NANCY NO PIERDE TIEMPO.

Por Marcos Urbina

Yo tenía los ojos cerrados, de pie y recostado contra la puerta del baño. Metidos entre mis párpados estaban aquellas tetas que yo había memorizado porque me las imaginaba. Me estaba haciendo la paja, lentamente, muy tranquilamente, el puño apretado recorriendo todo a lo largo del huevo y deslizándose justo sobre la cabeza, dándole pa´lante y pa´ tras, desde la base del pene. Ya me salían las primeras gotas de pre-eyaculación que viajaban a lo largo del canal superior del palo, proveniente de las glándulas hipersensibles localizadas en la parte de abajo.

El aire acondicionado en la oficina de Nancy no enfriaba bien, a pesar de que estaba a toda marcha , lo que mas podía dar. Creo que ella se sentía incómoda con esos pezones duros como roca metidos dentro de aquellos brasieres, intentando salirse desesperadamente por encima de la blusa de seda y el delicado, frágil sostén que ese día se había puesto para ir a trabajar. Tenía unos senos perfectos -por lo menos eran los que me gustaban- no tan grandes que necesitaran un soporte para sostenerlos, pero si tan deliciosos que casi te podías meter una teta y luego la otra en la boca. Eso si: era la dueña de unos pezones muy gruesos, redondos y bien parados -me gustan los pezones paraditos sobre la teta, que no cuelguen apuntando hacia el suelo. Se los había visto muy bien, bueno…a través de su ropa.

Gimiendo y hablando en voz baja pruebo uno, imaginándome lo que ella siente cuando se lo toca con su mano. Después me imagino, mientras me masturbo, mi lengua pegada a aquellos pezones y chupándolos mas y mas duro para que se paren mas. –lucen muy bonitos, como si fueran mesetas, un terreno llano, que sobresale sobre la planicie que los rodea, colocados sobre las tetas mas bonitas y blandas del mundo. Después me imagino a Nancy montada sobre mis caderas y lentamente apretándome dentro de sus piernas…tan suaves, tan tibias…tan…

-No, no lo desperdicies -me dije a mi mismo, suavemente, pero dándome una orden.

Instintivamente me gire un poquito para ver a través de la rendija de la puerta del baño, y me quedé sorprendido cuando la vi parada allí…en el baño de hombres, las manos posadas en las caderas con aquellos increíbles senos bien paraditos, arrogantes y pomposos, como esperando a que yo los viera. Me quedé sin palabras.

-¡Sal de allí, y métete aquí; no tenemos mucho tiempo y no quiero que nos descubran -dijo la mujer.

Giré la pequeña manija de la puerta y entré, asomándome por la puerta giratoria todavía haciéndome la paja. Cuando entré al área principal del baño de caballeros, ya me había aflojado los pantalones y dejé que cayeran al suelo, inclinado contra la puerta parado en la parte de afuera.

Pude haberme quedado tieso por lo que veía -sin poder hacer nada, lamentado que estuviéramos en un sitio en donde nos podían descubrir en cualquier momento, si alguien entraba…y no quité los ojos de aquellos pezones que tanto había imaginado en mi mente momentos antes cuando me pajeaba.

-Ya que me los has estado mirando todo el día, ahora puedes ver como son de verdad, sin sostenes -dijo.

Rápidamente se soltó algunos botones de la blusa abriéndosela para mostrar las tetas junto con un brasiere que casi no las podía sostener ni ocultar. Se soltó también el gancho delantero del sostén y luego se tomó un rato para cuidadosamente doblar las copas del sostén hacia dentro de la blusa a cada lado de la teta, sabiendo que esto le permitiría tocarse los bellos y maravillosos senos mientras yo miraba.
Lentamente, lo primero que hizo, sin ningún apuro desde que entró al baño de hombres, fue empujar la copa del sostén contra cada teta redonda y grande, presionándola mas para que quedara pegada a sus pechos y así lograr expandir toda la carne por encima y abajo de su pequeña mano. Luego la retiró para hacer lo mismo con la otra teta, la cual era también enorme con su pezoncito esculpido en la teta hasta formarlo perfectamente. Sobresalían entre dos dedos que los agarraban.

