-¡Si Ruben!¿No te parece que mi mujercita está deliciosa?-Preguntó Jesús.
-¡Caray...Pues si, ella es una mujer muy hermosa, pero nosotros no podemos corresponder de la misma forma!-Repliqué yo.
-Entonces...¡Hagámos un trío y dejemos que tu mujer duerma tranquila!-Dijjo Isabelita mientras frotaba mi verga por encima del pantalón pomiendola dura nuevamente. Yo dudaba en aceptar; Apenas detrás de aquella sábana estaba mi esposa quepodría para entonces haber despertado y escuchado todo. Estaba por negarme por segunda vez, pero Isabel ya se encontraba devorando la cabeza de mi pito como si fuese una ternerita hambrienta. Temblé de pies a cabeza y cayeron por tierra todas mis objeciones. Ya no opuse resistencia, enredé mis dedos en sus cabellos y jalé hacia mi para que tragara un poco mas. Ella no se detuvo hasta que sus labios tocaron mis vellos...¡Era increible! tenía el pene hasta la garganta y no daba señas de tener ningún problema. Un intenso calor recorría mi miembro de la raíz a la punta cuando la lengua de ella lo latigueaba suavemente.
Jesús se colocó a mi lado y me dijo:-¡Disfrutalo amigo, tu mujer duerme cómo un lirón y no despertará te lo aseguro!. Asentí con la cabeza y me concentré en gozar. El acercó su tranca que aún no acababa de recuperarse del todo de la deslechada anterior al rostro de ella, Isabel lo tomo en su mano y retirando el mio de su boca, mordizqueó golosa el de él haciendolo reaccionar de inmediato´; Y así alternando las mamadas estuvo a punto de hacerme explotar. Le padí que parara, no quería venirme sin habersela metido. Cambiamos de posición. Yo me recosté en la cama y ella se montó sobre mí ensartandose rapidamente y ofreciendole las nalgas a Jesús; Este no la penetró en seguida, sino que recorrió con su lengua el culito de ella, que aún escurria gotas del sémen recibido momentos antes; Yo alcanzaba a sentir su aliento en mis testículos excitandome más y aceleré mis ambates en la raja de la hembra.
-¡Espera...corrámonos juntos!-Propuso él y se colocó detrás de ella metiendole el fierro otra vez por el ojete. Ella se retorcía de placer y restregaba sus pechos en mi cara-¡Aaagggh! ¡Así , empujen con fuerza...estoy por terminaaar!-Gemía Isabel, mientras yo en el interior de su vagina sentía el entrar y salir del pene de Jesús, y no pude más...¡Me corrí a chorros al tiempo que ellos hacian lo propio! ¡Fué un orgasmo EXPLOSIVO!
Terminé tan cansado que me quede dormido en seguida.
Desperté cuando comenzaba a clarear y al voltear...¡Vaya sorpresa! me encontré acostado en mi lugar, junto a mi mujer como si nada hubiera pasado. Por mas que intenté no pude recordar a que hora volví a mi "cama"...¿Me habrian pasado ahí mis anfitriones?...¿Lo habría soñado?...
En eso empezó a despertar Estela y me sacó de mis cavilaciones:-¡Buenos dias mi amor! ¿Dormiste bien?-Preguntó. Suspiré profundamente:-¡Mejor que nunca mi cielo!- y vaya que era cierto.
Isabel y Jesús ya estaban de pie y listos para salir a su trabajo. Ella lucía esplendida con su uniforme de camarera, la falda era corta y dejaba ver sus delgadas pero bien torneadas piernas; Mientrás que él, parecía otro, la barbilla perfectamentre afeitada, su peinado exacto, los zapatos relucientes y enfundado en su traje, habia perdido el aire campirano que tenía la noche anterior.
-¡Arriba flojos!-Nos dijo sonriendo Isabel-¡Les quedan 15 minutos para tomar su desayuno!
Nos levantamos rapidamente y muy apenada, mi mujer contestó:-¡No, muchas gracias! Ya fué suficiente de molestias. de verdad le agrad...
-¡Nada. nada!-Interrumpió Jesús tomándola del brazo y conduciendola hacia la mesa-¡El desayuno está servido y no nos lo van a despreciar! ¿De acuerdo?.
Aceptamos de buena gana y disfrutamos de prisa de un delicioso consome de carnero y un par de cervezas, mientras Jesús sacaba los vehiculos para partir.
-¡A Jesús y a mi nos encantaría que nos acompañaran al pueblo, hoy es la fiesta del lugar y se pone muy bueno el ambiente!, Nosotros cubrimos nuestro turno en el hotel y después nos reunimos con ustedes para divertirnos juntos, además de que podrían hospedarse ahí mismo, ¿Que dicen?-Sugirió Isabel.
-¡Excelente idea!-Sonrió mi mujer-yo voy a conducir de camino al pueblo Isabel...¿Porque no viajas conmigo y que Ruben se vaya con Jesús en la camioneta, para ir conversando?.
Así lo hicimos, y ya en camino Jesús rompió el silencio:-¿Así que te parecen extrañas nuestras costumbres en cuanto a sexo?.
