Hace tiempo que volví a mi ciudad natal, me habia ido a otro lugar a estudiar la universidad, tenia 18 años cuando me fui. Me gradué y ya tengo un tiempo administrando mi propio negocio. Hace un año recibí la invitación de mi familia, a la cual no habia visto en todo ese tiempo que estuve fuera, para celebrar los quince años de mi hermana menor, única hermana, a quien no habia visto desde hace aproximadamente 6 años cuando ella tenia 9 años. Mi negocio no requiere mi presencia física, ya que puede ser gestionado desde internet, asi que acepté la invitación gustoso.
Mi sorpresa y el inicio del problema fue al verla de nuevo, para mi asombro, me encontré con que mi hermana a sus 15 años ya estaba completamente hecha una mujer, desde que la ví supe que algo andaba mal en mí, puesto que no la miré con ojos de hermano, sino que la estaba inspeccionando de pies a cabeza como a cualquier otra mujer, era perfecta. Tenia todavia la piel suave como la de un bebé, un busto y trasero increibles, unas piernas largas y bien formadas, incluso pude ver lo perfectos que eran sus pies, tenia un grupo de lunares gusto entre los senos que se podian observar gracias a su revelador escote.
Todo iba bien, llegó el gran día de la fiesta y todos se estaban divirtiendo, hasta que mi hermana se me acercó preguntándome por mi madre, le dije que tenia rato sin verla y no sabia donde se habia metido, entonces me dijo que la siguiera a la cocina del salón para que la ayudara en algo. Al entrar un cerrar la puerta, me dijo que tenia un problema con su ropa interior, al parecer su sostén se habia desacomodado o algo así, y eso le incomodaba mucho, me dió la espalda y me dijo que le bajara el cierre y le sostuviera el vestido mientras ella acomodaba la situación, yo encantado de la vida lo hice. Mientras ella estaba resolviendo el problema yo pues estaba mirando y fue cuando pude verle el pezón de uno de sus pechos, no se si tenia frío, ya que era una noche helada, pero el pezón era uno de esos que sale totalmente, grande, largo de un color rosa, muy tierno y a la vez tan seductor, instantáneamente me excité mucho, no lo pude controlar. Desde ese día tuve fantasías con mi hermana, más específicamente con su pezón, ya que siempre me han gustado grandes.
Con el pretexto de querer pasar mas tiempo con mi familia, que si bien no era mentira, sino una verdad a medias, porque solo podía pensar en ver a mi hermana, me he estado quedando en casa de mis padres, quienes viajan mucho por sus negocios. Cada que tenia la oportunidad buscaba la ropa interior de mi hermana y me masturbaba con ella, me gustaba el olor que dejaba. Y asi pase aproximadamente un año viviendo con ella y fantaseando con ella. Hasta que un día, no se si decir "afortunadamente" o "desgraciadamente", mi fantasía se volvió realidad.
Llegué un día a la casa pensando que estaría solo, planeando ya entrar al cuarto de mi hermana a buscar algo con que fantasear, ya que mis padres habían salido una noche antes a un viaje de una semana. Pero me equivoqué, no estaba sólo, antes de entrar a su cuarto, noté que la puerta estaba entreabierta y pude ver la laptop de mi hermana encendida, por lo que me dediqué a ser lo más silencioso posible. Al entrar a la habitación encontre a mi hermana masturbándose frente a su computadora, ni por un segundo pensé en hacer ruido para que notara mi presencia, en lugar de eso segui mirando silenciosamente, no tenia intensiones de frenar su acto, eso fue hasta que note que se estaba masturbando con una foto en su laptop, que para mi sorpresa, era una foto mía de facebook que me habia tomado en la playa vistiendo solo unos shorts. En ese momento me quede congelado, no sabia que hacer, me armé de valor y después de algunos minutos decidí entrar a pedir explicasiones. Le hice saber de mi presencia, ella solo se me quedó mirando sin decir nada, yo no podia encontrar las palabras para pedirle explicasión, a lo que ella solo me empezó a decir que no se lo dijera a nadie, que haría lo que sea si yo guardaba el secreto, eso sinceramente, para mi significó perder el control de la situación. Entramos en un juego de: -¿en serio, lo que sea? -Sí, lo que sea. -a ver párate en un pie, levanta un brazo... y las cosas fueron subiendo de color: -Quítate los zapatos... ahora las medias... hace calor ¿por qué no te quitas la playera?... ¿me permites tu falda? quiero ver que talla usas... Y entonces teniéndola en solamente su ropa interior, viendo su espectacular figura, de veras que ahora si perdí el control. La tomé de la cintura y la arrojé a la cama, literalmente le arranqué la ropa interior y le di hasta que me cansé de una forma tan salvaje que llego el punto en que ella gemia de dolor. Ha pasado un año de eso y hemos tenido relaciones casi todos los días. Hoy tengo 26 años y ella 17, ha sido la mejor mujer que he tenido. Es tan increible que incluso después de un corto tiempo me permitió hacerle sexo anal. He pensado en volver a la ciudad con mi negocio, pero me tiene tan amarrado, no se si sea la tentación de lo prohibido o que, pero no me puedo alejar de ella.