Mi nombre es Julian, tengo 21 años y soy de argentina. Soy un tipo alto (1,85mts) y fornido (86kg), pero bien formado, más bien cuerpo de rugbier.  Estoy en la universidad, soy un chico normal, nunca fui el más popular, pero siempre he sido súper social y he tenido muy buenos amigos. Mi éxito con las mujeres es algo relativo, siempre me fue fácil entablar una conversación, el problema era pasar de esa conversación a algo más. Si bien de vez en cuando en alguna fiesta besaba algunas mujeres, nunca pasaba de eso, mi primera novia fue a los 18, con quien tuve mi primera vez. 
Luego de 2 años juntos corte con mi ella, para rellenar el vacío, y ya acostumbrado a tener sexo al menos una vez con semana con mi novia, busqué donde descargar esa energía. Y la verdad es que no me fue tan mal; en el lapso de 1 año había tenido sexo con al menos 3 mujeres diferentes. Todas (o casi) eran mayores o muy cercanas a mi edad, experimentadas en el tema. Cualquiera diría: “Bien, a más experimentadas en el sexo, mejor”. Y si… la verdad es que me gustaba, pero no quería ser siempre yo el alumno, quería enseñarle a alguien.
Fue así como me empecé a obsesionar con chicas muchos más jóvenes, de entre 14 y 18 años, me calentaban muchísimo. Las de mi edad ya no me llamaban la atención. Veía a una chica del secundario de uno 16 años, con esas polleras y vestimentas de colegialas, y no me las podía sacar de la cabeza, tenía fantasías todos los días. Sabía que solo eran eso, en algún momento iban a pasar y me volverían a gustar las de mi edad. Además, era, al menos en mi sociedad, éticamente incorrecto que una mujercita de 15/16 años estuviera con un hombre de 21.
Todo eso cambiaria unos meses más tarde, con una experiencia que nunca olvidaré:

Hace ya varios años conocía a MARTINA (diría que la conozco desde que ella tenía 6), sus padres son amigos de mi padres y sus hermanos (mis tíos) desde niños. Desde chico me he criado con mis primos y Martina, si bien ella es casi 6 años más chica que yo, la podíamos integrar al grupo… ya que tengo algunos primos de su edad e intermedio entre la mía y la de ella. Siempre me pareció una nena muy bonita, pero nunca, hasta este año, me atrajo…. Era muy niña.
Por motivos de trabajo, los padres de Martina debieron irse a una ciudad a casi 1000km de la mía, por lo que… la última vez que la había visto ella tenía 11 años. 
No la vería hasta a principios de este año, sus padres volvieron por su trabajo a vivir de nuevo a mi ciudad. Para festejar decidimos juntarnos a comer y contarnos anécdotas después de años sin vernos. 
Cuando nos encontramos… lo primero que vi fue a Martina, no era para nada la que recordaba… Ya tenía 15 años (casi 16), era una mujer. Estaba simplemente HERMOSA. Es rubia ojos cafés, y todavía seguía conservando esa cara de nena inocente, pero ya tenía un cuerpo de infarto. Se notaba a simple vista sus tetas muy bien formadas, redonditas, y para volverme más loco... tenía una calza deportiva que le dejaba ver ese culito perfectamente formado (pues… ella era jugadora de tenis). Cuando nos vimos ella vino a abrazarme muy cariñosamente… apoyando esas hermosas tetas sobre mí. Ese momento me provocó una calentura gigantesca y me metió el bichito (que creía muerto) de la atracción a una menor.
En esa reunión hablamos de todo un poco, nos pusimos al día por decirlo de alguna manera, intercambiamos números de telefono… y nos fuimos a casa prometiendo otra juntada.
Después de unos días recibí un whatsapp, era Martina! 
Estuvimos días hablando de cosas irrelevantes, de nuestras vidas, riéndonos de cada cosa. Yo soñaba con ella, me la imaginaba desnuda, debo admitir que me masturbe bastantes veces con esa imagen. Un día decidí que debía dar al menos un pequeño paso, tirar un palo… como se dice por acá, para tantear si ella está interesada en mí. Reproduzco la conversación de whatsapp a continuación (no textual y algo resumida):

Martina: Y si… aburridísima estoy, me deje todos mis amigos allá
Julian: Y búscate un novio entonces jajaja
Martina: jajajajajaja cayate… que deje a mi novio alla!
