Antes de empezar, a modo de introducción, les cuento que yo tengo 30 años y siempre tuve la fantasía de compartir a mi novia con otro hombre, ya que pienso y lo pude verificar, que el morbo que me iba a provocar, me excitaría terriblemente. Esta historia es real.
Era uno de esos típicos días Viernes ideal para juntarse con amigos en casa y ver una película o simplemente quedarse charlando. Por lo tanto, le propuse a Florencia, mi novia, que llamáramos a algunos amigos para ver si querían juntarse con nosotros a cenar. Intentamos con una pareja con los que salíamos seguido pero ya tenían planes. Llamamos a otros y tampoco tuvimos suerte, así que después de un par de llamados más, cuando ya desistíamos de organizar algo, suena el teléfono y al atender era Esteban.
Esteban es un amigo mío con el cual compartíamos muchas cosas, ya que tenemos muchos gustos en común. Él tiene 29 años, es de buen físico, pintón y muy simpático. Me llamaba para invitarme a salir porque estaba solo y no tenía nada para hacer, así que yo le propuse venir a cenar con Florencia y yo, a lo cual él aceptó encantado, ya que con Flor se llevaban muy bien, por lo tanto quedamos en encontrarnos en un par de horas.
Con Florencia nos fuimos a comprar algunas cosas para la noche y un par de "varias" cervezas, ya que a nosotros y también a Esteban nos gustan mucho. Dejamos todo preparados y nos fuimos a duchar. Como era un encuentro en casa, nos vestimos normales. Yo con una camisa y unas bermudas. Y Flor con un vestido bien suelto, de esos que tienen botones adelante desde arriba hasta abajo.
Florencia tiene 26 años, es morocha, de estatura media, ojos marrones, delgada y con una cola y unos pechos que nunca me canso de besar y tocar. Con el vestido que tenía puesto, dejaba varios botones desabrochados arriba, lo cual permitía apreciar sus pechos redondos y bien parados. Además, cuando iba de un lugar a otro, la tela del vestido que era fina, dejaba ver el contorno de su cuerpo y la tanguita que tenía puesta. Cuando yo le decía que lo iba a volver loco a Esteban, ella ponía una mirada cómplice y se reía, lo cual me excitó y hecho a volar mi imaginación.
Seguimos con los preparativos, cuando nos dimos cuenta que no habíamos sacado una película para ver después de la cena y como justo llegaba Esteban, decidimos que si teníamos ganas, veríamos una en la tele. Nuestro invitado estaba vestido con un pantalón de hilo clarito, ya que a pesar de la lluvia era un día caluroso, y como al parecer sus interiores eran de color oscuro, se podían ver por momentos a través de la tela, aunque creo que Florencia no lo notó.
Fuimos a la mesa y mientras calentábamos la comida, comenzamos a charlar y a beber cerveza. Creo que debimos haber tomado unas dos o tres botellas de litro, ya que como dije antes, era un día caluroso y uno no se daba cuenta de lo que tomaba. El haber tomado con el estómago vacío, hizo que perdiéramos un poco la timidez y cuando Florencia se levantó a buscar la comida, Esteban le dijo "Hey Flor, ese vestido es trasparente... Se te ve todo!", a lo cual Esteban y yo comenzamos a reírnos y ella se puso algo colorada, pero después se unió a nuestras carcajadas.
La cena continuó con cervezas y chistes sobre el vestido de mi novia y hasta en un momento Esteban le adivinó el color de la tanga que llevaba puesta Florencia, a lo cual ella respondió que también sabía el color de los interiores de él. Entonces, Esteban que ya se lo notaba algo excitado, dijo que no creía que ella lo supiera y que dijera que color creía que eran. Florencia respondió que era negro, pero Esteban lo negó, así que para saber la verdad, yo dije, "Y bueno..., mostrá a ver quien tiene razón". No sorprendió mucho mi propuesta, ya que entre nosotros hay mucha confianza, pero Florencia y yo, suponíamos que Esteban iba a levantar el elástico de su interior para mostrar el color. Pero la sorpresa fue cuando vimos que comenzó a desabrocharse el pantalón y bajar el cierre. Pero mayor fue la sorpresa cuando se pude ver que la pija de Esteban estaba media parada, que dicho sea de paso, se veía bastante grande. Pero bueno, definitivamente el interior no era negro, sino verde oscuro...