Si no me hubiera tomado demasiado tiempo acabar, le hubiera disparado mi carga de semen allí mismo, sin importarme en donde iba a caerle, pero yo estaba como hipnotizado por todo lo que estaba viendo. Ella dio un paso hacia delante y puso su mano sobre la mia, ayudándome a hacerme la paja..una vez, dos veces, y luego me agarró fuertemente el palpitante miembro y se puso a hacerlo ella sola, sin mi ayuda…aquel había sido siempre mi sueño…y se estaba haciendo realidad: su pequeña mano masajeándome a todo lo largo mi erecto y rígido palo.

Mi mano derecha la tenía libre y con la izquierda ya no me sostenía los pantalones para que no se me cayeran, así que agarré aquel trofeo frente a mi y me puse a tocar aquellos maravillosos pezones. Al mismo tiempo que yo movía los dedos índices desde la parte de abajo hacia arriba, recorría las tetas alrededor de aquellos interesantes, atractivos y seductores senos.

Ella gimió en voz baja cuando le restregué y acariciaba los carnosos pezones bien paraditos, sin detenerme, siempre dedicado por ellos para darles sus caricias. Ella seguía gimiendo y luego emitió un sonido como gutural, del interior de su garganta, un susurro dándome la orden:

-Mámamelos, mámamelos, coño!! Mánamelos ya mismo, quiero que me los chupen!!

Noté que había agarrado un buen ritmo haciéndome la paja y ahora me lo apretaba mas fuertemente y ya no tenía cuidado si me estaba lastimando. Colocó su pierna derecha alrededor de mi cadera, quedando pegada su piel desnuda contra la mia. Subió la pierna izquierda con su rodilla bien doblada para colocarla sobre mi otra cadera. Cuando le chupaba el pezón, mi boca lo atrapó firmemente entre los dientes para que no se me saliera y comencé a darle lamidas con la lengua, un baño de lengua en todos lo huequitos sensibles que tenía en ese pezón.

-Asssssiiiiiiiii!!! -dijo.

Me quedé callado, recordando lo que me decían cuando era un niño: “Nunca hables con la boca llena”

Intenté meterme toda la teta dentro de la boca, sintiendo el pezón como rozaba contra mi paladar, y luego me lo saqué para agarrarlo entre mis labios y dientes chupándo lo mas que podía.

En alguna parte de mi mente, estoy seguro, me estaban dictando los pasos a seguir…ya yo sabía que su falda azul marina estaba recogida alrededor de la cintura. Estoy seguro que una pequeña parte de mi cerebro sabía en donde estaba mi otra mano: bajando para quitarle las pantaletas!!...supongo que allí la tenía porque yo sólo sentía algo suave, su blanda carne y piel y unos pelos de la cuca mas suaves todavía, finos, rozando contra mi huevo cuando ella se lo llevó hacia la parte mas importante: su raja. Ella misma se la mantenía abierta y restregaba la cabeza del huevo en círculos alrededor del clítoris. Luego trató de acabar y no me importó si se lo tenía metido o no. Parecía que si. No me importó nada, o al menos no me di cuenta, y en un segundo abandoné el primer pezón y me puse a devorarme el otro. Esto parecía el paraíso terrenal, parecía estar en el cielo con los senos mas perfectos del mundo, unos pezones deliciosos, los mas ricos temblando dentro de mi boca. Su dueña trataba de respirar y se acariciaba la cuca con mi huevo, castigándose a se misma, agarrándolo con su propia mano.

De repente se puso rígida desde el tobillo hasta los cabellos y pude sentir sus músculos del abdomen apretarse, arremolinados, todos juntos, presionándome. En cierto momento se sacudió primero con movimiento lento, pero tan abruptamente, tan de repente, en una forma escabrosa, que tuve miedo de quitarle el pezón de una sola mordida, y comenzó a temblar. Puedo jurar que sus sacudidas comenzaron en mi boca, con su pezón adentro, y siguieron hasta su caja toráxica hasta el estómago.

Le agarré el culo con las dos manos, se lo apreté y comencé a bombearla lo mas duro y adentro en medio de sus contracciones y un ataque que parecía de epilepsia, …una…dos…y tres empujes bien fuertes y me empecé a retorcer y a dispararle chorros de leche!! En ese momento hubiera querido tenerlo bien duro para siempre para y darle duro en ese culo sin parar!!