Julian: jaja en serio??
Martina: siiii… corte con el antes de venir, me sentí re mal
Julian: Ufff feasoo
Martina: si… era mi primer novio encima 
Julian: Seguro vas a conseguir otro…
Martina: pff ni que fuera tan fácil
Julian:  En menos de un mes te conseguís uno, si sos una mina hermosa Martina
Martina: Jajajaj graciasss!
Martina: hablando de hermosos, vos??? Jajaj no estas de novio?
Julian: na… corte con ella el año pasado. 
Martina: Ahhhh jajajaj los dos estamos re pobres de cariño entonces!! Jajajajja
Julian: totalmente…
Ahí quedo la conversación, seguimos hablando de otra cosa… Al menos ahora sabía que a Martina la gustaba. Seguimos hablando por whatsapp, yo le seguí tirando algunos palos… No voy a seguir con eso especifico porque no termino el relato nunca.
 Un mes más tarde de la primera juntada decidimos volver a encontrarnos… con motivo del cumpleaños de mi primo (amigo de Martina). Mi primo cumplía 17… ya era un chico grande… por lo que el cumpleaños se trataba de comer un asado y pasar la noche de fiesta con multitud de bebidas alcohólicas…
La noche comenzó normal… todos hablando de cualquier cosa, divirtiéndonos… a medida fueron pasando los tragos todos nos pusimos algo borrachos, y como todos saben…  los borrachos son los más sinceros. Alrededor de las 2 de la madrugada, se habían armado 3 grupos de personas… entre los cuales uno era el de Martina, mi primo y yo… Estuvimos hablando como media hora. Mi primo… como anfitrión de la fiesta… se tuvo que levantar a hacer algunas cosas. Dejándonos a Martina y a mi solos. Yo sinceramente no sabía como proseguir… que paso tomar para excitar a Martina. 
Después de unos minutitos hablando, ella me propuso alejarnos un poco, pues, estábamos al lado de un parlante con música muy fuerte, y teníamos que gritar para entendernos. Nos fuimos al fondo de la casa a una hamaca paraguaya (es una especie de tela, colgada de las 2 puntas… formando una silla para 2 personas bien juntas). Sabía que ahí debería hacer mi jugada. Ahí nos pusimos a hablar:
Julian: che… te hago una pregunta? Todavía no conseguiste novio vos? 
Martina: ajajajja nooooo estoy aburridasa sin uno
Julian: jajajaj posta, yo también!! Además de que no cojo hace como 1 año (le llamamos cojer a hacer el amor)
Martina: jajajajaj posta que yo tampoco, estamos con falta de cariño los 2. 
Julian: Jajajaj es que tampoco es cuestión de buscarse a cualquiera, además de ser linda tiene que ser buena mina en mi caso.
Martina: Y siiii… a mí me gusta más que lo físico, es que sean buena gente, que sean graciosos, sinceros jaja
Julian: Se… a mi también, me atrae mas una mina graciosa que una mina linda.
Martina: jajajaj no me mientas!! Me vas a decir que no sos como el típico hombre que lo primero que ve es el cuerpo??
Julian: Bueno si… más o menos, si ves una mina que esta buena.. y es inteligente mejor.
Martina: a mi me llama mucho la atención la cara.. si un chico es lindo y bueno… le tiro con todo!!! Avos… del físico de una mujer que es lo que más te gusta? (me miro con una carita algo atrevida)
En ese momento decidí dar el todo por el todo, matar o morir. Estaba súper excitado, y tenía que hacer mi movimiento (era el momento ideal, ambos estábamos algo ebrios, habíamos perdido la vergüenza). Podría tener 2 consecuencias: O me comía una cachetada gigantesca… o lograba cumplir mi sueño de al menos besar a una nena más chica que yo.
Julian: Te soy sincero sincero?
Martina: siii dale!!
Julian: Las tetas! Me vuelven loco las tetas!!
Mientras le decía eso… lleve mi mano hacia sus tetas y comenze a acariciarlas por afuera.
