Hace un año aproximadamente llevé a mi caballo al potrero para que pastara y mientras comía el caballo me metí al arroyo para darme un remojon para quitarme el calor, después me recoste un rato bajo la sombra de un árbol, voltie a ver a mi caballo y vi que tenía bien parada su verga dejando ver el tamaño unos 40 cms por lo menos me levanté y me dirigí al caballo que por cierto era muy manso se me hacía agua la boca de ver tan tremendo miembro, me agache y tomé con mi mano derecha aquel tremendo miembro por primera vez en mi vida y el caballo se puso un poco nervioso pero lo tranquilice y empecé a masturbarlo despacio poniendo saliba en mi mano y el caballo reaccionó un poco haciendo un movimiento como con ganas de coger yo acerque mi mi boca a la cabeza de aquel miembro habri toda mi boca y con un poco de trabajo la metí en mi boca y chupe durante unos minutos sintiendo aquello a todo lo que da, me animé y me desnude completamente y me di la vuelta agachandome puse la cabeza en la entrada de mi culo le puse saliba el caballo se movió como queriendo petetrarme pero por más que lo intentó y aún yo ayudando no pudo penetrarme yo ya temblaba de exitacion deseaba sentir aquello dentro de mi culo, traté otro rato pero fue imposible me di la vuelta y lo tome con mis manos y lo masturbe más rápido con manos y boca hasta que sentí la venida en mi boca y cara nunca me imagine la cantidad de aquella corrida que me llenó la boca y cara chorreando en mi pecho no se que tanto trague pero me imagino que un medio litro por lo menos lo exprimi hasta la última gota y poco a poco se fue poniendo pequeña hasta desaparecer por completo en su envoltura, todavía saboreando el semen me fui al arroyo y me duche limpiando todo mi cuerpo de aquel primer encuentro con el que desde aquel día sería mi amante, así termino éste primer relato después les contaré como logré que por fin me penetrara una parte de aquellos 40 cms, hasta la próxima.