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Categoría: Transexuales

Transformación a mujer

Hola mi nombre es Johana, empezaré por describirme: soy una chica de 26 años, tez blanca, cabello castaño hasta los hombros, delgada, estatura mediana, pompudita, cintura chiquita, bubis medianas, a decir verdad soy bonita, a lo que se sacar provecho.
Ok pues no siempre fui mujer, nací siendo un chico y a continuación les cuento sobre mi mágica transformación.
A mis 20 años aún era virgen y gay de closet, entonces conocí a Samantha, una mujer de 30 años muy hermosa y bien conservada con la que pronto hice una muy bonita amistad con quien compartí mi secreto, el día que se lo confesé me llevé una gran sorpresa, ella también fue un chico y se había transformado en una mujer! Y lo más impactante fue la manera en que se transformó según me platicó, en ese momento me pareció una fantasía y no le creí, pero hoy en día pues mi transformación fue de la misma manera y sé que sonará a pura fantasía pero así fue.
Pues bien les platico: existe en las profundidades del Amazonas un templo escondido al cual se accede por una cueva con el permiso de una tribu que habita en el lugar, es el hechicero de la tribu quien conoce la entrada al templo y quien guarda el secreto, en ese templo mediante un ritual se lleva a cabo la transformación de hombre mujer. Ok pues mi experiencia fue hasta los 21 años, después de ahorrar para el viaje, arreglar mi pasaporte, etc.
El viaje fue toda una aventura: dos vuelos, dos buses, una larga caminata por la selva y llegamos al lugar, el primer día descansamos de tanto ajetreo para estar relajada ya que para lo que venía a continuación necesitaba estar entera.
El hechicero me entrevistó, se aseguró de que tuviera realmente el deseo y convicción de mi transformación, me advirtió de las consecuencias de mi nueva vida, ah y algo importante: para que la magia hiciera efecto tenía que ser 100% virgen, no haber estado nunca ni con mujeres ni con hombres, requisito que yo cumplía, me hizo una limpia de purificación que necesitaba para acceder al templo, me dio indicaciones de lo que haría en el templo y estuve lista.
Pues bien, para hacer el ritual tenía que vestirme de nena y arreglarme tan bonita como quisiera ser de mujer y así lo hice, me puse una tanga blanca, un vestido de vuelo, tacones, mi cabello lo tenía largo y mi amiga me hizo un peinado muy bonito tipo trenzado, ok después de acceder por una cueva, entramos al misterioso templo el hechicero, Samantha y yo, en el que hice el ritual que a continuación les platico: entramos a un salón que tenía al fondo un altar con una esfinge humana de piedra la cual estaba de pie, su rostro era una mezcla de humano, reptil y demonio, alto como de 2 metros, musculoso y con un pene en erección no muy largo pero sí extremadamente grueso como de unos 4cm de diámetro en la cabecita y el cuerpo como de 6ccm y en la base creo que 7 u 8cm, me asusté y pensé en arrepentirme pero ya estaba ahí y continué.
Frente a la esfinge estaba una mesa cuadrada que tenía 4 pequeños circulos tipo botones sobre los que tuve que poner mis rodillas y mis manos oprimiendo los botones quedando en cuatro con las piernas abiertas y dando mis pompis a la esfinge, claro que me pusieron unos coginsitos bajo mis rodillas para estar más cómoda, y había otro círculo al frente el cual no debía tocar ahún, así en cuatro fui repitiendo unos rezos que me iba diciendo el hechicero, mientras yo repetía los rezos, Samantha me subió el vestido, me quitó la tanga, me untó en mi ano lubricante que ya llevábamos preparado pues ya sabía lo que vendría, me metió un dedo y dí un saltito, enseguida dos dedos y me quejé, me dijo: tranquila relájate, me empezó a meter y sacar despacito, luego haciendo círculos para dilatarme, los metía hasta el fondo, fuerte, luego suave, luego fuerte, yo repetía los rezos a la vez que gemía, después que terminé de rezar, llegó el momento desicivo, el hechicero oprimió el quinto botón y la mesa se empezó a recorrer por unos rieles hacia la esfinge, era un mecanismo que funcionaba como con agua ya que podía escuchar como corría el agua bajo el piso, dentro de las paredes, bajo la mesa y dentro de la esfinge, el pene de la esfinge de vertical pasó a horizontal y Samantha lo tomó con su mano y lo apuntó hacia mí, la mesa siguió recorriendose lentamente hasta encontrarme con mi ano topando en lamenorme cabeza del pene, entonces oprimieron de nuevo el botón y se detuvo, los brazos de la esfinge se levantaron hacia mi y Samantha los ajustó tomándome así la esfinge de mi cintura (ya conocía como funcionaba el mecanismo), oprimieron de nuevo el botón y se inmovilizó todo, Samantha y el hechicero se colocaron frente a mí solamente a observar.