Luego de esa escena, la cual creo que nos excitó a todos, después de tomar un par de cervezas más, decidimos ir a ver la tele al living. Nos sentamos los tres en un sillón, quedando Florencia en el medio. Yo, que era el que tenía el control remoto de la TV, puse un canal en el que sabía que a esa hora pasaban películas eróticas a lo cual Esteban, al ver una escena erótica, dijo, "huy..., no me vallas a cambiar" a lo cual yo respondí, "Tampoco pensaba hacerlo" y todos reímos un poco por el efecto del alcohol y otro poco por la insinuaciones.
A todo esto, Flor, se acomoda dándole la espalda a Esteban y colocando su cabeza sobre mi hombro (como si fuese en posición fetal). Para estar más cómoda, se recogió el vestido, quedando este a la altura de sus muslos. De esta manera, con su espalda, tapaba los movimientos de su mano que bajaban por mi vientre y los dedos entraban por debajo de mi pantalón, alcanzando mi verga, que después de todo lo que veníamos pasando, estaba durísima. Al principio, me sorprendí y lo miré a Esteban, que parecía estar totalmente concentrado en la película. Entonces, yo disimuladamente, comencé a desabrochar los botones de arriba del vestido de Flor, dejando casi al descubierto sus pechos y que dejaba ver sus pezones que estaban durísimos.
Yo ya no aguantaba más de la calentura que tenía. Estaba mi pantalón desabrochado, la mano de Flor masturbándome, sus tetas al aire libre que había sacado hace un instante y Esteban ahí al lado nuestro! Pero mi sorpresa fue cuando vi unos movimientos de cadera de Flor. Ella se meneaba hacia atrás, contra el bulto de Esteba, el cual iba levantando de a poco su vestido. Yo volvía a mirar con menos disimulo y ellos se dieron cuenta, a lo cual él se hizo hacia atrás y ella quedó mirándome. Entonces, ya sin nada de disimulo, terminé de desabrochar el vestido de Florencia, a lo cual ellos entendieron mi aprobación y volvieron lo suyo, pero esta ves, ella, con una mano y ayuda de Esteban, dejaron la pija de él afuera mientras ella lo masturbaba, yo comencé a morder los pezones de mi novia, la cual gemía como loca por la excitación.
Cuando coloqué mi mano sobre su vagina, estaba totalmente mojada. Le saqué la tanga mientras pude observar como Esteban se desnudaba completamente. Tenía una pija enorme y los ojos de mi novia no paraban de mirarla con hambre. Así que lo primero que hizo, fue chuparle la pija a él, mientras yo me tomaba todo el líquido de su vagina. Creo que debió haber tenido como tres orgasmos seguidos...
En eso yo me paré frente a ella y entendiendo que ahora deseaba que me la chupe a mí, Esteban fue por detrás y la comenzó a penetrar. Esa pija enorme parecía que le iba a salir por la boca a Florencia. Entraba y salía con rapidez y con fuerza mientras ella me la chupaba a mí y casi gritaba de placer. Seguimos así por unos minutos más, hasta que le terminé acabando toda mi leche en su boca, así que ahora yo solo apreciaba como se cogían a mi novia. Pasaron por mil posiciones, hasta que en un momento Esteban sacó su pija y le llenó de semen sus pechos mientras se los refregaba y le esparcía su leche por todo el cuerpo!
Realmente fue fantástico! No creo que haya logrado describir lo que fue ese momento, pero espero que al menos puedan imaginarlo un poco. Terminamos los tres en la ducha, para limpiarnos un poco, aunque en realidad ahí empezó una nueva historia...

Un abrazo a todos de parte mía y de Flor!