Lo tenía todo igualmente tenía toda la dicha cómo prosperidad, especialmente un grandioso matrimonio qué me regocija hasta colma; sobre todo alegra con dos preciosos niños adorables, preciosos, geniales, amorosos, maravillosos, y por supuestos hermosos. Qué lo hereden obvia y claramente de mí, que los lleve nueve meses en mí vientre gestándolos que nacieron de mis entrañas realizándome en mí rol de madre hoy día.

Tengo un genial, súper, chévere, productivo hasta excelente además espectacular, inclusive perfecto trabajo hasta lo amo. Ya que puedo desarrollarme, asimismo gustarme tanto qué fue lo que originariamente decidí estudiar en mis años de universidad, qué me costó mucho lograrlo y obtenerlo con mucha dificultades adversas; pero lo supere satisfactoriamente que viéndolo desde una óptica prácticamente disfruto de una estable posición económica, familiar, profesional y asimismo personalmente dándome mis consentimientos, y por supuesto lujos a mi estilo de vida hoy día.

Todo marcha con precisión cómo una maquinaria de reloj; de repente sin darme cuenta, ni siquiera verlo venir, ni tampoco lo imagine de la noche a la mañana, y que poco a poco surgía distanciamiento desde simples hasta tremendas situaciones tanto discusiones, altercados, peleas, celos, envidias, habladurías, y por supuesto, indiferencias evidentes e irreconciliables entre mi esposo y yo. Qué luego de diecinueve años de matrimonio firmamos los documentos legales de nuestro divorcio, luego protagonice momentos difíciles de mucha tristeza también desgastadas en que caí profundamente en una devastación crónica de amor propio; echándome claramente toda la culpa de haber llegado a no atenderlo al máximo concretándome a mi trabajo y solamente a mis hijos; apagándose el fuego del amor que nos tuvimos uno por el otro poco a poco sin darme cuenta de que estábamos marchitándose, secándose y dejándolo morir completamente frente a mí nuestra relación conyugal cómo marital.

Dedicada al cien por ciento dando todo hasta el cansancio en cuerpo y alma a enterrarme y quedarme en la rutina entre mis hijos y mí trabajo que me mantenía ocupada para no caerme deprimida y agobiarme la existencia mía.  Que deje en segundo plano el amor, inclusive, inventaba una serie de trabas zafándome de invitaciones a salir con colaboradores y amigos; porque no quería arruinarlas cómo fue mí matrimonio, castigándome al reprimirme y negarme igualmente cerrarme rotundamente bajo siete candados mi situación sentimental y de corazón hoy día.

Una ocasión que entable asimismo acepte la amistad en redes sociales de un amigo cercano qué tuve el agrado de conocernos cómo laborar en mi primer trabajo; que tenía tiempo que no sabía nada de él conversamos todas las noches entreteniéndome y desahogarme que me hace mucho bien sentirme genialísima, queridísima, valorad sima, renovadísima, mejoradísima, importantísima, amadísima, deseadísima, deleitadisima, encantadísima, fabulosisima, fascinadisima, hermosísima, simpatiquísima, atractivísima, naturalísima, hasta apagad sima, y por supuesto tristona en que se me nota en mí propia mirada cómo expresiones faciales sobretodo en mí ánimo y carácter también hablando. Dándome su apoyo desinteresado cómo hombro para desahogarme cómo llorar con mucha fuerza, ganas, señas marcadas en mi rostro en persona cómo en vivo y a todo color; en qué tanto insistirme y recalcármelo además diciéndomelo le hago caso al salir y encontrármelo con él en varios lugares y oportunidades qué me transforma en otra mujer llena de ilusiones, emociones, deseos, alegrías, pasiones, sentimientos y abriendo nuevamente mí corazón que lo tenía condenado de por vida a la soledad y amargura.

Mi amigo comenzó a llenarme de mucho cariño y consentirme con faldas cuerina de todos los tipos acompañados con juegos de blusas, chaquetas, suéteres, camisas, sacos, bléiseres, chamarras, vestidos, etcétera que innovo y mejoro mi vestuario y presencia hasta mi autoestima de salida de noche y en mi trabajo que tenía tiempo que no lo tomaba para mí sola siendo un alivio des estresante de la misma rutina del trabajo a mi hogar y viceversa hoy día.

Encantadora estoy y agradeciéndoselo profunda cómo viva hasta afloradamente en persona cómo en vivo y a todo color por encargarse de sacarme del hueco donde me hundí cómo me encontraba finalmente percibió que me quiere más allá de ser los mejores amigos hoy día él y yo. Sin compromiso ni comprometerme acepto ser su amiga especial en que nos acostamos en la intimidad juntos y asolas para amarnos y querernos hasta adorarnos especialmente conocernos otras experiencias sexuales que nunca probé al ser una prostituta en que me agrada sentirlo también hacerlo y saborearlo adicionalmente zacearlo, incitarlo, provocarlo, seducirlo, cautivarlo, hasta calentarlo, incluso cogerme, follarme, hurgarme, mamarme, y cabalgarme a mi mejor amigo solamente con él hoy día.