Ocurrio ya hace muchos años, pero me acuerdo como si fuera ayer. Me dieron permiso de la "mili", ahora ya no s ehacen esas cosas. La cuestion es que volvi a casa despues de casi tres meses fuera.
Mi hermana Marisol entonces tenia doce años, preciosa, rubia, con su cuerpo alargado como un tallo de primavera, su cabello rubio ondulado le caia sobre sus hombre finos y blancos, era preciosa.
Ya se dibujaba bajo su blusa sus dos flores abultadas, y sus piernas alargadas y esbeltas anunciaban una adolescencia imparable, yo desconocia si ya era mujer o no, me lo preguntaba mientras estando en la mesa con toda la familia cenabamos y reiamos con nuestros padres, orgullosos de que su hijo ya hubiera jurado bandera.
Acabada la cena me sentia canado, el largo viaje de vuelta a casa habia sido duro y largo.
Me despedi de todos y me meti en la cama, desnudo salvo con mis calzoncillo como me gusta dormir.
Agarre un libro que tenia por alli y de pronto todo me parecia extraño, mi habitacion con mis cosas me era ajena y a la vez distante, me enfrasque en la lectura del libro cuando los ojos se me cerraron, solo un leve susurro me desperto de un sueño dulce.
"Yo estaba trepando a un arbol y alli arriba mi hermana me esperaba alargandome la mano, sus dedos largos y delicados me ofrecian la mano, yo estaba a punto de caer hacia atras cuando ella me cogia de la mano y me subia como si la gravedad no existiera en ese mundo de los sueños, me subia hasta arriba quedando los dos de cara, su cara de niña me miraba y sonreia con esos labios sensuales de un rojo prohibido, sus ojos verdes enormes me hablaban me decia que me querian a su lado".
Me despete del dulce sueño para caer en otro mas dulce y esta vez real. Mi hermana estaba alli mirandome. Tenia un pijama de color azul con un dibujo divertido en el pecho y un pantaloncito corto que dejaba ver sus piernas largas y suaves aunque nunca las habia tocado.
Me miraba de forma diferente en su mirada habia amor de hermana, amor puro.
-TE HE DESPERTADO?
-NO IMPORTA, VEN AQUI, A MI LADO.
-COMO TE HE ECHADO DE MENOS.
Marisol se puso a horcadilas sobre mi cuerpo, su tacto por encima de la sabana era intenso podia notar el calor de su cuerpo en el mio.
Ella me miraba como en mi sueño, sus ojos verdes preciosos me perforaban la mirada, su pelo rubio ondulado caia por sus hombros, su cuerpo esbelto entre niña y mujer me mareaba, yo llevaba tres mese encerrado como un animal en un cuartel con mil tios mas, note como una sacudia en mi columna se deslizaba hacia abajo y encendia mi verga dormida.
-VAMOS MARY, ESTOY CANSADO.
Palabras solo palabras que salieron de mi boca sin pasion y sin firmeza, deseaba que se quedara alli y que balancease su cuerpo de niña encima de mi, buscando nose que, pero deseaba que no se fuera.
-YA NO TE GUSTA JUGAR AL CABALLITO??
Era cierto, jugabamos muchas veces cuando ella era algo mas pequeña, ella se ponia como estaba ahora encima de mi y se balanceaba con un baile que ella solo entendia yo lo unico que tenia que hacer era agarralala por la cintura y tararear una estupida cancion infantil. Ahora mientras mi hermana estaba alli encima de mi cuerpo con sus piernas abiernas encima de las sabanas supe que aquellos juegos eran medio eroticos yq eu mi hermana con nueve y diez años sentia una sensacion agradable cuando jugabamos.
-DE ESO HACE MUCHO MARI, ADEMAS YA SOLOS MAYORES ¿NO CREES?.
Ese era el problema y no otro, a mis 19 años sentia mi verga como se hinchaba y luche con todas mis fuerzas pero fue inutil, ella sentiria mi verga dura rozandole su cuerpo y entonces yo me sentiria como una mierda, pero dios era tan bonita, tan inocente tan hermosa.
Mari se inclino en mi pecho y me abrazo.
-TE HE HECHADO TANTO A FALTAR.
