Un personaje llamado Servando, queriendo ir del campo a la ciudad pensaba utilizar un asno como medio de transporte, pero el sólo pensar que el animal defecaría por todo el trayecto dejando tras de sí malos olores, sin duda contaminaría el ambiente dañando su imagen de acérrimo conservacionista.
En vista de tal situación, decidió viajar a la ciudad en autobús, y así mientras Servando se sentaba cómodamente en su butaca para emprender su viaje, la unidad automotora con su escape en forma de bastón lanzaba a la atmósfera su defecación gaseosa de monóxido de carbono.
Moraleja:
Cuantos ambientalistas como el de éste relato
Terminan matando un tigre al querer salvar un gato.