Cierto dia pase a la cantina a tomarme unas cervezas, estuve platicando con un amigo de ocasion. A eso de las 11 de la noche nos dijeros que iba a cerrar el bar. Como teniamos ganas de seguir tomando nos dirigimos a la zona de congales. Llegamos a un congal de categoria intermedia, no lujoso pero tampoco jodido. Pedimos unas cubas, el mesero nos pregunto que si queriamos un par de putas. Dijimos que no, solo queriamos tomar un rato y retirarnos. Despues de una media hora paso frente a nosotros una mujer que me dejo totalmente hipnotizado, solo vestia unas zapatillas de tacon alto y un neglige color negro trasparente. Se le veia todo, sus nalgas preciosas, sus tetas y la panochita, sus piernas bien macizas y curvilineas. Fue tal la impresion que no me pude resistir. La mande llamar y estuvimos platicando un buen rato, le dije que estaba interesado en tratarla mas formalmente. Le pedi su domicilio para visitarla. Mi amigo de ocasion y yo nos retiramos. Al dia siguiente regrese solo yo de nuevo al congal, al llegar le pregunte a una de las putas por Laura, asi se llama, me contesto que en ese momento se encontraba en uno de los cuartos con un cliente. Al escuchar eso me exite bastante y la verga se me puso bien dura. De solo pensar que en esos momentos le estaban metiendo la verga, senti una extraña sensacion de felicidad y pense que en menos de un dia y ya me hizo cornudo la mujer de la que me he enamorado. Actualmente estamos viviendo juntos. Ella dice que me ama y yo tambien a ella. Seguido voy al congal y me encanta cuando un cliente se la lleva al cuarto. A veces mi mujer convence al cliente para que yo este presente y pueda ver como le meten la verga. Bueno eso es todo. Desde el primer dia supe que mi destino era ser cornudo pero feliz, muy feliz.