Se empezó a escuchar como corría el agua bajo el piso haciendo un sonido cada vez más fuerte, de pronto la mesa dio un pequeño saltito, me asusté y grité pero me controlé, de pronto sentí como la esfinge empezó a vibrar tantito y luego a moverse tantito presionando su pene en mi entrada, sólo fue una ligera presión y se movió tantito hacia atrás, luego hacia adelante un poquito más y sentí un poquito más de presión, Samantha me dijo: relájate y acomódate bien para que entre y yo ok
Empezó a dar pequeños empujoncitos cada vez mas fuertecitos solamente haciendo tantita presión pero sin entrar, así como 10 minutos, Samantha enseguida dejó caer sobre el pene un buen de lubricante, de pronto el sonido del agua se intensificó y para mi sorpresa la esfinge empezó a presionar hacia adelante más y más sin regresar atrás, empecé a sentir como mi esfinter se abría, sensación que aún no conocía ya que era virgen y grité HAAAAAAAAAYYYYY!! El mecanismo continuó y me entró la cabeza, sentía que me iba romper mi anito, por primera vez sentía esa sensación de dolor con el esfinter abierto y vaya que me abrió pues era extremadamente grueso, se detuvo como 10 segundos y yo seguía gritando HAAAAAAAAYYYYY ME DUELEEEE!, de nuevo el sonido del agua y se movió tantito hacia atrás, de pronto un sonido de agua más fuerte y HAAAAAAA! Una arremetida más profunda, el pene aumentaba su grosor mientras más cerca de la base, me partía en dos, arremetió, se regresó tantito y volvió a empujar esta vez hasta el fondo, esta vez me dolió mucho más, la base era megagruesa, sentí como mi esfinter no resistió y se rompió.
En ese momento tenía que repetir otros rezos de los que solo recuerdo algo así como: Señor te entrego mi virginidad y mi dolor y te pido que me conviertas en mujer, no recuerdo que más, apenas y podía repetir los rezos entre gritos, me dolía mucho, de pronto me dí cuenta que tenía hilitos de sangre escurriendo por mis piernas y me asusté, Samantha me tranquilizó y me dijo que tenía que ser fuerte pues faltaba más, de pronto la mesa empezó a moverse junto con la esfinge empezando el afuera adentro afuera adentro, algo suave y se empezó a intensificar cada vez más fuerte, yo solo gritaba tan fuerte como podía, me estaba rompiendo mi más esfinter y sangré un poquito más, me arremetía con fuerza, así como 10 minutos hasta que de pronto la mesa se inclinó hacia la esfinge replegándome así más con mi propio peso y dio una arremetida como simulando un orgasmo, para mi sorpresa, el pene empesó a salirse más de la esfinge liberando otra base aún más gruesa, estuve a punto de desmayarme, intenté safarme pero estaba atorada entre los brazos de la esfinge y aparte me resbalaba en la mesa, lograba subir tantito y resbalaba, la esfinge daba arremetidas que duraban como 10 segundos con la base adentro, así varias hasta que su pene se empezó a retractar, la mesa se enderezó, la esfinge abrió sus brazos y yo me empecé a safar hacia adelante despacito pues me dolía hasta que se salió, me toqué para checar y vaya susto! Estaba muy dilatado aún, Samantaha y el hechicero me ayudaron a bajar de la mesa, apenas podía sostenerme de pie y salimos del templo.
Estuvimos varios días estuvimos instaladas en un hotel para reponerme y vaya sorpresa! Desde el siguiente día del ritual y en un lapso de 3 meses mientras mi esfinter se iba reponiendo, mi pene y mis bolas se encogían y se arrugaban haciéndose pequeñitos y dejé de sentirlos, se me saltaron los senos como dos botoncitos, luego me empezaron a crecer, mi voz cambiaba, mis caderas se ensanchaban, mi pene y mis bolas se convirtieron en unas tripitas secas para luego desprenderse descubriendo abajo una hermosa vagina rosada muy cerradita con labios pequeñitos, con su himen intacto, mi bello corporal desapareció, mis facciones se fueron haciendo más delicadas, hasta convertirme en una mujer.
Hoy en día vivo mi vida muy feliz como mujer y espero encontrar mi príncipe azul.
Gracias si leíste hasta el final, me encantaría leer comentarios.

Datos del Relato
  • Categoría: Transexuales
  • Media: 8.5
  • Votos: 2
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Comentarios


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3 comentarios. Página 1 de 1
manuel
invitado-manuel 13-05-2022 13:33:01

no pues muy bonita historia exagerada pero bonita

raul
invitado-raul 17-02-2022 02:28:54

que padre seria si fuera cierto

raul
invitado-raul 17-02-2022 02:28:15

Muy bonita fantasia

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