Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Relato
Ordenar por:
Mas reciente
Menos reciente
Título
Categoría:
Relato
Categoría: Fantasías

EL GINECOLOGO Y LOS CALZONES DE MI ESPOSA

"Cuando mi esposa va con el ginecólogo a mi me excita que le muestre su panty y le examine su vagina."

 

Es una historia de un día que acompañé a mi esposa a su consulta ginecológica: ese día al salir de casa ella llevaba puesta una blusa blanca en donde apenas se podía ver su brasier blanco satinado, una mini faldita tableada roja de cuadros, una panty de algodón modelo bikini y zapatillas color blanco con un tacón bajo ya que debido a lo corto de su faldita, bastaba que se agachara un poco para que enseñara su deliciosa panty.

Al llegar con el ginecólogo ella fue al baño cuando regresó y se sentó en la sala de espera me di cuenta que traía puesta una tanga de encaje con una abertura por el frente y cuando nos tocó nuestro turno, pasamos con el ginecólogo y le expusimos que solo deseábamos que la revisara, nos dijo que pasáramos al cuarto y le avisáramos cuando estuviera lista, le comenté que no era necesario puesto que ya venía preparada, así es que solo se levantó la falda, se acostó en la mesa de exploración y cuando colocó sus piernas en los estribos para iniciar la revisión ginecológica su tanga se abrió mostrando su bella y deliciosa vagina, y buscando el mejor ángulo comencé a observarla.

Entonces el doctor comenzó a tocar sus labios mayores los cuales estaban abultados por la excitación, revisó el clítoris, tocó sus labios menores e introdujo un espejo vaginal en donde observó que había excitación por el flujo y le introdujo sus dedos para realizar el tacto vaginal, le preguntó a ella si la exploración le había causado esa excitación, pero contestó que no, que en el trayecto yo le había puesto la mano por debajo de su falda, y que le venía acariciando los labios exteriores, entonces le pregunté al doctor como se realizaba el tacto y le dije que por favor me enseñara, ya que ella estaba dispuesta y es mas que ella deseaba que yo aprendiera a explorarla ginecológicamente.

Entonces me esterilizó la manos con una solución, me coloqué unos guantes y le realicé el tacto vaginal pero en cierta forma tocaba puntos que sabía que a ella le excitaban, exploré su vagina en los lados mientras el doctor me indicaba que debía sentir con mis dedos y que no se debería sentir y en que parte, después de eso el ginecólogo comentó que todo estaba perfecto y después nos comentó que recomendaba una terapia vaginal para fortalecer los músculos interiores y evitar la incontinencia urinaria, por lo que nos trajo un aparato ejercitador que le introdujo en la vagina y le mostró como usarlo, la erótica escena era de una mujer de 36 años, guapa, de porte distinguido, alta, de complexión ligeramente robusta pero que a esa edad se ven mucho mas atractivas, recostada en una mesa de exploración ginecológica, vestida con blusa blanca, senos firmes y de buen tamaño, una faldita roja levantada, con unas piernas bien torneadas y abiertas para exploración, mostrando su tanga blanca con abertura en la vagina recién rasurada, un aparato ejercitador introducido en su vagina y haciendo movimientos con dicho aparato, después de un momento el doctor retiró el aparato y comenzó a limpiar la zona vulvar con una toalla los residuos de lubricante que le había colocado, le dije que no se molestara mucho, que me agradaría ayudarle, momento que aproveché para acariciar su pubis, tocar sus calzoncitos y jugar con mi dedo anular su clítoris introduciéndoselo un poco y mientras el doctor fué a buscar el empaque del aparato para llevarlo a casa, pude poner mi lengua en su vagina moviendola en forma circular hasta hacer que tuviera un rico orgasmo en mi lengua.

Después el doctor llegó y colocó la mesa de exploración en posición totalmente horizontal y le indicó que se recostara sobre su abdomen para tomarle su temperatura, le levanté la falda y dejé totalmente expuesta toda su tanga, se la bajé enrollándola hasta que el recto se pudiera ver y el ginecólogo lubricó el ano con su dedo introduciéndoselo un poquito y le introdujo un termómetro rectal después de un par de minutos el cual para mi me hubiera gustado hubiese sido un poco mas ya que esa escena era también muy erótica, retiró el termómetro y nuevamente me acomedí a limpiar el poco lubricante y le acomodé sus blancos calzoncitos.

Luego procedió a revisar los senos y nuevamente le pedí me enseñara a detectar alguna anomalía y entonces ella sentada en la mesa se desabrocho la blusa, se quito el brasier y el ginecólogo en el lado derecho y yo en el izquierdo comenzó a explicarme la forma de palpar el seno, aunque honestamente no le entendí mucho, lo importante era que ella disfrutara mis caricias.

