Me levanté a las 5 de la mañana, o mejor dicho el despertador lo hizo, para irme junto con un primo y un amigo al rancho de mi tía Esther; con mucho trabajo me bañé, desayuné y eché alguna ropa a la mochila porque pasaríamos allá unos días el Joel (un vecino), mi primo Beto y yo. Mi tía Esther estaba sola porque mi tío había ido unos días al "otro lado" (Estados Unidos), así que llamó para la casa a invitarnos a pasar allá unos días ya que estábamos de vacaciones, pero mi mamá y mi tía no podían ir aún porque tenían un compromiso, 3 días después nos alcanzarían.

Por fin llegaron mi amigo y mi primo a las 6:30 y mi mamá nos llevó a agarrar el camión que nos dejaría en el rancho. Estas vacaciones prometían ser divertidas, ya que en el rancho donde vive mi tía hay río y era tiempo de lluvia, además que allá nos la pasábamos todo el día de vagos, así que íbamos muy felices los 3, ansiosos por llegar al ranchito. Mi mamá no se fue hasta que el camión partió, ya hemos ido antes por eso es que nos dejaba irnos solos, de todas formas llegando allá teníamos que hablarle por teléfono.

Cuando nos subimos al camión venía medio solo, nos sentamos hasta atrás uno en cada asiento con ventana, veníamos bien a gusto platicando y haciendo bromas, pero poco a poco el camión se fue llenando, en ese entonces había mucho movimiento para aquel rumbo porque estaban las fiestas de El Tomate, así se llamaba el rancho aquél, total que el camión se llenó y a cada quien le tocó ir sentado con alguien más, a mi me tocó suerte ya que la señora que se sentó a mi lado estaba algo gordita y su pierna quedó pegada a la mía, en ese entonces con eso tenía para ir fantaseando, no me importaba que la señora no estuviera buena, a mis 15 años cualquier mujer me excitaba. Todo el camino fui moviendo mi pierna disimuladamente para calentarme, la señora como que se dio cuenta o no sé pero se comenzó a pegar más a mí para complacerme yo creo, se veía divertida, hasta me sacó platica:

Qué calor hace verda’ hijo?

Sí, está muy fuerte oiga – dije echándome aire con las manos y con la boca.

Para dónde vas? –

Hasta El Tomate y usted?

Aquí nomás a La Palma, un ranchito antes de llegar al Tomate

Ha llovido mucho por estos rumbos? –

Sí, ha llovido bastante pero el calorón no se quita ve como estoy toda sudada – dijo bajándose un poco una blusa amarilla de tela delgada, dejándome ver el comienzo de unas tetas que se veían grandes pero no muy duras.

Si, yo también me estoy muriendo de calor

Todavía falta media hora para llegar hijo, sentí como me arrepegabas la pierna….cuantos años tienes? – soltó una sonrisa pícara.

15 acabo de cumplir hace un mes

No pos si tu estas en la mera edad…te gustan las mujeres verdad?

Si

Mira, nomás porque me caíste bien me voy a poner esta bolsa aquí en las piernas y me metes mano si quieres, al cabo que aquí hasta atrás nadie nos ve – dijo colocándose una bolsa grande con despensa que estaba en el piso, pero antes de ponérsela bien en su vientre, con una mano se estiró el elástico de la falda y yo metí la mano.

Comencé a sentir por primera vez lo que era tocar una pepa, aunque sea solo por encima del calzón que llevaba, no sabía qué hacer solo la palpaba con toda mi mano extendida, también le tocaba un poco la entrepierna sudada. Estuve agasajándola cerca de 5 minutos cuando se acerca y me dice en el oído:

Quieres tocarla de verdad?

Sí – dije un poco tímido.

Bueno pues, saca la mano y esperame tantito – dijo inclinándose para adelante y subiendo su falda larga por detrás, no lo podía creer, la señora se estaba quitando el calzón! Eso me excitó mucho, yo creo que la señora o no tenía marido o ni estaba casada, no era muy bonita que digamos, pero todo ese ambiente me excitaba a mas no poder, aparte en aquellos tiempos cualquier cosa me ponía a mil. Se agarró el calzón de los lados y comenzó a bajárselo rápido, apenas alcancé a verle las nalgotas porque de nuevo se incorporó al asiento y se bajó la falda.

