Yo soy Fernando un hombre argentino nacido en la provincia de Córdoba, tengo 26 años de los cuales dos me he dedicado a laburar mi profesión; soy abogado como también lo es mi novia la cual conocí hace cuatro años cuando estaba a punto de graduarme y con la que espero casarme muy pronto.

La historia que les relato a continuación ocurrió en el año de 1997 cuando ya tenia 17 años de edad; vivía en un barrio pobre a las afueras de la ciudad y como cualquier otro pibe pensaba solo en jugar al fútbol y como también todos los otros chicos tenia de ídolo al “10” claro hablo de Maradona el dios argentino de chicos y grandes. Como yo eran muchos los pibes que queríamos imitarlo, siempre nos reuníamos en la casa del “flaco” un amigo inseparable de aquellas épocas para ver los partidos y estudiar las jugadas para ponerlas en práctica en nuestro equipo del barrio.

Recuerdo que vivía yo en una humilde casa, igual que la mayoría de las de mi barrio era fea y descuidada, tenía las paredes curtidas por el pasar de los años. Mi casa era sino la más grande de todas las de mis amigos pero al igual que grande era fea y descuidada pues mis viejos no tenían dinero para arreglarla.

Yo era un pibe guapo de cabellos rubios y ojos claros por esa razón todas las minas de mi escuela se enamoraban de mí pero yo nunca llague a interesarme por ninguna pues para mi era más importante el fútbol que cualquier otra cosa, soñaba jugando un clásico en el mítico estadio de boca “la bombonera”.

Todas las tardes después del cole salía corriendo hacia mi casa prendía la tele y en compañía de “sole” como conocían mas popularmente a mi hermana soledad veíamos todos los partidos de boca los partido viejos donde jugaba Maradona con sus espectaculares jugadas contra los petizos de river; sole y yo permanecíamos todo el día solos en casa pues mis viejos salían a laburar desde la mañana y no llagaban hasta entrada la noche.

Me acuerdo que aquella tarde de viernes esperaba impaciente la hora de que la campana del colegio sonara para salir a casa como de costumbre, pues la escuela no me entusiasmaba mucho que digamos. Cuando llago la hora cogí mi mochila y Salí corriendo hacia mi hogar, allí como de costumbre estaba mi hermana la encontré con sus amigas unas bebas que no pasaban de los 15 años y que se reunían en mi casa solo para fastidiarme no era para estudiar aunque eso era lo que hacían pensar a mis viejos.
Cuando entre me di cuenta que mi hermana estaba algo rara parecía mas arreglada de lo normal, tenia la faldita del colé con sus respectivas medias blancas y sus zapatillas rojas no se me pareció mas linda de lo normal a ella como a mí la perseguían los pibes del barrio pues era una morena hermosa tenia las piernas como de una reina, unos senos firmes y un culo bien parado. Ese día la vi de una manera distinta a la de un hermano la vi como una mujer; después que entre me dirigí a mi pieza y allí me quede hasta que sentí que las minas amigas de mi hermana salieron cerrando su puerta detrás de si; Salí de mi pieza y me dirigí a la cocina a comer algo y después a la tele a ver partidos como era costumbre, me senté en el sillón de la sala pero no encontré nada en la tele así que decidí ir a mi cuarto a recostarme en la cama; me dirigía a ya a la pieza pero unos extraños ruidos me interrumpieron los pasos; pera mi sorpresa venían del cuarto de mi hermana sole me acerque para averiguar escuche de nuevo unos ruidos pero ahora se oían mas nítidos parecían gemidos salidos de la boca de una mujer; a mi me entro la curiosidad y abrí la puerta sin mas ni mas. Cuando entre la vi a ella era mi hermana estaba tirada en la cama semidesnuda tenia un brasier y una tanguita negra ¡que haces! Le dije y ella no me contesto salí rápido a mi cuarto me senté en la cama y en mi pensamiento solo se reproducía esa escena yo me decía a mi mismo ¡acabaste de ver a tu hermana semidesnuda! En ese momento ella entro a mi cuarto yo alce la mirada y la vi ya estaba vestida con un short y una blusa se me acerco y me dijo: ¡fer no le contes a mis viejos! Yo le dije que no les hiba a decir nada ella me explico que sus amigas lo hacían todo el tiempo y que que quería experimentar, en ese momento se me acerco tanto que sentía su respiración en mis labios yo me quede paralizado, ella me agarro la pierna con la mano acerco mas sus labios y finalmente me beso en la boca ese beso fue el mejor que he recibido en la vida sus labios carnosos y blando sabían espectacular.
Ella comenzó a subir la mano por la entrepierna mi verga se paro los dos lo sentimos sole la cogió y la apretó se sentía muy rico su mano estaba caliente como fuego, yo cada vez me excitaba mas; ella miro el reloj y me dijo:¡esta noche te espero en mi cuarto! Y se fue.