Ella casi quedó sentada sobre mi huevo así como yo estaba inclinado y me le quedé mirando a los ojos y en un segundo me di cuenta de que ya no le estaba mamando aquellos increíbles pechos que parecían globos o enormes o esferas deliciosas. Eran unos ojos que me les quedé viendo como se abrían y cerraban con cada chorro de semen que le disparaba dentro de su sexo y ella tembló violentamente desde el ombligo hasta la rodilla, la cuca chupándome el huevo, jalándomelo mas hacia adentro para luego soltarlo inundandome con sus jugos.

Nunca había visto a una mujer acabar de esa manera, tan violentamente, con tanto ardor, con esa energía y arranque, y tener el orgasmo bien completo, consumado y saciada… nunca había visoto tampoco, ni mucho menos particirpar en ese tipo de sacudidas como terremotos que siempre deseaba tener en mi vida y que se notaba en su cara tan salvajemente, tan violentamente, como fuego –ponerse roja desde las tetas, unos ojos tan vivos por tanto placer- ni había sentido las sacudidas de una mujer con aquellas vibraciones en su cuerpo tan deliciosas (era la primera vez que yo había visto esto) sus músculos apretándose, flexionándose y luego relajar las nalgas de aquel culo…yo nunca había cogido ni tirado de esa manera.

Cuando se recuperó, lentamente, me miró…pestañeó y luego se pudo concentrar en mi y se dio cuenta que estaba conmigo. La levanté, ¡Ave María lo que sentí!! tan suavemente se separó haciendo que mi huevo retrocediera hasta salirse y quedar fuera de la cuca.

De manera violenta, cruel, se lo metí de nuevo, teniéndola todavía apretada contra mi, para que su cuerpo pudiera mantenerse de piel. Esto hizo que su hinchado clítoris quedara o rozando completamente contra todo el pene y miré como sus ojos pestañeaban en forma violenta y sentí como sus labios menores se hinchaban como olas…pero no me pidió que parara:

-¡Mira…” -colocó un dedo contra mis labios y movió la cabeza para que yo no dijera nada.

-Ahora…” -comenzó con mucho esfuerzo: … - Ahora tal vez podamos irnos seguir y seguir trabajando en la oficina.

Rapidamente se cerró la blusa, abotonada en su lugar mientras daba un paso atrás y dio la vuelta, desapareciendo, desapareciendo detrás del baño para hombres.

Yo todavía no salía de la sorpresa, pasmado y estupefacto. Esa pequeña parte de mi cerebro del cual les hablé al principio de esta historia, -la que nunca dejó de funcionar a pesar de las emociones y experiencias ateriores, pero siempre grabando todo- me dio una orden: hizo que yo revisara asomándome por la rendija del baño de mujeres pegado al mio y me di cuenta de que ella había entrado allí: se estaba aseando, lavándose la cuca. De repente me di cuenta de que yo todavía estaba parado en el medio de el area de los lavamanos con mis pantalones en el suelo y mi semi-parado huevo brillante, lustroso, como luminoso, que ya se secaba. Alguien podía entrar en ese momento.

Me lavé, sequé, subí los pantalones y me puse bien la correa, y al dar la vuelta para retirarme noté como una mancha de color en el suelo en el segundo baño. Al revisarla, descubrí un triángulo de tela mojado de un hilo de seda de color azul. Había olvidado sus pantaletas. Las olí un poquito y me las metí dentro del bolsillo.

-Ya es hora de irme a trabajar -pensé en voz alta. Pero dudo que pueda concentrarme.

FIN

Traducido por Marcos Urbina
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CUENTO ORIGINAL EN INGLÉS

Unexpected Quickie
by Marcos Urbina

My eyes are closed and I'm standing leaning back against the stall door. Etched on the insides of my eyelids were those nipples. Stroking myself slowly and longingly, running my fist the full length of my cock and sliding it just over the head and back, I was dragging the first tracings of pre-cum along the upper ridge and the hypersensitive glans underneath.

