Buenísima, sobre todo fabulosísima, por supuesto entre ustedes y yo, provocadísima igualmente olvidadísima ocasión para mí al caerme, llegarme, visitarme, etcétera; a la sabrosísima por excelencia sexual respectivamente, hago referencia nada menos a mí querida chica colombiana Andrea y solo a mí querida chica colombiana Andrea.

Cómo siempre saco y suelto harto dinero para entrar, estar, meter, quedar, pasar, zacearme, etcétera con la hermosísima Andrea. Ya desnudos ambos, velozmente me la visto desde los pies hasta la cabeza, entramos al baño a orinar además lavarnos todito y todito, me mama Andrea. Al ponerse me cañón también duró, además firme especialmente parado, sobre todo por supuesto tirante mí amiguito. 

Noto a Andrea algo diferente desanimada, desganada, debilitada, descargada, fatigada, etcétera conmigo; me habla: Andrea no he dormido ni tampoco he pegado ojo para nada, desde ayer por la noche; exactamente ha eso de las nueve.

Qué tuve un cliente qué pagó más de cinco horas conmigo, y en la madruga se quedó conversando imaginate còmo me dejó, desbaratadísima finalmente desequilibradísima sin fuerzas también mentalmente. Escuchada de viva voz a Andrea, la follo encarnizada ente todo lo qué sé me pega la gana media dormida y despierta la hamaqueo bastante gozo y fascinó obvió tiro bastante moviéndonos a la par de la cama afirmando e mucho más mi follada, le tomo de ambas rodillas las levanto y dobló para aferrarme y sujetar e detrás, sigo follando la aguerrida ente a Andrea qué está en un estado corporal y físicamente desecha y vulnerable la presionó otra vez hamaqueandonos de atrás hacia delante una tras otras varias veces. Andrea no se inmuta a verme ni tampoco acariciarme estuviera moribunda hasta deshauciada sin energía para nada para luchar; empeñan dome y encaramandome al mero estómago de Andrea se la penetro mayor y profundamente la follo tras follo a reventar me todo siento como desgarra mi hueco de mi pinga sangrando estoy hecho una fiera de bestia a más no poder mi poderío sexual con Andrea que no cesó ni me detengo hasta llegar al final de mis cinco horas en la cama al venirme, me masturba media despierta le tiro hartos polvo ensucio su sabana, almohada y cama voy a orinar y lavarme al vestirme dejo tirada durmiendo a Andrea vestida y toda con sus botas italianas negras abro y al mismo tiempo tranco la puerta al salirme al salón del prostibulo le digo al encargado amigo, qué por petición de Andrea está durmiendo plácidamente hasta las seis de la tarde anda acatarrada en fin creyendo e el mismo encargado amigo me marchó a mí casa satisfecho y portentoso en fin entre ustedes y yo con mí chica colombiana Andrea cómo siempre.