Medité un poco antes de contestar:-¡Pues pensandolo bien, después de lo de anoche ya no!. A decir verdad, en todo el tiempo que llevo de casado no había disfrutado de una noche igual...Es una lástima que mi mujer ni en sueños participaría en algo así, ¡Ya me imagino lo que podríamos hacer los cuatro!.
-¿Entonces sí te gustaría?-Preguntó él.
-¡Por supuesto! Mi vida sexual es un asco y a pesar de que Estela tiene un cuerpo precioso, jamás me ha permitido disfrutarlo cómo quisiera...¡ En fin !-Suspiré-¡Para que pensar en algo que no puede ser!.
-¡Tú no te preocupes, cómo tú también lo deseas lo haremos esta noche, gozarás a tu mujer como nunca y nosotros estaremos disfrutando con ustedes!-Agregó Jesús muy seguro de lo que decía.
Sonreí con un dejo de amrgura-¡Cómo se ve que no conoces a Estela!
-¡Y cómo se ve que tú tampoco conoces a Isabel, ella consigue lo que se propone...S-I-E-M-P-R-E!
En mi interior sabía que eso era imposible, durante 8 años habia intentado de todo para abrir el criterio sexual de mi esposa sin conseguirlo, desde veladas romanticas, hasta peliculas porno (mismas que ella quitaba inmediatamente y tiraba a la basura tachandome de pervertido); Desde bebidas y alimentos afodisiacos, Hasta perfumes que anunciaban como eroticos y, ¡ Nada!. Cierta vez hasta le propuse que visitaramos a un sexólogo...¡Qué mala idea!-¡Lo que deberías visitar tú es un psicólogo, debes estar enfermo!-Me gritó mi mujercita en aquella ocasión.
Aún así ya no le dije nada a Jesús, no quise desanimarlo. Continuamos el camino, Estela e Isabel nos seguian atrás en nuestro automóvil. Al llegar a una zona de curvas vi que en una de ellas faltaba untramo del muro de contención y en seguida un profundo barranco.-¡ Vaya accidente ! ¿Supiste algo al respecto?-Pregunté a Jesús.
No obtuve respuesta alguna, solo noté que el temblaba y sus ojos se llenaron de lágrimas. No insistí, guardé silencio durante el resto del viaje.
A la distancia se asomó la catedral de pueblo
y tres edificios que sobresalían del caserío. Era un pueblo pequeño, pero estaba rodeado por una hermosa laguna en la que se podían ver algunos botes pequeños. A la entrada un letrero daba la bienvenida y anunciaba las festividades del lugar; Adornos multicolores colgaban de los alerosy la gente iba y venía, colocando puestos para vender mercancias.
Llegamos al hotel. Era unedificio de 4 pisos, con un pequelo estacionamiento para clientes el cual se encontraba lleno, así que entramos por una puerta lateral y dejamos los vehiculos en el estacionamiento para empleados.
-¡El hotel es moderno en comparación con el pueblo!-Dijo Jesús- ¡Tiene alberca, dos canchas y la laguna forma una playita en la parte de posterior. Tambien hay elevador, agua caliente y teléfono, estarán muy a gusto!.
Las risas de Isabel y Estela se escucharon.Venían hacia nosotros tomadas de la mano y bromeando, por lo visto se habían identificado muy bien entre sí.-¡Bueno, yo llevaré sus maletas y me encargaré de conseguirles una habitación. Parece estar lleno el hotel, pero yo me encargo de eso!-Aseguró Jesús-¡Mi amor, tu llevalos al lobby en lo que voy a traerles su llave!.
Cuando ya estuvimos instalados en nuestra habitación, nos despedimos de ellos acordando vernos al terminar su turno por la tarde.
Tomé una ducha mientras Estela desempacaba las maletas, ella se bañó después de mí, como de costumbre. Por increible que parezca mi mujer y yo nunca nos bañabamos juntos, así que ni se lo propuse.
Eran las 10:30 cuando salimos a recorrer el pueblo y a comprar algunos recuerditos del lugar y alquilamos una lancha para que nos diera un paseo por la laguna. Yo esperaba que mi mujer me comentara, si Isabel le había insinuado algo, me pregunté si ella tenía un plan para convencer a Estela, pero...no mencionó ni una palabra sobre el tema. Regresamos al hotel como a las 2:00 de la tarde y pedimos que nos subieran la comida a la habitación. Yo esperaba ver a Isabel llegar con el servicio al cuarto, pero no fué así, nos atendió un mozo del restaurante.
Después de comer me recosté y decidí tomar una siesta. desperté tres horas después, entré al baño a lavarme la cara y encontré la luz encendida. Detrás de la puerta corrediza que separa la ducha ví la silueta de Estela metida en la tina, me aventuré a correr la puerta, preparandome para su acostumbrado rechazo. La encontré con las dos piernas separadas, apoyadas en los bordes de la tina y nadando en burbujas. ¡No lo podía creer cuándo volteó a verme sin enojarse y me extendió su mano...invitandome!. Me despojé de mi ropa en dos segundos y me dispusé a entrar con ella en la tina. cuando de entre sus piernas y cubierta de espuma...¡Saltó Isabel!...



CONTINUARÁ...