a mi queridísima asistente administrativa de la sala de profesores que sale del vestidor con su falda azul oscura y botas negras italianas de tacón bajo puestas recogida su cabello con una camiseta sin mangas amarrada en los meros senos meneándome todo su culito dobladita en ángulo de cuarenta o cincuenta grados al ponerse ambas manos en sus nalguitas que se las aprieta con toda su fuerza al levantárselas y abrírselas con todo y falda abajo cubriéndola volteada de cara haciendo como que le duele lo que está infringiéndose en vivo y a todo color como coreografía corporal bailable para mí, de ahí corre al tirarse a la cama hamaqueándola parejamente por poco nos tumbamos y nos caemos al piso ahí si nos hubiéramos golpeado durísimo hasta dejarnos moretones en nuestras nalgas como muslos también piernas como brazos en fin, besándola como manoseándola atrevidamente con ambas manos alrededor de sus muslos, nalguitas, piernas, senos, espalda y estomago al correrle la falda a la cintura anda en pelota al arrancarme la toalla de una buena vez entrándole majestuosamente a una profunda como deliciosa follada en que me besa mi cuello y mejillas con sus ojos cerrados atraída por la erección descomunal y gigantesca que protagoniza junto con mi pinga dentro de su vagina moviéndome continuamente jadeando como gimiendo con suma locura al tener sus entrepiernas rodeándome y apretándome mis caderas para así no escapar ni salir disparada ya que estamos salvajes al mover propiamente la misma cama haciendo está verraca bulla contra las patas y el mero suelo de la recamara donde nos encontramos haciendo el eufórico sexo al zacearnos nuestros apetitos amorosos como apasionados entre sí fusionados como una sola alma gemela por siempre.
Tomándola por los muslos la voltea al tenerla de rodilla erguida pegada a mí al bombearle como chocándole en forma de acorazado mi vientre contra sus nalguitas duramente invadiéndola estratégicamente por la mera retaguardia apoyándome firmemente con las palmas de mis manos en su parte dura y maciza del final de la espalda y comienzo de sus nalguitas para mayor seguridad como firmeza aplicándole también la técnica del yunque en que yo soy el martillo y ella el metal caliente al moldearla con cada golpe de martillo o sea chocándola con suma fuerza y rabia mi vientre contra su nalguita doliéndole pero aguantándose como toda una soberana y reverencial putita rica y sabrosa que frecuente en un prostíbulo donde solamente trabajan chicas netamente colombianas que me hacen realidad también mis fantasías de ejecutiva universitaria cuando ella no puede estar conmigo ni juntarnos.
Finalmente encima de ella agotadísima pero satisfecha quedo mamándole como tomando mi lechita de sus tetas, pezones y senos que me los acaricio también manoseo además los jalo suavecito a todos lados al mostrar una flexibilidad nunca imaginada por mí de mi queridísima asistente administrativa de la sala de profesores como acostarme en su regazo o vientre acariciándome mis cabellos acostados semi empelotados con sus botas negras puestas recibiendo el aire del mismo abanico de techo encendido igualmente la ráfaga de brisa que sopla por el litoral pacífico que se haced presente a través de las ventana abiertas de par en par por todos lados de la misma cabaña colindando con la playa a donde llegamos aquella mañana de domingo de verano los dos solitos y juntitos…………………………………………………………………….