Mis viejos llegaron como a eso de las 7 y me preguntaron que como me había ido en el cole yo les dije que bien que ya había hecho mi tarea y que me dirigía a acostar porque estaba cansado, me acosté pero no dormí esperando que mis viejos se durmieran para pasarme donde mi hermana; como a eso de las once salí de mi cuarto y me acerque a la pieza de mis padres solo para asegurarme que estuviesen dormidos, no escuche nada así que tome rumbo al cuarto de sole, abrí la puerta entre y me metí en su cama ella me abrazo y me dijo que quería que le hiciera el amor que me deseaba mucho, cogio mi verga y la froto estaba erecta ella se quito su pijama no traía nada de bajo yo Quero verla así que me pare y prendí la luz solo para observarla, cuando vi sus pezones color marrón su concha afeitada me metí a la cama y junte su cu8erpo con el mió cada vez nos apasionábamos mas le agarre sus tetas y las chupe con todo mi fuerza luego baje y le chupe la concha lo hacia con tal pasión que después de unos minutos ella se corrió, su vajina con cada espasmo soltaba unos fluidos deliciosos que derramo en mi boca y que tenían un sabor acido después ella bajo y me lo mamo con la misma pasión con la que yo el había hecho a ella su lengua jugaba con la punta de mi pene bajaba por todo el tallo y me chupaba las pelotas después de un momento no me contuve y me vine soltando unos jugos que para mi sorpresa sole trago con gran rapidez. Caímos los dos en un estado de cansancio nos quedamos tirados en la cama desnudos hasta que me recompuse para salir de allí sin pronunciar palabra.

Al sábado siguiente yo estaba en mi cama dormido soñaba con el partido en la bombonera, en ese momento me despertó algo mojado que se metía en mi oreja mire con los ojos entreabiertos y vi a mi hermana la cual introducía su deliciosa lengua y después hacia suspiraba en ella yo me calenté al instante mi verga se puso dura de nuevo ella me beso y se fue de mi cuarto haciendo una seña con su dedo índice que me decía “seguime” yo me pare salí de la pieza y la vi meterse en el baño fui para aya estaba desnuda en la ducha cuando menos lo imagine yo también estaba desnudo bajo el chorro de agua tibia que que rozaba el contorno de nuestros cuerpos, pase mi boca por toda su piel le bese el culo, abrí sus nalgas y metí mi lengua en su ano ella solo gemía y murmuraba ¡mas! ¡Dame más! Cerró la llave del agua dirigió mi cabeza a su vagina se hizo pis yo sentía que mi boca se llenaba de un liquido salado pero que a la vez tenia un olor excitante yo me pare la bese después tome su cabeza y la dirigí a mi pene ella se alejo y me dijo: ¡quiero que te orines en mi! Yo hice fuerza para que mi líquido saliera; cuando ya salio la inunde de pis por todo su cuerpo ella gritaba de la emoción, la hice para la puse en cuatro y la penetre de su concha salio sangre en cantidades considerables pero es me éxito mas yo sabia que le dolía pero no pare seguí hasta que mi pene no pudo soportarlo me corrí en su vagina es lo mas rico que jamás he sentido su vagina virginal era mía ella voltio con cara de placer y me saco mi verga y la beso estaba llena de sangre pero la chupo hasta que la limpio por completo, luego se paro volvimos a su pieza donde después de chuparle su concha y ayudándome con mi dedo logre que se corriera en ese instante me agarro del pelo y me apretó duro contra su vagina.

Esa ha sido la mejor experiencia de mi vida; sole y yo lo seguimos haciendo hasta estos días claro mi mujer no lo sabe aun y no lo sabra.