Ahora si, mete la mano chiquillo

Metí de nuevo la mano y enseguida toqué una gran mata de pelos, los tenía algo largos y gruesos, me puse a buscarle la rajita hasta que la encontré y se la abrí, metí mi dedo índice como pude, luego me di cuenta que el de en medio era el mas práctico para entrar, aparte estaba mas largo. Ella se comenzó a mover en su asiento, daba leves empujones hacia delante, nadie se dio cuenta de lo mucho que estaba gozando la señora conmigo, al menos eso pensaba yo. De nuevo acercó su boca a mi oído y me dijo:

Mira, tócame ahí donde comienza la panocha, en la pura entrada, mueve la mano como si estuvieras haciendo círculos

Y así lo hice, obedecí a la señora tal como me lo indicó, estuve manoseándola todo el camino y ya casi estaba por bajarse, faltaba cuando mucho 5 minutos para que llegara a su rancho cuando me pidió que yo me sacara el "pipi", yo de volada saqué mi mano de donde la tenía y me bajé el short lo suficiente para dejarle mi pene en sus manos, ella rápidamente lo agarró con una mano y me hizo una puñeta espectacular, no dure ni los 5 minutos para acabar, ella agarró todo mi semen sin dejar que cayera al suelo y se lo untó dentro de la blusa

- Me llevaré este recuerdito para llegar a mi casa a dedearme –

Se bajó del "RanchoBus", no solo ella sino también más gente y el camión quedó medio solo por lo cual les conté a mis amigos lo que me acababa de suceder, ellos entusiasmados me pidieron que les dejara olerme la mano, esa fue la prueba de que no estaba mintiendo.

Por fin después de una hora de camino llegamos a la casa de mi tía, ya iban a ser las ocho y nos invitó a desayunar pero yo ya había desayunado en mi casa así que me puse a ver la tele mientras ellos comían. Venía entusiasmado por lo que me había pasado, así que mas que ver la tele estaba viendo a la señora, sintiendo su pepa en mis dedos, imaginándome lo que se ha de sentir tener sexo.

Cuando terminaron de desayunar nos fuimos a bañar al río y de ahí a cortar guayabas, el resto de la tarde anduvimos por ahí paseándonos, jugando fútbol y comiendo guayabas. Nos metimos a la casa ya casi de noche, mi tía nos hizo de cenar frijolitos con queso fresco, estaban deliciosos, después de cenar nos pusimos todos a ver una telenovela en la sala (mi tía no dejaba que le cambiáramos) y después de que se acabó nos hizo un tendido en el piso para que ahí durmiéramos y se fue a bañar mientras nosotros nos quedamos platicando en nuestro tendido, cuando salió del baño no se veía nada mal, a sus cuarentaytantos años se le notaba todavía un buen culo aunque no muy grande y las tetas no se le veían tan caídas, esas si las tenía algo grandecitas, mas que su culo por lo que se veía un poco desproporcionada, tetona y sexy, llevaba puesto un shorsito y una camiseta blanca que le quedaba un poco apretada lo que hacía que se le notaran sus morenos pezones.

Ya duérmanse niños ya es tarde – nos dijo, y apagó la luz y se fue a su cuarto.

Le viste los pezones a mi tía? Se le veían regrandes!

Cállate es mi tía, si te llegara a oír mi tío te cuelga

Mmm pero ahorita no está! Apoco no tiene buenas chichis mi tía mario??

Pues la verdad que sí, le quedaba apretadita la camiseta jajaja

Ya sé, se me ocurre algo…que tal si nos ponemos a platicar en voz alta para que mi tía venga a regañarnos y verla otra vez?