The air conditioning in Nikki's office was broken and running full blast! She had to be uncomfortable with those rock-hard, large dimpled nipples trying to desperately burst free of the silk shirt and flimsy bra she had chosen to wear today to work. Nikki had perfect breasts -- for my taste at least. Not so huge they needed mechanical support, but large enough to know you could almost, but not quite take one completely into your mouth at a time. But she had the thickest, round high nipples -- I like nipples high set on the breast not hanging pointing down at the ground -- I'd ever seen..well, or mostly seen thru her clothes.

Moaning softly, I can taste a nipple while I pretend that it's her hand, not mine. After I imagine tongue lashing those nipples and sucking them even harder and more pronounced -- they look like beautiful little plateaus set upon the most perfect, soft mounds in the world, then I will imagine Nikki straddling my hips and slowly engulfing me. So soft...so warm...

"Don't waste that!" It was softly spoken, but commanding nonetheless. Instinctively I turned slightly to see out thru the crack around the stall door and was stunned to see her standing there..in the men's room, hands on her hips and those incredible breasts standing proudly at attention before me. I couldn't speak.

"Come out here, we may not have long and I, for one, don't wish to get caught!" she said.

I turned the little latch and came out around the stall door without missing a stroke. As I entered the main area of the men's room I loosed my grip on my pants and let them fall to the floor as I leaned back against the stall door from the outside. I should have been shocked -- should have been worried about the trouble I might be in... but, I couldn't take my eyes from those nipples I'd been gazing in my minds eye just moments before.

"Since you've been gawking at them all day, you may as well see the real things and she quickly undid just a few buttons of the silk shirt pushing it open to the outside curves of the bra and the breasts it did little to support or hide. She popped open the front clasp and then took a moment to carefully fold the bra cups inside the shirt beside each breast knowing that this motion would allow her to touch those glorious breasts while I watched.

Slowly, the first thing she'd done without haste since she'd entered the room, she pushed the cup across each round soft mound pressing it close to her chest and expanding the flesh above and below her small hand and then as she pulled her hand away to move to the other she cragged her beautifully sculpted nails back across the breast until the nipple "?popped' free between two parted fingers.

Had I been further along in the process, I'd have shot my load right there without ever even seeing where it went, so hypnotized was I by the sights before me. Stepping forward she put her hand over mine and followed my strokes .. once, twice and then moved in to grasp my pulsing prick and taking over for me... it was like my dream coming true... her little hand massaging all along my rigid dick.

My right hand being freed from stroke duty and my left no longer holding my pants up, they moved freely to cup and fondle those magnificent tits. My thumbs moved simultaneously up from the inside lower edge just to and then traced all around those mesmerizing nipples. She moaned softly as I stroked her nipples and caressed her titty-flesh, never pausing her ministrations to my meat.

She moaned again and then hoarsely whisper-commanded me "Suck them dammit! Now! I need to be sucked!!" I noticed she had picked up the pace below and her grip was more demanding, less caress-ive as her right leg came up to rest against the outside of my thigh and it was naked skin to naked skin. Her left came up high bent at the knee to rest on my opposite hip.

And I sucked a nipple into my mouth grasped tightly between my teeth so it could never leave and began a tongue bath of every sensitive dimple!

"Yessssssssssssssssss." She said. I said nothing remembering the childhood instruction "?never to speak with my mouth full'. I tried to suck her entire tit into my mouth feeling the nipple drag along the ceiling of my mouth and then withdrew to hold the nipple between my lips and teeth with all the suction I could manage.

Some part of my mind, I'm sure was following the action externally...must have known that her navy skirt was bunched up around her waste. I'm sure some little part of my brain knew that her other hand had been busy lowering and then removing her panties...must have been... because there was only the feel of soft, yielding flesh and even softer sparse hairs brushing across my glans as she brought my against the foremost end of the crevice. She was holding herself open and rolling my dickhead in circles all around her clit. She intended to make herself come and didn't care if I made it inside or not, it seemed.

And I didn't care. I didn't care, or even consciously notice, because I was abandoning the first nipple and devouring the second. This was heaven as I understood it. The most perfect breasts, the most delicious nipples quivering against and inside my mouth. Their owner gasping as she teased and punished herself against my cock which was held in a hand other than my own!

