-No... No no quiero chupartela, no quiero, no... -Gimoteó Daisuke como un niño pequeño mientras sostenía la polla de Takeru en su mano. Sus dedos tenían problemas para conseguir todo el camino alrededor de él y la longitud era intimidante. Él lo sostuvo cuidadosamente en el medio, no queriendo poner su boca en él. Olía mal. Gritó un poco cuando Takeru le agarró su pelo y tiró con fuerza, obligando a Daisuke a mirar hacia arriba.

-Escucha, maricón, vas a chupar mi polla. Luego voy a destrozarte el coño -Takeru gruñó y al mismo tiempo lo humilló, tratandolo como mujer perdiendo la paciencia, su polla palpitaba mientras las lágrimas y la desesperación de Daisuke lo ponían más cachondo. Había estado planeando esto por un tiempo, para esta ocasión habia comprado a Daisuke un tanga donde se le podía ver en la parte de atrás el culo, era mas facil entrar en el sin tener que quitarselo, era un tanga de color rojo que compaginaba muy bien con el cabello de Daisuke y porqué no decirlo, con los ojos cristalinos y rojos que sabía que iba a tener, fuera de eso, Daisuke se veía muy bonito agarrando aquella polla con miedo y sin ningún deseo de llevarsela a la boca.

La situación cada vez era mas tensa y lo que menos deseaba, aparte de no ser un día para tener sexo con su amante era que este se refiriese a él como una chica

-No tengo coño. -Contestó haciendo una mueca cuando Takeru le agarró de la cadena y tiró fuerte. La jaula de metal en su polla estaba en sus caderas y gritó de dolor de nuevo.

-¡¡DETENTE TAKERU!! ME DUELE -Apretó los ojos

-Ese es tu coño. Tienes que aprender rapido que conmigo tienes dos agujeros que necesitan siempre ser llenados o torturados por mi. -Levantó la cabeza de Daisuke más cerca de su cara, sonriendo mientras este ultimo lloraba abiertamente de dolor y humillación creciente.

- Venga, vamos a buscar los juguetes.

Daisuke resopló mientras era arrastrado por el pelo agarrando el brazo de Takeru mientras este estaba desnudo al igual que Daisuke, abrió un cajón y sacaba una mordaza, Puso la mordaza en la boca de Daisuke, forzandolo a abrir demasiado la boca, ignorando completamente sus gritos de dolor.

Daisuke con lo poco que estaba sucediendo, apoyó las manos en las caderas de Takeru, deseando vomitar ante el olor del pene que estaba recibiendo, la polla de Takeru era muy grande y tan intimidante y la mandíbula de Daisuke ya dolía de ser forzada abierta.

Al acercarse mas Takeru, Daisuke en un acto de rebeldía muy inapropiada para la ocasión, trató de empujarlo pero Takeru era demasiado fuerte. Esa enorme masa de carne pasó fácilmente por su boca, los brazos de Daisuke se vieron obligados a doblarse. El primer sabor salado de semen hizo que Daisuke quisiera moverse pero la polla se forzó en su camino golpeando la parte posterior de la garganta de Daisuke. Takeru fue hacia adelante y empujó hacia atrás a Daisuke, moviendole para que su polla pudiera entrar en la garganta estrecha.

Todo estaba medio camino y Daisuke cada vez mas asustado que antes, si bien era cierto que le gustaba el sexo duro pero no al nivel en el que estaba Takeru que era todo justo a lo que no le gustaba Daisuke, aun asi ahí estaba él, y fue debido a la esa manera tan encantadora que tenia Takeru para llevarselo a su terreno y hacer lo que siquiera con él.

A Takeru en ese momento le encantaba el ruido y golpeaba profundamente, poniendo una mano en la garganta delgada para sentir que su gruesa carne empezaba a amoldarse a la garganta de su amante. Su otra mano sostenía la cabeza de Daisuke en su sitio para que pudiera meter su pene salvajemente. Daisuke se tragó su propio vómito un par de veces,la violación contra su boca era tan fuerte y aquel pene se estrelló innumerables veces con la campanilla que la baba y el vómito le estaban ahogando, Takeru esperaba eso, dejarle vaciar el estómago.

Daisuke miró hacia arriba, con los labios hinchados mientras Takeru usaba su rostro. Daisuke ya no luchaba, trabajaba sólo con la respiración, y tomando la polla masiva de su amante por la garganta. Su nariz recibia los pequeños pelos que Takeru tenia en el lugar, bolas masivas golpeaban su barbilla mientras lloraba y esperaba a que todo terminase

Entonces Takeru tiró de los labios de Daisuke enrojecidos con sus caderas, Daisuke empezó a luchar de nuevo, pero se sintió un poco mareado, su rostro se volvió como en un color morado. Aquellos ojos enrojecidos comenzaban relajarse de nuevo cuando Takeru se retiró lo suficiente como para permitir que Daisuke respirara, pero ahora se enfrentaba a otra cosa.

El primer sabor de semen del dia fue repugnante para Daisuke, pero no tuvo más remedio que tragar lo que se acumuló en la parte posterior de su garganta, dejando que el resto se quedara en su lengua. Estaba llorando abiertamente, con el rostro rojo e hinchado y estaba completamente avergonzado, asustado y humillado. ¿Cómo podía Takeru hacerle esto a él? ¿Cómo podía ser así? Parecía mentira que abiertamente con todo el mundo, Takeru fuera un chico encantador con una sonrisa encantadora y de puertas para adentro con Daisuke fuese lo mas cercano a una bestia.