Su pelo rubio me dio en la cara, su perfume de niña me embriago, la abrace con suavidad, pase mis manos por su espalda, no llevaba sugetador, note su espalda lisa sin gomas por encima de su pijama azul.
Estabamos abrazados cuando mi hermana empezo aquel baile que tanto le gustaba a ella, ya era inutil disimular mi hinchazon, notaba su cuerpo sobre mi verga, iva y venia como una nube de pasion pasajera.
Ella debia notar mi verga dura, me puse nervioso y me senti mal.
-POR FAVOR MARY DEJALO, POR FAVOR.
-NO TE PREOCUPES, YA NO SOY UNA NIÑA, SE LO QUE TE PASA.
-¿QUE ME PASA? NO, NO LO SABES, ESTO NO ES UN JUEGO, YO SUFRO Y TU LO SABES, POR FAVOR DEJAME.
-NO ME QUIERES??
-CLARO QUE TE QUIERO, ¿COMO PUEDES DECIR ESO?.
-PUES BESAME.
Su boca a escasos centimetros de la mia me invitaba a un beso de amantes no de hermanos, y acerque mis labios a su boca, y la bese como un hombre besa a una mujer.
Sus labios de niña eran suaves, como de seda, su aliento olia a rosas su fragancia era cautivadora, la bese rozando mis labios con los suyos, ella me besaba tambien pegando sus labios y dejando ir besitos en los mios, yo le empece a pasar mi lengua por sus labios, ella los entre abrio y meti mi lengua en su boca, ella se pego mas ami, habia dejado de moverse pero ahora estaba concentrada en besarme y dejar que yo la besara a mi gusto. Nuestras lenguas se ncontraron y se fundieron en una sola.
Nos separamos y nos quedamos mirando a los ojos, esos ojos verdes ahora me miraban como curiosos como agradecidos de algo que yo no llegaba a entender del todo.
-ESTO NO ESTA BIEN MARISOL.
-PORQUE? NOS QUEREMOS.
-SOMOS HERMANOS.
-Y LO QUE PASE ENTRE NOSOTROS SERA UN SECRETO DE HERMANOS.
Cerre los ojos como queriendo huir de alli muy lejos, pero en el fondo no queria huir, la queria a ella, queria ser el primero y estaba tan exitado que creo que aunque mi herman hubiera querido irse no lo hubiera permitido, por suerte ella no se marcho.
Abri los ojos y la bese de nuevo, le subi la camiseta del pijama, sus pechitos eran hermosos una aureola alrededor de sus pezones habia empezado a marcar lo que sin duda serian unos pechos sensuales en un futuro cercano. Sus pechitos eran como picos pequeños coronando una pequeña momtaña, puntiagudos y rojitos.
Los lami mientras ella cerraba los ojos y jadeba suavemente, los lami lo los bese con amor.
Me incorpore y mi hermanita paso debajo de mi, le quite los pantaloncitos del pijama, ella me miraba con una mirada de asentimiento y una mezcla de amor y lujuria que yo en aquel cuerpo de medio mujer de doce años no llegaba a comprender.
sus braguitas blancas se le ajustaban en su cuerpo como una prolongacion mas de este, alli debajo de sus braguitas blancas mi hermana guardaba su mayor tesoro, empece a sentirme nervioso y a sentirme como un niño pese a mis 19 años, un niño delante de casi una niña.
meti mis dedos en sus braguitas y se las deslice por sus piernas suaves, ella se dejo hacer como complacida por algo que llevaba buscando hacia ya mucho tiempo.
La imagen era tan tentadora que dudo que nadie sea capaz de no caer en la tentacion o al menos eso quiero pensar para tranquilidad de mi conciencia.
Su cadera estrecha, su cientre plano coronado por un ombligo perfecto su publis poco poblado de pelitos casi rubios.
le separe las piernas con cuidado y meti mis dedos en su sexo, alli estaba caliente y su rajita de niña cerrada se estremecio al sentir mis dedos en ella, mi hermana se dejo llevar suavemente y abrio las piernas para mi.