"I.." she murmured against the side of my head, her lips just by my ear..her hot breath driving me even more crazed with my desire.. "want.." she was rocking her pelvis fully up against my hardness still outside her steaming pussyflesh.. "to.." pulling her chest backwards away from me - I thought to escape my mouth mauling, but it turned out she was stretching the nipple and mammary flesh to its max and knew I had to clamp down and hold on-- "cccuuuuuuuuuuuuuuuuummmmmmmm"...she softly screamed into my hair and cheek as she began to quake and shake from the very tip of her head to the quivering right knee that was trying to support her.

I pulled on one tit rolling the nipple between my thumb and fore finger and sucked the other until I thought it would come off and rode the quaking. My other hand was snaked around clutching her ass. Before she could stop rocking thru her orgasm, I lifted her slightly and she mindlessly aimed my prick at her sopping opening.

Plunging deeply inside I began my own rocking...I so desperately wanted her to never stop coming. She gasped deeply for air as she'd been holding her breath throughout her release. I abandoned her hand-held titty and grabbed her bent left leg to help support her high riding my cock. She kept one foot planted on the floor and began grinding back against my thrusting choosing the exact angle and speed of penetration. That was fine with me as long as I could dance splashing along inside her hole.

The more she recovered from the first orgasm, the more she began to take control until she was squeezing me inside -- the walls grasping and pulling at my erection with every thrust -- challenging me to withdraw. I didn't realize I'd abandoned my nipple adoration until she growled thru clenched teeth, "Don't you dare stop sucking!!!"

I plunged in deeply once out of rhythm and then grabbed the first tit between my teeth and sucked for all I was worth.

"Yesssssssssssss! Yesssss! Yes!" she whispered loudly now leaning back again and riding me with abandoned. All I could see was the soft white flesh of her throat and the white satin bra edge under the white silk blouse. I could feel myself swelling and my nut sack tightening.

Suddenly she went rigid from toe to hairline and I could feel her tummy muscles bunching up and pushing against me. She jerked once like in slow motion so abruptly that I feared I might bite her nipple right off, and then began a tremor that, I swear, started in my mouth and began to trail down over her ribcage toward her tummy.

I grabbed her ass in both hands, squeezed and began to pump my longest and hardest into her spasms...once..twice..and on the third pounding entry I began to twitch and spurt! At that moment I wished I could stay hard and pounding into that woman forever!

She nearly sat up on my cock and my leaning form and stared right into my eyes and I realized for the second time I'd abandoned those incredible breast orbs. I stared into eyes that widened and narrowed and widened and narrowed with each gism squirt into her sex and she trembled violently from navel to knee sucking at my cock and then releasing and flooding my pubes with her juices. Never had I seen a woman cumming so violently and so completely... never had I witnessed, much less been party to the kind of earth shaking lust that was so rampantly alive in her face - flushed to her upper breast ridge, eyes so alive yet unseeing - felt such rocking tremors through the delightfully (I was discovering) muscularly tight flexing and relaxing ass cheeks.. never felt so fully fucked in my life.

As her control slowly returned, she looked at me..blinked and then focused. I lifted her oh, so slightly and my receding cock slipped free. Viciously I began to slide her, still holding her tightly against me, down my body so that she could try to stand. This dragged her engorged clit down the full length of my penis and I watched her eyes flare and felt the little featherings of a small ripple... but she did not stop me.

"Than.." she put a finger against my lips and shook her head. I was not meant to speak.

"Now, " she began with considerable effort. ".. now, maybe we can get some work done." and she quickly closed her blouse holding it in place as she backed away and whirled, slipping out of the men's room door.

Still stunned, that little part of my brain I mentioned earlier - the one part never clouded by emotion or experience, but always recording - registered the women's room squeaking slightly in its opening next door and knew she was off to clean up. Suddenly realizing I was still standing in the middle of the sink area of a men's room, my pants on the floor and my semi-hard cock glazed and drying, I moved to clean myself up as quickly as possible, before someone might come in.

I washed, dried, covered and buckled up and turning to leave noticed a splash of color on the floor of the second stall in the room. Retrieving it I found the dampened triangle and strings of dark blue silky fabric. I sniffed them lightly before rumpling them and shoving them into a pocket.

"Get some work done" I thought aloud as I pushed against the door. I seriously doubted it.

END OF STORY