Todos aceptamos y nos pusimos a contar chistes y a hacer ruido por lo que mi tía salió algo enfadada (es un poco enojona) de la recamara y prendió la luz, nos pidió que nos calláramos o nos mandaba al patio, mientras ella nos regañaba nosotros embobados le veíamos las tetas, ella al darse cuenta se tapó y se fue de nuevo a dormir, advirtiéndonos que si volvíamos a hacer ruido nos mandaba al patio.

Antes de dormirnos cada quien se la jaló en la oscuridad en honor a mi tía, jugamos a ver quien acababa mas rápido y Mario nos ganó. Ya que los 3 terminamos el problema ahora era dónde íbamos a echar los mecos, a fin de cuentas terminamos embarrándolos en el piso debajo de las cobijas.

A la mañana siguiente levantamos y doblamos las cobijas y mi tía las guardó, nos preguntó por qué tenían esas manchas pero le dijimos que no sabíamos, que a lo mejor el piso estaba manchado antes de que pusiéramos las cobijas. Yo creo que no se lo creyó, no la vi muy convencida.

Después del desayuno, los clásicos huevos con jamón, nos fuimos otra vez al río y volvimos hasta la hora de la comida. Mi tía nos pidió que nos cambiáramos para comer, Beto fue hacia el baño a cambiarse de ropa mientras nosotros esperábamos afuera nuestro turno, pero se estaba tardando mucho y como allá había de puerta nada mas que una cortina mi tía entró sin avisar y lo cachó con las manos en la masa, masturbándose. El rápido se puso la ropa y se salió, mi tía no le dijo nada. Después de que nos cambiamos y comimos, nos pusimos a jugar a las Damas Chinas (fichitas) y así pasamos la tarde.

En la noche de nuevo tendimos las cobijas y nos acostamos, Daniel nos confesó lo que había pasado y los 3 coincidimos en intentar cogernos a nuestra tía, o por lo menos tocarla un poco, ya que a los 3 nos llamaban mucho la atención sus hermosas tetas. Nos pusimos a ver cómo podíamos hacerle y después de un rato hicimos un plan, decidimos entrar los 3 al cuarto de mi tía y decirle que estábamos escuchando ruidos en la sala y que nos daba miedo (eso era inventado, pero actuamos de maravilla) que si nos dejaba dormir ahí con ella.

Que miedosos son, a ver acomodense ahí pues

Su cama era king size así que nos acomodamos en la misma cama que ella en el siguiente orden: primero mi primo, luego el Joel, mi tía y al ultimo yo (a mi tía no le gustaba dormir en las orillas, eso nos dijo). Cabe mencionar que esta vez mi tía llevaba una bata blanca y parecía que no llevaba nada abajo.

Ya que se apagó la luz todos nos quedamos callados, supuestamente dormidos, hasta que escuchamos roncar (despacito) a mi tía, fue entonces cuando le comenzamos a tocar de uno por uno las nalgas a mi tía, todos estábamos excitadísimos y con el pene de fuera haciéndonos una gran manuela (paja); como mi tía estaba de lado volteando hacia mí, pues solo yo podía tocarle las tetas, y así lo hice por encima de su bata, pero mi primo y mi amigo lógicamente se murieron de envidia así que se bajaron de la cama y se pusieron también a tocárselas, esto los excitó demasiado al igual que a mi, no nos dábamos cuenta pero cada vez le tocábamos con mas fuerza las tetas y el culo a mi tía, hasta que comenzó a moverse y todos nos quedábamos quietos pero cuando ya no se movía nosotros le seguíamos agarrando, pero en una de esas mi tía se levantó como asustada y prendió la luz., todos rápidamente nos guardamos nuestras vergas pero mi tía si se dio cuenta de lo que hacíamos y se puso a regañarnos terriblemente, nosotros no sabíamos ni qué decir después del tremendo regaño, estábamos muy asustados y mi tía se percató de esto así que se tornó un poco mas suave y nos preguntó:

Por qué hacen esto muchachos? Esto no se debe de hacer y menos con una tía…está bien que están creciendo y todo, los comprendo, pero deben esperar a que les llegue el momento de conocer, no deben apresurarse tanto… no se pudieron resistir ante mis encantos o que?? – nos dijo ya mas calmada y bromeando

Pues…la verdad no señora – dijo mi amigo

Es que se nos hizo fácil, aparte no tendríamos otra oportunidad mas que esta

Aparte tu conoces mas de esto que nosotros, tu nos podrías enseñar tía

Están locos, son unos pinches calientes, las manchas de ayer eran mecos verdad cabrones? Los voy a poner a lavarlas…en qué estaban pensando cuando se la jalaban? – a mi tía como que se ya se le había quitado el sueño.