Mis dedos acaciaron su publis, sus pelos resbalaban en mis dedos como una seda que se me escurria suavemente, mas abajo a medida que iva avanzando note como sus labios vaginales estaban cerrados y mis dedos los fueron abriendo con delicadeza, su humedad no tardo en aparecer su clitoris aparecio de golpe como un pequeño tronco duro y pequeño que se estremecia cuando mis dedos los acariciaban, baje mas y con la yema de uno de mis dedos le toque la vagina, su vagina se abrio y mi dedo resbalo un poco dentro de ella, mi hermana jadeo.
-VEN ABRAZAME POR FAVOR.
La abrace mientras la seguia acariando, le acaciaba suavemente, ella jadeaba en mi odio, de vez en cuando le besaba los labios rojos y sensuales, ella daba pequeños golpes con su cadera como queriendo acelerar la marcha, pero yo era impasible, le daba suavemente sin llegar nuca a darle el orgasmo que su cuerpo adolescente pedia.
Le chupe los pezoncitos de nuevo, esta vez los tenia mas duros, baje mi lengua y le lami su vientre, baje hasta hundir mi lengua en su rajita de niña, le meti la lengua en su vagina, ella solto un grito de placer que podia despertar a nuestros padres, me incorpore y la vi con la mano en su boca mientras me asintia con su cabeza.
Segui lamiendo su vagina, le resbalaba la lengua en sus labios vaginales de arriba abajo y le mordia el clitoris con mi boca, pero solo con los labios, ella estremcia su pequeño cuerpo hasta limites insospechados, yo me habia bajado hacia rato los calzoncillos sin llegar a quitarmelos como si mantener los calzoncillos bajados a la altura de mis rodilla hiciera que esa accion con mi hermana no tuviera tanto pecado.
Al fin comprendi que tenia ganas de poseerla, ya no podia engañar mas a mi cuerpo, mientras le daba lamidas en su vagina su olor me estremecio, un olor a hembra joven a virginidad a niña, ese olor es irrepetible salvo en esas edades.
Me puse sobre ella, otra vez nos miramos de frente sin nada que esconder y con todo que dar.
-ERES MUJER?
-SI.
-DESDE CUANDO?
-HACE DOS MESES Y MEDIO.
-ES PELIGROSO HACERLO ¿LO SABES VERDAD?
-NO TE VACIES DENTRO
-ES FACIL DECIRLO MI AMOR.
¿Mi amor? aquello me parecio extraño, aquella palabra a mi hermana estando a punto de hacerle el amor, pero despues de todo ene se momento yo era su amor y ella el mio, basta de caretas basta de hipocresia, queria fornicarla, por que era preciosa y ella me lo pedia a gritos.
Agarre mi verga y la coloque en su vagina, la empece a mercer en su estuche d eniña, ella se abria para recibirla, notaba su vagina en mi verga, caliente como un iman que atraia mi verga a aquel agugero de adolescente sin estrenar.
La di pasadas rapidas, de arriba abajo, ella se abrazaba a mi estremeciendose, para ella aquello debia de ser el amor absoluto pero yo estaba fuera de ella y la union no se habia completado aun.
Mis pasadas en su vagina se incrementaba freneticamente mientras yo la besaba y le mordia los labios de su boca infantil, ella jadeba cada vez mas deprisa y yo le daba cada vez mas rapido, su olor su ternura sus labios sus jadeos entrecortantes, al final me corri sin quererlo.
Mi chorro salio en sacudidas de placer imparables, mientras me corria en su entrada me sacudi con violencia y aprete mi verga en su clitoris para alli darle sacudidas bruscas y soltar lo ultimo que tenia dentro, ella se estremcio y arqueo su pequeño cuerpo hacia delante, su carita de angel era un reflejo de grito contenido mientras apretaba los labios para hogar su placer.
Nos habiamos corrido los dos sin llegar a fornicar.
Nos tumbamos uno junto al otro, respirando con dificultad, nos dimos la mano, estuvimos minutos sin decir nada, pero ¿quien engaña a la naturaleza? parecia como si cuerpo supiera que el acto no estaba terminado.
Ella hablo primero.
-QUIERES HACERLO DEL TODO??
Que responderle a un angel, mi cuerpo estaba de nuevo cargado y mi verga se ponia recta a cada segundo que pasaba, la respuesta era obvia.
-SI. PERO NO QUIERO HACERTE DAÑO.
-COMO ME PONGO??