Martina: mmm ya veo que te gustan jajaj, ami me gusta mucho tu boquita juli.

Sin decirme nada… comenzó a besarme muy suavemente, pero muy pasional. Yo ante eso me volví loco, y metí la mano debajo de su blusa, tocando esas preciosas tetas. Eran sorprendentemente grandes, redondas… y sus pezones estaban ya duritos. 
La situación se empezó a descontrolar… nos comenzamos a besar mas apasionadamente, llamábamos mucho la atención. 
En eso ella me dice:
Martina: Mmm que ricos besos juliii
Julian: uff como me volves locooo, esas tetas martiii
Martina: Vamos afuera, porque nos llegan a ver aca y nos matan!! Tengo muchas ganas de hacer más cositas con vos.
Disimuladamente salimos de la casa, caminamos 20 metros, la agarre del culo, la puse contra un arbusto y comenzamos a besarnos como nunca! Parecíamos desesperados… mis manos se apoderaron de todo el cuerpo de Martina, manoseaba esas tetas y ese culo, me volvía locoo!!!
comencé a acariciarle la conchita por fuera, ella respondió gimiendo muy despacio… sin dudarlo metí mi mano por debajo de su pantalón y comencé a masturbarla muy suavemente…. Su conchita era increíble, tenía apenas unos pelitos, y estaba súper húmeda….  Sentía que ella cada vez gemía mas… estaba totalmente excitada. En pleno éxtasis ella separo sus labios de los míos, y me susurro al oído: 
Martina: no sabes las ganas de hacer cositas con vos que tengo
Julian: mmm cositas como que??
Martina: No sabes las ganas que tengo de que me cojas todaaa!!
Julian: Decime dónde y te cojo ya… me volvés loco!
Martina: Vamos a casa, mis papis se fueron a un casamiento hasta tarde.
Su casa estaba a 4 cuadras de allí. Comenzamos a caminar mientras nos besábamos.
No habíamos hecho ni una cuadra que la agarre del culo nuevamente, la apoye contra una pared, y mientras nos besábamos la empecé a masturbar muy fuerte… ella gemía sin importarle nada. 
Martina: aiii no aguanto mas!!! Vamos corriendo a casa que sino te cojo acá!!!

Salimos corriendo, mientras ella reía, yo tenía una erección que me dolía al correr ajaja. 
Llegamos a la puerta de su casa, mientras ella intentaba poner la llave yo la tenía tomada por detrás, agarrado de sus tetas. 
Entramos y nos comenzamos a besar como locos, primero parados, luego nos fuimos hasta el sillón, ella se puso encima mío comenzó a refregarse contra mi verga mientras me besaba. Al notar que tenía una erección gigante comenzó a mover su cadera. Yo no podía más… necesitaba cogerla ya!! . Tome su remera y se la saque rápidamente, me volvía loco por chupar esas tan ansiadas tetas, saque su corpiño sin ni siquiera desabrocharlo. Quedaron al descubierto, no podía creer como una nena de apenas 15 años podía tener semejantes gomas. Digo sinceramente, nunca en ninguna mujer con la que había tenido sexo antes, había visto semejantes tetas!. Y eso que tiene 15 AÑOS. No cabían en mis manos (y eso que tengo manos grandes). Bien redonditas, sus pezones casi rosados estaban muy duros. 
Julian: ¡Que tetas preciosas gordita!!
Martina: mmm te gustan?
Julian: me vuelven loco nena, locoooo!!
Martina: quiero que me las chupes toditasss

Le hice caso y empecé a succionar esas tetas, ella me comenzó a besar el cuello mientras refregaba cada vez más su conchita contra mí (con el jean puesto aun). Metí mis manos por debajo de su jean,con una le tome el culo, mientras con la otra la masturbaba con 2 dedos, se notaba que estaba súper húmeda.
Ella seguía refregándose cada vez más contra mi pija. 
Martina: umm que dura que esta esa pija juliannnnn!!