- Buen maricón, ¿sabes que? Esa era tu cena. ¿Qué dices? -Preguntó Takeru mientras finalmente sacaba la mordaza de él, Daisuke jadeó y se tragó el semen, estremeciéndose mientras sostenía su dolor de garganta.

- ¿Porqué me miras? -Intencionandamente, Daisuke se le quedó mirando pensando en lo que habia pensado hace unos segundos

-... Yo... No sé... -Gimió Daisuke, queriendo alejarse ,ahora se sentía avergonzado, pero no estaba seguro de si debía dejar escapar sus emociones, eso jugaria en su contra y pasó así, ahora Takeru en un acto de bipolaridad, le acarició el rostro amorosamente, confortando al muchacho.

- Quiero que digas porqué me miras asi

Por un momento habia un poco de comunicacion entre ellos asi que Daisuke aprovechó

- ¿Porqué eres asi?

- ¿Así como?

- Como ahora mismo, o como haces siempre, porqué tienes doble personalidad? Con el resto del mundo eres un chico amable, simpático, todo el mundo te quiere, en cambio conmigo...

- Di gracias -Takeru ignoró lo que Daisuke sentía, su expresión se oscureció

Se creó un gran silencio incómodo en el que ninguno de los dos hizo ni dijo nada, pero Daisuke sabia que debía obedecer por no estropear las cosas

- gracias... Gracias por la cena. -Obedeció Daisuke, al menos consiguió que Takeru sonriera mientras Daisuke hacía lo que le ordenaba. Acarició su cara de nuevo, con afecto, esas eran las acciones que confundian a Daisuke muchisimo

- Eres un buen maricón. Ahora, chupamela un un poco más.Necesito asegurarme de que consigues toda la leche especial -Takeru insistió empujando su polla a la cara de su amante

Daisuke gimió, pero chupó la polla en su boca. Era más fácil, ahora que era suave. Él amamantó todo el esperma salado y caliente libre de la polla y limpió la mayoría de hilos finos. Finalmente todo el semen desapareciño casi de de su boca y él miró a su amante.

-Tengo sed, Takeru... -susurró Daisuke, se atrevió a llamarle por su nombre con la esperanza de que le diera un poco de agua y crear un ambiente mas cómodo entre los dos, pero parece que Takeru no estaba muy por la labor por hacer la segunda opcion, simplemente sonrió lentamente

- Ahora, puedes conseguir cosas, ya deberias de haber aprendido que conmigo todo viene con un precio. ¿Quieres agua? Entonces tienes que hacer algo.

- O... Está bien,... ¿qué debo hacer? -Preguntó con temor. Empezaba a temblar incontrolablemente.

- Tienes que beber de mi polla, tienes que beber mi jugo -Takeru canturreó mientras agarraba la cabeza de Daisuke. El muchacho parecía horrorizado, mirando fijamente a la enorme y flácida polla.

Daisuke sollozaba abiertamente, sin embargo, necesitaba agua. Se inclinó hacia delante, tomando la polla de Takeru en la boca.

- Buen maricón. Mi pequeño retrete, déjame darte el jugo especial. -Takeru observó la expresión de disgusto de Daisuke mientas la orina llenaba su pequeña boca. Tragó convulsivamente.

-No derrames una gota o no conseguirás satisfacer tu deseo, bebe todo y recuerda qué decir después.

Daisuke luchó para beber toda la orina que fluía de la polla endurecida. Él tragó duro y rápido, sus ojos comenzaron a volverse incómodos mientras se extendía lo que parecia no tener un fin, pero finalmente, Takeru terminó de orinar, sacó su polla de la boca de Daisuke que jadeó y tosió. Miró a la cama, todavía temblando.

- ¿Qué se dice?

- Gracias. –Susurró.

Takeru le dejó tomar una botella de agua antes de preparar a Daisuke para ir a la cama. Tuvo que usar pijama rosa de princesa. Él se humilló aún más cuando Takeru le puso un collar de perro rosa alrededor de su cuello.

-Ahí tienes, mi pequeña princesa. Te ves tan bonita. Así que perfecto. -Dijo Takeru mientras observaba a Daisuke observar incómodo lo que llevaba puesto, Cuando Daisuke terminó, Takeru empujó su cabeza hacia atrás y le robó un largo beso

- te quiero. -Fueron unas palabras que dejaron a cuadros a Daisuke dejandole completamente confundido y vulnerable. Se acurrucó cerca de Takeru mientras lo llevaba de regreso a la cama. Este sacó una cadena que se adjuntó al pie y a la jaula de la polla de Daisuke y fue encadenado al suelo. Daisuke no podría moverse muy lejos en absoluto, se estremeció cuando Takeru lo mantuvo cerca, pero lejos, Daisuke dormiría en el suelo mientras Takeru de vez en cuando tiraria de la cadena haciendo a Daisuke lloriquear de dolor.

Estaba en el infierno... Pero tenía que confiar en él, a fin de cuentas Takeru lo amaba a su manera, pero lo amaba.