La verdad es que los 3 pensabamos en usted porque nos calentó mucho la camisita que traía ayer al acostarse, esa es la verdad señora –

Es cierto eso sobrinos?-

Si tía, con eso se nos paró devolada

Jajaja de verdad que no tienen vergüenza ustedes, como ya me agasajaron ahora quiero que se la jalen frente a mí hijos de la chingada

Pero tía…

Ningún "pero" cabrones, bajense las trusas o les digo a mis hermanas lo que andaban haciendo –

Mi tía parecía que se estaba vengando de nosotros, no estaba tan enojada, su tono de voz no era tan fuerte, más bien se veía como relajada…pensativa…atenta. Nos bajamos la ropa interior y nuestras vergas estaban flácidas ante aquel regaño y aquella situación, ahora era ella la que nos pedía que nos masturbáramos y no nosotros mismos…

No que muy calientes? O quieren que les ayude?... – se salió del cuarto y volvió con la bata enredada en la cintura y las chichotas de fuera, con esa visión se nos puso durisima.

Era lo que querían ver no? Pues aquí estan – dijo moviendolas de un lado para otro, sacudiendolas

Mmmm tía te ves bien sexy – dijo mi primo

Como quisiera tocarlas – dijo después mi amigo…

Cuando terminen de Jalarsela yo haré que se les pare de nuevo, al que se le pare otra vez recibirá su premio, el que no pues lo siento.

Nos va a dejar tocarselas?

Los voy a dejar CHUPARMELAS!!!!

Cuando terminamos de hacernos la manuela mi tía se acercó primero a mi primo y le puso las tetas en la cara, aquello parecía un sueño, solo de estarlo viendo ya la tenía tiesa de nuevo, ya quería que fuera mi turno de besar aquellas grandes tetas en todos los aspectos. Después de un ratito de restregarle las tetas en su cara, a mi primo si se le paró..

Ahorita van a ver, querían conocer el sexo, pues lo van a conocer…esperate tantito Beto no te me vayas a chorrear antes de tiempo, ahora voy con tu primo

Y se dirigió hacia a mi e igual que mi primo me puse a chuparle las tetas como bebé, no me importó que ya antes mi primo se las hubiera babeado, estaban exquisitas, las tocaba, las apachurraba no sabía ni que hacer con ellas, pasé mi lengua por en medio de ellas, por el pezón….fue un gran banquete

Ahora vas tu Joel, si llegas a comentarle de esto a alguien te las verás con mis sobrinos….verdad mijos?

Como cree señora…yo no diré nada a nadie

Eso espero…. – y le puso las tetas en la cara, no podíamos creerlo, mi tía estaba dejándonos mamarle las tetas, era toda una fantasía para nosotros, era lo mas grandioso que nos había pasado en unas vacaciones.

Ya que terminó con el Joel, nos dijo que no había problemas en acabar dentro de ella, que eso era lo que quería (mi tía no tenía hijos no porque no haya querido tenerlos sino porque no podía).

Bueno pues, quien va a ser primero?

Todos – dijo el Joel

Como que todos? – preguntó intrigada mi tía

Si, uno la mete por enfrente, otro por atrás….y el otro… - se quedó pensando

Al otro se la mamó – dijo la caliente de mi tía

Yo quiero el culo dijo el beto colocandose atrás de mi tía

Yo la panocha le dije agarrandola por la cintura

Y yo nunca la voy a meter? - Dijo el Joel.

