Hola mis viciosos lectores, este es mi primer relato, es cien por ciento real. Les pido por favor, si tienen alguna crítica déjenla en los comentarios, me ayudarían mucho. Los personajes tendrán cambios de nombres por privacidad.

Hola mi nombre es Sofía, puedes llamarme Sofi. Hace ya tres días estoy en esta casa lujuriosa al lado de mi tío, ese hombre de verga enorme y pasional en la cama.

Pero bueno, antes de comenzar con lo rico de esta historia les comentaré por qué me he quedado con él estos días.

-¡Sofi!-. Ugh, esa es mi madre llamándome por tercera vez está mañana.

-¿Qué pasa mamá?- Le digo mientras salgo de mi cuarto poniéndome mi camisa. En esto me giro y miro a mi hermano menor mirándome con baba en la boca.

-¿Qué miras baboso?-. Le digo burlona. Él se queda perplejo y regresa a su cuarto. Me carcajeo y bajo las gradas de mi casa lo más rápido posible.

-¿Qué pasó ma, para que me llamabas?-. Le pregunto agarrando una manzana y sentándome en la mesa. Me mira por un segundo y le digo que por favor continúe, no tengo todo el día.

-Mira... hija. Tu padre ha recibido una llamada de la empresa. Tiene que viajar a un pueblo un poco lejano de aquí y vamos a aprovechar para llevar a tu hermano a que conozca las universidades que se localizan por allá, y tienes dos opciones: Faltar al colegio estos tres días (miércoles, jueves y viernes) O quedarte con el hermano de tu papá el tío Santiago, tú decides.

Mi cabeza ideó que todo tipo de cosas podían pasar si me quedaba con el tío Santiago. Dios... él fue el que le dio fruto a todas mis fantasías sexuales más locas y adrenalínicas. Lógicamente, ya saben lo que elegí.

-Ma, me parece excelente que aprovechen esta oportunidad para Mathías (mi hermano) pero realmente prefiero quedarme, no sólo porque sé que me aburrida mil, sino porque no quiero perder clases.- "Que buena labia Sofía y todo porque tu tío te culee" me dice mi conciencia. Me rio en mi interior y mi madre me manda a hacer mi maleta mientras le avisa a mi tío que en 30 minutos vamos para allá. Armo mi maleta con la mejor ropa interior que tengo, tangas negras, rojas, púrpuras, de encaje, lo mismo en mis brassieres. Ropa provocativa que resalten mis nalgas grandes y piernas anchas. Blusas que dejen al descubierto mi abdomen plano. Termino de empacar todo y me miro en el espejo de cuerpo completo que tengo en mi cuarto. Dios Sofía, tus ojos son expresivos y oscuros, tus labios anchos y rosados, tu nariz delgada y respingada con pequeñas pecas en ella... oh y tu cabello, largo hasta el inicio de tu espalda y negro. Y lo más bello de ti, tu cuerpo... tus hombros y espalda ligeramente anchos por la natación y tus brazos tonificados... tus senos redondos y levantados con una preciosa aureola café clara tan apetecibles. Tu abdomen plano, y tus piernas contorneadas y jugosas... y lo mejor de tu bello cuerpo tu culo esas voluptuosas nalgas tan agarrables y deliciosas...

-¡¡Sofía!! NOS VAMOS- Gritaron mis padres y mi hermano al unísono sacándole de mi trance.

30 minutos después...

Esta nerviosa, bastante a decir verdad. No sé qué podía esperar de mi guapo tío, pero aquí estábamos afuera de su casa a punto de tocar el timbre. Mi padre me miró extrañado preguntándome porque no había tocado el timbre, y llamo a la puerta. Mi tío salió con una camiseta negra pegada a su cuerpo, la cual ceñía su marcado y ancho pecho y apretaba sus enormes bíceps. Sus pantalones era de color negro igual, eran cortos un poco más bajo de la rodilla, dejando entrever una enorme pija y dos piernas musculosas. Su cara... Jesús, su cara... Moreno, ojos color verde esmeralda, su nariz aguileña y sus labios delgados... Su cabello negro y largo lo hacía ver como un maldito Dios Griego.

Saludo con mamá de beso y con papá y Matías de abrazo y apretón de manos... me vio y me levantó por los aires abrazándome, diciendo lo mucho que me había extrañado y lo mucho que he crecido. Entramos a su casa observando todo a nuestro al rededor. Nos sentamos en la sala, mi madre al lado de mi padre, mi hermano sólo en un sillón y mi tío y yo en otro juntos.

-¿Cómo así me dejan a esta niña estos días?.- mamá le explicó todo, durante unos 30 o 45 minutos charlaron y luego se despidieron de mi pidiendo que me comportara y que pronto nos veríamos.

Manos a la obra.

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Hola, porfa comenten si quieren que siga la historia, si quieren que la haga larga como resumiendo los tres días en varios capítulos o uno sólo largo.

Besos.