Julian: vos me la pones dura pendeja putita
Martina: mmm jajajaja soy re putita! No sabes lo que te quiero comer esa pijaaa

ni bien termina de decir eso, se levanta, se arrodilla y me baja el pantalón con fuerza, dejando mi verga completamente al aire. Ella me miro algo sorprendida, mordiéndose los labios:
Martina: Que pijota gordooo, me la quiero comer toda.
Julian: Comela pendeja puta, cómela.
No quiero presumir… pero creo que tengo una pija de tamaño decente, de unos 18cm, bien gruesa y cabezona.
Comenzó lamiéndola por fuera, mientras me miraba con cara de atrevida, eso me ponía a 1000. De la nada se la metió toda en la boca, y comenzó a comerla mientras me masturbaba. Se notaba que no era muy experimentada, la chupaba como un helado. Aun así, me excitaba muchísimo ver esa carita de nena chupándomela. Así estuvo unos 3 minutos hasta que no aguante más… no quería acabar ahí, asique la agarre del culo, la acosté en el sillón y comencé a bajarle los pantalones lentamente… su bombachita rosada con corazoncitos blancos, estaba toda húmeda, me acerqué y comencé a mordérsela por encima, mientras le acariciaba el clítoris. 
Martina: Dale… no me dejes asiiii, cojeme yaaa!!
Julian: Espera pendeja… que tengo muchas ganas de chupar esa concha.
Le baje su bombachita hasta la mitad, y ahí quedó al descubierto esa preciosura, tal como me la había imaginado. Una conchita chiquita, con poco exceso de carne jajaja, y con el famoso bigote nazi por encima, UNA PRECIOSURA. Sin dudarlo sumergí mi boca en ese manjar, emanaba el perfume de mujer, en una nena de apenas 15 años! 
Comencé lentamente… chupando todo lo que podía, mientras acariciaba su precioso clítoris con el dedo mayor. Note que ella empezaba a gemir, eso me volvía totalmente loco. Empecé a aumentar el ritmo, así también se incrementaron sus gemidos. Paré un momento y pregunté:
Julian: Te gusta putita?? 
con la voz algo quebrada me responde:
Martina: me encanta gordo, estoy loca por vos!
Cuando me dijo eso, me encendió aún más. Bajé de nuevo y empecé a chupársela con fuerza, mientras le metía 2 dedos en su conchita. Ella gemía como una loca, ya no le importaba nada, su conchita se humedecía cada vez más. Llego un punto que sus gemidos eran dignos de película porno. Luego de 1 minuto… su espalda se arqueo, sus piernas comenzaron a temblar. Ahí le metí un tercer dedo, la masturbaba y chupaba esa concha con furia. Comenzó a tener espasmos incontrolables, mientras gemía como una loca, estaba teniendo un gigantesco orgasmo.
Martina: Mmm ahhhhh
Julian: veni, te voy a cagar cogiendo putita.
Martina: mmm soy toda tuya gordooo!
En esa misma posición, le apoyé la pija por fuera y la comencé a refregar… su conchita se hacía agua. Quise jugar un poco con ella, calentarla… Pero luego de unos segundos… ella me agarro de la verga, y la dirigió hacia su conchita, estaba desesperada por que se la meta. Todo fue muy lento, ella sonreía con cara de atrevida… mientras yo, la penetraba cada vez más profundo. Su conchita estaba súper apretada, pues… ella solo había tenido sexo previamente con su anterior novio, y hace varios meses que no había acción. Sentí como me apretaba la verga, ella solo me sonreía y gemía un poco. De a poquito empezamos a aumentar el ritmo, con las ganas que tenia de cogerme a esa nena, me tuve que aguantar las ganas de darle a un ritmo frenético… Preferí darle lentamente… mientras tocaba su clítoris. Si notaba que a ella le gustaba y se sentía cómoda, subía un poquito la velocidad. Pasaron unos segundos, y note que ella estaba cada vez más excitada, empezaba a gemir fuertemente. Ahí puse una mano en sus tetas, y el dedo con el que había tocado su clítoris, en su boca… y empecé a embestirla con más fuerza. Ella gemía de placer cada vez más (calculo que alguno de sus vecinos se habrá enterado jajajaj). Yo estaba excitadísimo… y cada vez le daba más fuerte. En un momento sentí que me tomaba del brazo, sus piernas se enredaban en mi cintura y su cuerpo empezaba a temblar.