Si, ya que me la meta un rato te cambio de lugar…- le dije

Nos subimos a la cama y no encontrabamos como acomodarnos, hasta que nos dijo el Joel como, dijo que en una película porno había visto esa posición. yo me puse abajo, mi tía a gatas y mientras yo me la cogía por la pepa el otro se la iba a coger de perrito. Mi tía ya para ese entonces estaba muy lubricada, le brillaba la pepa cuando se la abrió con la mano para que introdujera mi pene, tenía muchos pelos y eso me excitaba mas, comencé primero que mi primo con la embestida, nos la ingeniamos poniendo debajo de mí almohadas para quedar a la altura de la pepa de mi tía, mientras yo ya estaba con el mete y saca, mi primo aún no podía metérsela por el culo y a mi amigo ya se la estaban mamando pero mejor quiso esperarse para sentirla dentro de la rajita de mi tía, mi tía le dijo que estaba bien y dejó de mamarsela.

Tía no puedo meterla, no cabe

A como de que no cabe…abreme el culo con las manos, mi viejo ya me la ha metido y la tiene mas grande que tu

Mmmm ya casi, ya entró la cabeza…

Empujale, ahorita que entre toda ya comienzas a cogerme bien

Tratando de no perturbar a mi primo y con la ayuda de mi amigo me salí como pude de donde estaba porque no quería chorrearme sin antes conocer que se sentía una mamada, así que me puse frente a mi tía y le dije que ya no iba a aguantar mucho, que desde hace rato me estaba aguantando. Ella me dijo que no me preocupara, que le gustaba la leche que se la diera en la boca. Mientras tanto el Joel se puso abajo de mi tía y se vino dentro de ella.

Ahh que rico sentí Doña Esther

Yo también mi vida, pero salte para que también el beto me coja por aquí, tu si quieres mientras agarrame las nalgas.

El beto se la sacó del culo y se puso debajo de mi tía y comenzó a cogerla con fuerza, el era el que mas había aguantado, tal vez tenía mas experiencia (con las puñetas claro) porque tenía 16 años y nosotros 15, mi tía parecía gozar porque gemía mientras se la cogían y mientras me la mamaba…yo me comencé a excitar mas con esos gemiditos y no aguanté mas y me vine en su boca, pensé que se iba a tragar mis mecos pero los devolvió y el pene me quedó todo mojado.

Ay betito…que rico me coges mijo, vamos dame más no te chorrees todavía

No se cuanto más vaya a aguantar tía, estas bien buena

Mmmm… metanmela en el culo uno de ustedes

Te voy a meter los dedos

Como sea, quiero sentir en las dos partes

Agarré semen de mi verga mojada y le puse en el hoyo para que entrara con más facilidad, no batallé nada, mis dedos se fueron como si nada hasta el fondo, no tenía las nalgas tan duras mi tía, ni las tetas ni nada, pero era súper excitante todo eso, prefería estar con mi tía que con alguna amiga, siempre quise cogermela, que me enseñara los placeres del sexo.

Creo que me vengooo, sigueme dando beto, no pares!! Ohh!!

Salió un chorro de "agüita" por la pepa de mi tía y mi primo aun le seguía dando pero ya faltaba poco para que se viniera porque después de que se vino mi tía el dijo

También yo me vengo! – y se quedó quieto para soltar los chorros de semen dentro de mi tía…

Mientras mi tía y mi primo terminaban, el Joel se fue a bañar, cuando él salió nos metimos nosotros junto con mi tía y la enjabonamos y ella nos enjabonó a nosotros, ahí todavía le estuvimos restregando el pito por todo su cuerpo y sobándole las chichis otro rato, mi tía nos besó a los dos y nos dijo que desde ahora éramos sus sobrinos consentidos, pero que fuéramos muy discretos con eso porque si mi tío se daba cuenta nos mataba, ya que era muy celoso.

Al siguiente día ya no pasó nada porque mi mamá y mi tía llegaron a la casa, pero pues de todas formas nos seguimos divirtiendo (aunque no igual) en el rancho, nada superará lo que sucedió ese día.