Era como si ya lo hubieramos hecho, lo teniamos claro los dos, despues de todo mi hermana habia venia a eso y yo la esperaba para eso, no hacian falta mas palabras, no entre hermanos, no entre nosotros.
Decidi que se pusiera como un perrito, ella obedecio, supe que me obedeceria toda mi vida.
Me puse tras ella y empece a jugar con su vagina, en esta posicion su vagina estaba mas apretada pero estaba humeda y mi prepuncio resbalaba en su interior, lo meti dentro.
Ella lo recibio con un espasmo, no se si de placer o dolor, pero no se quejo.
Solo tener mi punta alli dentro era el maximo placer en este mundo, su vagina estrecha y humeda, la notaba toda, fui apretando mas hasta que la mitad d emi verga se metio en su vagina.
-BASTA POR FAVOR YA NO MAS.
Era su virgo, estaba a punto de desvirgarla, ahora el momento de apretar y hacerla mia, pero no era una cualquiera, era mi hermana y la amaba.
-ES NORMAL, NO GRITES, LUEGO TE GUSTARA MARI, CREEME, PON LA CABEZA EN LA ALMOHADA Y MUERDELA, ASI NO GRITARAS.
Ella clavo la cabeza en la almohada, yo la eleve un poco mas para tenerla a punto, su culito blanco de niña me apretaba contra mi vientre, aquel cuerpo era el de una diosa y estaba hecho para eso, para ser amado.
Aprete fuerte y la rompi, ella jadeo y sus manitas se agarraban con fuerza en las sabanas, las estrujaba como si quisiera transmitirle a ellas su dolor de niña rota.
Una vez dentro fue imparable, le dia empujones fuertes, solo sus jadeos hicieron que bajara el ritmo hasta casi darle muy despacio para sentirla toda.
Dentro de ella estaba apretado, su virginidad estaba rota, mi verga estaba entera dentro de su cuerpo de niña, ella parecia estar tan prisionera d emi verga que ni s emovia, solo cuando yo le daba empujones ella reaccionaba dandome a mi.
me impuse un ritmo de menos a mas que mi hermanita agrdecio, llegando a darle fuerte ella jadeaba de placer el dolor dio paso al placer mas absoluto de la vida.
me vacie en ella paretando sus nalgas contra mi cuerpo, mi verga estallo dentro de su fragil cuerpo mientras ellas se estremcia y me daba a mi unos ultimo golpes de cadera para que su orgasmo hiciera mella en mi.
Nos quedmaos quietos y doloridos, me retire de ella para ver como mi verga salia llena de semen y sangre, sangraba en abundancia.
Ella se llevo la mano a su vagina y hizo una mueca de fastidio.
-COMO LO VOY A DISIMULAR??
-DI QUE TE VINO LA REGLA.
Estabmaos sudando, la frente de mi hermana estaba llena de perlitas de sudor sus ojos estaban entre cerrados y sus mejillas encendidas, todo olia a sexo.
Nos tumbamos de nuevo, pero ahora era peligroso, la sangre salia como testimonio mudo de nuestro acto, decidimos que Marisol debia ir al lavabo a secarse y a ponerse una comprensa. Al levantarse se vino hacia mi, estaba mareada y le dolia horrores caminar, era como si al juntar las piernas hubiera una cuchilla donde antes estaba su infaltil vagina.
paso casi una hora hasta que mi hermana pudo llegar al lavabo, y paso mas de media hasta que regreso.
Al regresar parecia otra, parecia una mujer, su mirada sus gestos, ya no habia rastro de su inocencia de sus juegos de su olor a niña.
Me beso en los labios con suavidad jurandome que estaba bien, por desgracia no pudimos dormir juntos, tuvo que regresar a su habitacion infantil.
Yo me dormi y volvi a soñar con el arbol pero esta vez mi hermana me tendia la mano antes de yo caer al vacio como en otro sueño solo que la gravedad hacia efecto, veia su cara en una mueca de dolor al intentar sugetarme y como yo caia al vacio sin poder ella aguantar mi peso con una mano.
Me desperte, sudaba y era ya por la mañana, retire las sabanas y unas gotitas secas de un color carnesi me recordo la noche que habia pasado, supe entonces que la magia y la inocencia se habian ido para siempre.