Martina: ahhh ahhh haceme acabar dale gordooo
No termino de decir eso… que se le quebró la voz, y siguió de un gemido espectacular. Ante esa escena, yo no aguante más, saque justo a tiempo la pija y le acabe en las tetas. 
Ambos nos mirábamos y sonreíamos, ella tenía una cara de satisfacción que creo nunca vi en nadie.
Martina: Te amo juli
Julian: que hermosa que sos gordita
Martina: uff te juro que nunca disfrute tanto en mi vida, me vuelvo loco por esa pija. 
La agarré de los cachetes, la llevé hacia mi boca, y le di un beso gigante. Esos en lo que las lenguas se vuelven locas, las manos no saben dónde tocar. 
La excitación seguía, seguimos besándonos y acariciándonos por lo que a mí me pareció 1 hora (aunque seguramente no fueron más de 10 minutos). 
Entre esos besos, ella me susurro al oído:
Martina: mm quiero que me la chupes de nuevo la concha
Julian: mmm pero si vos me la chupas a mí también, sino no es justo jajaj
Martina: jajajaj y como vamos a hacer?? 
Julian: Mmm no sabes nada de sexo nenita… déjame que te enseño
La levante… ella se puso encima mío, apoyo ese manjar de conchita en mi cara, se recostó sobre mi… y empezamos a hacer un 69. 
Yo… algo más experimentado que ella, conocía los puntos débiles de una mujer, mientras chupaba, metía 2 dedos y la masturbaba, y con el pulgar le acariciaba el clítoris, ella, gemía… pero su boca estaba tapada con mi pija. Todos sus jugos se chorreaban, su conchita estaba lista para otra cogida.
Se levantó… y se sentó sobre mi pija, esta vez no hubo nada de suavidad, la tome de la cadera… y le dije “salta puta, salta! Putita!”. Ella me hizo caso… y empezó a “galopar”. 
Era una escena simplemente increíble, una nena de 15 hermosa, rubia, con cara de ángel, encima mío… y con sus tetas rebotando. Parecía un sueño… no podía creer que estuviera sucediendo realmente. 
Le metí una cachetada en el culo, la agarre con fuerza de la cintura, y empeze a darle con fuerza, ella gemia descontrolada, yo también… estábamos como locos, asi fueron 30 segundos hasta que ninguno dio mas, ella se tiro encima mio, y nos empezamos a besar.
Martina: ahh  aha ha ahhhhh acabame adentro gordoo!
la abracé con fuerza… y sentí que sus piernas se aflojaban, y su conchita me apretaba. Ella saco un gemido desde lo más profundo de su ser, casi al mismo tiempo yo también… y acabé dentro de ella. Fue probablemente la mejor acabada de mi vida. 
Sin decirnos una palabra, nos miramos a la cara, aun abrazados, y los 2 nos empezamos a reír. 
Ambos habíamos tenido el mejor sexo de nuestras vidas, estábamos en el paraíso. Estuvimos unos 5 minutos así. Antes de darnos cuenta, eran las 5 de la madrugada. Sus padres debían llegar antes de las 6. Nos metimos a bañar juntos, estábamos súper transpirados después de tanta acción. Mientras nos bañábamos: 
Julian: ¿Te gustó gordita?? 
Martina: me encanto juli, estoy loca por vos jajjaja
Julian: Yo también nena, sos preciosa.
Martina: Bueno, pero prométeme que esto no queda acá. Después de esto me hice re adicta a coger con vos jajajaja
Julian: Te prometo que esta es la primera de muchas… 

Salimos de bañarnos, nos cambiamos. Y ya era hora de irme. Ella me despidió con un beso hermoso, a lo que yo respondí con un manotazo en el culo. 
Martina: jajaja te amo Juli, te hablo mañana.
Julian: dale… hablamos mañana, te quiero mucho nenita.
Lo cierto es que no se si era amor, lo único cierto era que estaba loco por esa pendeja, por cojerla, por besarla.
Tal como dijimos… al dia siguiente ya estábamos hablando por whatsapp y organizando nuestra próxima aventura (que en un próximo relato contaré).