Al finalizar le pregunté al ginecólogo el porque a veces ella sentía durante la penetración cierta molestia, y me dijo que tal vez era falta de lubricidad o que mi pene es ancho, por lo que me dijo que si no me incomodaba que la penetrara en el consultorio para ver si había algún problema durante el acto, por lo que acepté la propuesta, ese día yo llevaba puesto un bikini de algodón también blanco, me bajé los pantalones, entonces el doctor revisó mi pene, me puso gel lubricante en el pene ya erecto por haber apreciado la exploración y sentí una sensación muy agradable al tener su cálida mano poniéndome lubricante como si él me masturbara un poco, después ella se colocó de nuevo en posición de ginecológica y nuevamente se le abrió su tanga blanca exponiendo toda su vagina pudiéndose ver el orificio vaginal dilatado que deseaba intensamente ser penetrado, el doctor le aplicó un poco de gel en su vagina pero esta vez sus dedos los metía y sacaba para excitarla mejor y después separó un poco mas los lados de su calzoncito y tomando mi pene con su mano, la puso en la abertura de la vagina, el doctor había acondicionado la altura para que pudiera penetrarla estando yo de pié y ella en posición de exploración entonces el doctor guió la introducción del pene hasta que casi no hubo espacio y colocó su mano en una de mis nalgas mientras veía como era la penetración después bajó su mano hasta donde empezaba mi nalga y poco a poco dirigió sus dedos hacia la zona perianal.

Nos dijo que era para sentir que la penetración no tuviera desviación, pero yo creo que le gustaba observarme las nalgas y tocarlas un poco cuestión que no me molestaba, además de ver mi pene erecto, así estuvimos un rato hasta que llegó el orgasmo, mi esposa y yo nos estremecimos ya que la penetración era perfecta mi pene jamás pudo estar mas adentro, logré sentir como derramaba su liquido vaginal y ella sintió como estallaba el semen dentro de su vagina, después de un momento retire el pene aún erecto y el doctor amablemente le pasó a ella unas toallas desechables para que limpiara parte del flujo que había salido mientras que nos comentaba que como mi pene es ancho tal vez eso causaba molestia pero que en realidad no veía ningún problema, y me dijo que tenía que medir mi pene para comparar con el diámetro de la vagina, en ese momento mi pene estaba bajándose y entonces el dijo que tenía que tomar una muestra de semen por lo que el tomó un poco mas de lubricante y con su mano comenzó a tocarlo sutilmente hasta que lo tuvo por completo agarrado y apretándolo delicada y firmemente, comenzó a mover su mano a lo largo de mi pene masturbándome, sentía como se excitaba y podía oír su agitada respiración el comenzó a sentir que ya iba a eyacular y acercó un recipiente y colocó el semen, y vi que eso lo provocó también excitación a mi esposa, después el doctor me proporcionó una toalla húmeda para limpiar el semen y me dio otra para que limpiara toda la pelvis y labios exteriores de su vagina, sentí como sus calzoncitos estaban mojados traté de secarlos un poco y cuando se bajó de la mesa de exploración me acomedí a arreglárselos por lo que me puse en cuclillas apreciando desde abajo su vagina que se podía entrever por la abertura de sus calzoncitos que estando con las piernas cerradas se unían los lados y pareciera como si el encaje de la abertura fuera un delicioso adorno. Al terminar de arreglarle los calzones a mi esposa ella se puso el brasier, la blusa y se arregló la minifalda.

Al salir fue nuevamente al sanitario para secarse un poco el flujo vaginal que estaba saliendo tanto por las relaciones como por la excitación que tenía debido a la forma en que le revisamos su vagina y senos, y también para quitarse su tanga y ponerse nuevamente su panty blanca de corte francés y un mini pantyprotector, la esperé y mientras me estaba despidiendo del doctor, ella regresó del sanitario y se agachó levemente para tomar una revista que estaba sobre una mesita y al hacer ese movimiento por lo corto de su faldita fácilmente se le veía su panty hasta el inicio de la parte trasera del puente de algodón transparentándose deliciosamente sus nalguitas, ella se sentó en la sala y descuidadamente abrió sus piernas enseñando los calzones mostrando claramente el inicio del puente de algodón que las pantaletas tienen a la altura del clítoris y además se podía apreciar como se remarcaban sus labios vaginales, en eso me percaté como el ginecólogo le estaba observando sus blancos y semitransparentes calzoncitos, y le dijo que la esperaba la próxima semana para su examen de papanicolau y un exudado vaginal pero acompañada por mi.

Datos del Relato
  • Categoría: Fantasías
  • Media: 10
  • Votos: 1
  • Envios: 0
  • Lecturas: 1715
  • Valoración:
  •  
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 3.143.237.149

0 comentarios. Página 1 de 0
Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Relatos: 38.445
»Autores Activos: 2.272
»Total Comentarios: 11.896
»Total Votos: 512.051
»Total Envios 21.925
»Total Lecturas 104.850.608