En cada ocasión en qué viene especialmente visitan mis sobrinos adolescentes a mí cómo a mí esposa. Una mujer muy afectuosa, cariñosa, simpatica, bella, divina, alegre, madura asimismo espectacular con una silueta delgada de unos soñados cómo radiantes 31 años es un pan de dios; le queda y viste perfectamente falda lapiz ya que ella es gerente de una empresa hoy día, mis sobrinos adolescentes los muy chabales se comportan incluso la quieren cómo otra madre, en qué algunas veces encontrando sus manos traviesas, juguetonas, sinverguenzas, lisas asimismo depravadas alrededor de su culo y muslos en qué ella deja libertinamente que se sobrepasen hasta le hagan todas estás cosas no propias de sus sobrinos con su tía preferida, querida y consentidora para rematar ella con ellos y viceversa para joderme la plena vida pero yo no me muestro molesto ni celoso ni incomodo ni irrespetado ni traicionado ni encuarijinado al respeto. Y me cuenta que los más grandes han tenido un contacto más cercano con ella mientras estoy ausente en mí apartamento e inclusive de viaje por trabajo ya que yo me dedico a negocios navieros, en donde ella me asegura que es por la malsana curiosidad pero los forra con condones a todos ellos al follarla, cogerla, cabalgarle, mamarle, hurgarla, dominarla, deleitarla, excitarla, calentarla, enajenarla, coquetearla, conquistarla, levantarla, buscarla, incitarla, atraerla, apasionarla, emocionarla, aventurarla y obviamente comerla por todos sus jugos vaginales cuándo se viene ella en que lo encuentro muy natural siempre y cuándo no me traiga consecuencias alguna por parte de ella, aceptandolo y permitiendolo cómo accediendolo al tenerle 100 por ciento confianza, seguridad, amarla, comprenderla, fascinarla asimismo entenderse en la intimidad y sexualmente con mís sobrinos de 18 hasta 21 años actualmente no me molesto ni me enfado ni me encelo para nada con ella ni con ellos.