Aún me quedan muchas sonrisas por dar...
Aún me quedan muchas palabras por decir, no sé el número, ni cuales, solo sé que son muchas...
Aún me quedan muchos sueños por soñar, los desconozco, aún mi subconsciente no me los ha revelado, pero sé que son muchos...
Aún me quedan muchos abrazos, piel con piel, no alcanzo a contabilizarlos pero sé que son numerosos...
Aún me quedan muchas pequeñas alegrías y grandes tristezas que superar con más diminutas alegrías, aún me quedan muchos vaivenes... o tal vez solo uno para cada cosa antes de morir...
Aún me queda que me digan muchas más veces que me quieren y una sola, una exclusiva para que me quieran bien, aún no la he tenido.
Aún teniendo lo mejor en mi vida... ahora sé que la vida me está diciendo: extrae sonrisas del llanto propio... no te engañes, a nadie le importas, no hay llanto ajeno... solo burla... olvida a quien solo te regala desprecio con su silencio (solo a ti puede regalarte algo tan cruel) y desea lo mejor a quien necesita continuar hiriendote para que no olvides... (solo la envidia es el motivo de su rabia) y con el alma en pie recuerda... aún queda de llegar a tu vida lo extraordinario, lo que solo alguien diferente podrá darte... y ese listón está tan alto... tan alto, que de un simple salto por diversión, que con cuatro caratoñas, que con cinco palabras bien puestas, que con mil vulgares mentiras o engaños... no se atraviesa.
Aún me queda...